Plan anticontaminación: los vehículos C con dos pasajeros podrán pasar a Madrid Central

Madrid estrena una nueva estrategia de lucha contra la contaminación. El alcalde, José Luis Martínez-Almeida, presentó este lunes las lineas maestras del plan bautizado como ‘Madrid 360’ —el nuevo plan del Ayuntamiento— que afectará a los 21 distritos de la ciudad y que contiene en torno a 200 medidas que empezarán a aplicarse en los próximos meses. Entre ellas: nuevas peatonalizaciones de calles, menores costes en aparcamientos dependientes del consistorio, nuevos carriles bus-VAO (con el foco puesto en Plaza Elíptica), la renovación de la flota con ayudas de 200 millones de euros y un ambicioso plan para sustituir las calderas de carbón (el 100% en esta legislatura) y de las de gasoleo (para que en torno al 50% se eliminen en estos años).

Aunque el proyecto está llamado a ser una “estrategia integral” para toda la ciudad —como insistió Martínez-Almeida— muchas miradas estaban encima de Madrid Central (el gran proyecto del anterior Ayuntamiento de Manuela Carmena) que el PP prometió revertir en la campaña electoral. Aunque en términos generales este superárea de prioridad residencial se mantendrá, el plan incorpora dos novedades que pueden afectar a muchos usuarios.

Por un lado, los vehículos con etiqueta C de alta ocupación (es decir, con dos o más ocupantes) podrán cruzar Madrid Central como hacen ahora los híbridos o ECO. El aparcamiento en superficie, eso sí, se mantiene como hasta ahora y tanto los C como los B deberán utilizar los aparcamientos. El alcalde aseguró que “en términos de contaminación” el impacto “será neutro” porque posibilitará una opción de coche compartido y “sacará vehículos de la ciudad de Madrid”, lo que en “términos de circulación” podría ser incluso “positivo”. El objetivo de esta medida es impulsar la filosofía del coche compartido, según explicó Almeida.

Además, los comerciantes de Madrid Central (en torno a 9.000) podrán entrar en la zona en las mismas circunstancias en las que acceden los residentes. Una característica de las antiguas APR puestas en marcha por gobiernos del PP y que constaba entre las principales reivindicaciones de la plataforma de afectados por Madrid Central. Los aparcamientos de la zona que son del Ayuntamiento bajarán los precios para recortar “el peaje” que supone desplazarse al centro en vehículo privado, aunque el alcalde no ha especificado aun cifras exactas.

La otra gran novedad incorporada en el distrito Centro es la creación de “dos líneas cero” de la EMT, cero emisiones y cero coste para los usuarios que hará recorridos de norte a sur y de este a oeste. La línea cero 1 hará el eje San Bernardo-Puerta de Toledo, mientras que la línea Cero 2 recorrerá Moncloa-Avenida Felipe II. Habrá una tercera linea perimetral —ya con coste— que recorrerá todo el perímetro del distrito Centro.

Como publicó este diario, la peatonalización será una de las apuestas del nuevo Ayuntamiento. A la anunciada en toda la Puerta del Sol (desde la calle Sevilla hasta el cruce con Alcalá, toda la Carrera de San Jerónimo y de la calle Mayor hasta Esparteros) se une el estudio que el consistorio está haciendo ya en las calles Hortaleza y Fuencarral. Además, Almeida insistió en el nuevo pulmón verde con el que contará Madrid a través del bosque metropolitano en el que se crearan 600 hectáreas de corona forestal con la plantación de 100.000 árboles. El presupuesto estimado para la primera fase es de 20 millones de euros hasta 2023.

Entre las medidas esbozadas por el alcalde también estuvo el impulso de nuevos carriles bus-VAO con una especial reclamación para “un lugar olvidado” en el distrito de Carabanchel, aseguró Almeida, en referencia a la plaza Elíptica. Pidió ayuda al Gobierno estatal y a la Comunidad de Madrid para implementar estos carriles de alta ocupación en el mayor centro de circulación de autobuses de la ciudad, insistiendo en que “todos los madrileños tienen el mismo derecho a respirar el mejor aire”.

Entre las iniciativas del consistorio también están las referidas al compromiso con eliminar las calderas de carbón y de gasóleo en esta legislatura. En el caso de las primeras, el Ayuntamiento asegura que eliminará el cien por cien, mientras que en el segundo aspira a que al término de la legislatura se eliminen el 50%.