Hallan muertos a los dos operarios sepultados tras caerles el forjado de un edificio en rehabilitación en Madrid

Los Bomberos han hallado, después de ocho horas de búsqueda, los cuerpos sin vida de los dos trabajadores sepultados tras derrumbarse parte de los forjados de un edificio en obras situado en la confluencia entre las calles de Lezama y Llodio, en las inmediaciones de la avenida del Cardenal de Herrera Oria de Madrid.

Poco después de las 19.30 horas, Emergencias ha confirmado que los rescatadores han encontrado los cuerpos de estos dos hombres. En virtud de los testimonios de sus compañeros, uno de ellos tendría la nacionalidad colombiana y otro es natural de Níger. A ambos les sorprendió el colapso de las plantas superiores del edificio.

Según narraron testigos y los equipos de rescate, estos dos hombres estaban trabajando en la rehabilitación del inmueble en la cuarta planta cuando se derrumbaron los forjados de las plantas quinta y sexta, cayéndoles encima una placa de hormigón de unas ocho toneladas. El siniestro, igualmente, afecto a la estabilidad del edificio, complicando las labores de rescate.

Según han detallado fuentes municipales consultadas por El Confidencial, un tercer operario ha sido rescatado y trasladado al hospital. Como consecuencia del suceso, este hombre ha resultado herido de gravedad y presenta, al margen de exploraciones médicas más detalladas, una fractura en la pierna y múltiples contusiones.

Los servicios de Emergencia, una vez que saltó la alarma, rápidamente se han desplazado hasta el lugar, muy cercano a una de las avenidas más grandes de la capital, y hasta donde también ha llegado el alcalde de Madrid, José Luis Martínez Almeida, tras conocer los hechos, que tuvieron lugar sobre las 11.15 horas. En ese momento, se produjo un gran estruendo en la zona.

En declaraciones a los medios de comunicación presentes, y recogidas por Efe, el primer edil ha avanzado que ambos trabajadores quedaron sepultados bajo una gran placa de hormigón de unas ocho toneladas y ya entonces fue pesimista con sus pronósticos. "Todo apunta" a que podrían haber muerto, dijo Almeida a mediodía, vaticinio que ha terminado por confirmarse a última hora de la tarde.

El inmueble, en el momento en el que han colapsado los forjados, no estaba ocupado ni siendo utilizado, más allá de contar en su interior con los operarios encargados de acometer las tareas propias de la rehabilitación. De hecho, únicamente tenía en pie su estructura y era prácticamente un esqueleto después de que se hubieran vaciado las diferentes plantas para acometer dicho proyecto.

El edificio en el que ha tenido lugar el siniestro era un antiguo complejo de oficinas que albergaba las instalaciones de una gran empresa aseguradora. No obstante, y como ocurre con otros inmuebles de este tipo en la capital, estaba siendo objeto de una rehabilitación prácticamente integral antes de cambiar de uso y, como informó El Confidencial, ser convertido en viviendas.