Anulan una licitación de 90 millones de la Comunidad de Madrid por precariedad

El Tribunal Administrativo de la Contratación Pública de Madrid ha anulado una megalicitación de servicios de limpieza de 13 centros de salud y siete hospitales madrileños. Los pliegos del concurso público presentaban un precio muy inferior con respecto a los costes salariales reales, y esto iba directamente en detrimento de los trabajadores de limpieza. Además, desde la Administración no se tuvo en cuenta que cada hospital tiene un convenio propio con sus trabajadores de limpieza.

El concurso se publicó en el portal de contratación madrileño el 3 de junio de 2020 con un valor estimado de 90 millones de euros. Se dividió en siete lotes entre los cuales se reparten 13 centros de salud y siete hospitales, entre ellos, el Hospital Universitario Ramón y Cajal, el Gregorio Marañón, el Infantil Niño Jesús y La Princesa.

Tanto la patronal de limpieza Aspel como el sindicato CCOO recurrieron el concurso al detectar la insuficiencia económica de este. Los recursos fueron estimados en agosto y desde el portal de contratación se ha suspendido el concurso hasta que se acuerde expresamente el levantamiento de la suspensión. Desde la Comunidad de Madrid, no se ha facilitado una fecha para la reapertura de este.

Según Pedro Garijo, secretario general de Construcciones y Servicios de CCOO en Madrid, había casos en los que esta deficiencia superaba en un 50% el coste inicial presupuestado. Señala que se cometió el error de redactar el concurso público sin tener en cuenta que cada hospital tiene un convenio distinto con sus trabajadores de limpieza.

En este sentido, afirma que el coste publicado en el contrato era muy inferior al de los convenios propios que tiene cada centro hospitalario. Desde el sindicato, denuncian que los pliegos tampoco recogían de manera correcta y actualizada las plantillas actuales, ni los contratos de los trabajadores ni las antigüedades de los mismos.

"Hemos trabajado junto con los sanitarios contra la pandemia y no creo que esta sea la recompensa que merecen nuestros trabajadores"

"No puede ser que nos aplaudan cuando en medio de la pandemia se limpiaban los hospitales, en algunos casos hasta sin protecciones contra el virus, y ahora se nos pague con este tipo de contrataciones públicas, que realmente son concursos a la baja", explica Juan Díez de los Ríos, presidente de Aspel.

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"Hemos trabajado junto con los sanitarios contra la pandemia y no creo que esta sea la recompensa que merecen nuestros trabajadores", incide Díez de los Ríos. Cree que es un disparate que se publiquen este tipo de licitaciones con esta serie de errores. De hecho, plantea que en concreto esta licitación se ha redactado sin conocer el sector y que nada impedía a la Administración consultar al mercado o a la misma patronal de la limpieza.

Precisamente, en 2016 se redactó con fondos europeos una guía para las organizaciones adjudicadoras de contratos de servicio de limpieza. A pesar de la existencia de esta guía y la disponibilidad de la patronal, Díez de los Ríos no termina de entender por qué la Administración madrileña no ha contado con Aspel para este tipo de situaciones, y más durante una pandemia, siendo esencial el sector de la limpieza.

Valencia rectifica un contrato de 474 millones

Este mismo mes, se ha conocido que la Consejería de Sanidad y Salud Pública valenciana va a tener que modificar el megacontrato para la limpieza de los hospitales de la Comunidad Valenciana, con un valor de 474 millones de euros. La contratación, que ya levantó criticas desde su publicación, fue anulada por el Tribunal Administrativo Central de Recursos Contractuales tras estimar un recurso también presentado por Aspel.

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"Es intolerable que salga un concurso por debajo económicamente del anterior", explicaba Díez de los Ríos. La patronal también actuó en este caso junto a sindicatos porque este megacontrato iba a perjudicar directamente a los profesionales de la limpieza.