Gabilondo entra en campaña: “Valentía la del PSOE, que presenta un independiente”

El PSOE estrena campaña electoral en Madrid. A las siete en punto de la tarde de este miércoles, Pedro Sánchez presentó al candidato oficial con el que los socialistas pretenden reconquistar la Comunidad de Madrid dos semanas después de que el secretario general apartara fulminantemente de la carrera por la Real Casa de Correos a Tomás Gómez. Elexministro Ángel Gabilondo, que tendió la mano a todos para que nadie "se sienta excluido", se coronó como candidato del PSM a la Comunidad de Madrid dando las gracias al PSOE por la “valentía” que ha tenido de designarlo, “de presentar un candidato independiente, aunque no indiferente”.

Los socialistas eligieron para la puesta de largo del candidato impuesto desde Ferraz un escenario demasiado reducido, más propio de un candidato municipal que del candidato a la Comunidad, con el que sólo se pretendía asegurar el lleno total. En primera fila estaban Carme Chacón, la única de la Ejecutiva Federal que afeó a Sánchez la mano dura con Gómez, y Pedro Zerolo, que pidió sin tapujos que el sustituto se eligiera a través de unas primarias abiertas. No faltó nadie de la Comisión Gestora que dirige la federación socialista desde que Sánchez pegó un puño en la mesa de Callao. Hubo muchos militantes que siguieron el mitin del exministro, que apeló al sentido de la “responsabilidad” para ganar Madrid.

Inauguró el acto el candidato a la Alcaldía de Madrid, Antonio Miguel Carmona, que habló de Sánchez como “una promesa”. Tras gritar convencido de que Madrid "volverá a ser socialista", Carmona cedió la palabra al secretario general del PSOE, que comenzó su intervención sacando pecho de su primer combate en el debate del estado de la nación que protagonizó el martes. “Rajoy ha perdido el debate”, gritó, ante un público entregado que no le gritó “presidente” hasta cuarenta y cinco minutos después de que comenzara el acto.

Sánchez agradeció a Gabilondo que haya aceptado ser el bombero encargado de apagar el fuego que provocó la decapitación de Tomás Gómez como secretario general del PSM tres meses antes de las elecciones autonómicas. “Gracias, Ángel, por los madrileños, porque vas a ser un excelente presidente de la Comunidad de Madrid. Y gracias, Ángel, como ciudadano, por dar la cara en un momento de desconfianza en la política. Gracias por demostrar el compromiso cuando más es fácil ponerse de perfil y no comprometerse”, le confesó públicamente.

El más aplaudido de la tarde fue Gabilondo, el más esperado, el último en intervenir. En su primer mitin como candidato a la Presidencia de la Comunidad de Madrid, reconoció que se sentía “muy orgulloso” del reto que le había puesto el PSOE y dio a entender que no fue fácil aceptarlo. “Mucha gente me ha agradecido mi valentía. No sé si mi gesto es intrépido, osado o insensato. Pero quiero decirles que yo no soy especialmente valiente”. La valentía, según las palabras del catedrático, es “de los socialistas” que han pensado en él para reconquistar la Comunidad de Madrid, en manos de los populares desde hace más de dos décadas.

Lleno una hora antes de que comenzara el acto

Gabilondo se comprometió con los militantes a construir un nuevo Madrid y reconoció que “la honradez” es la mejor manera de hacer política. “Queremos el poder no sólo para hacer. Estamos dispuestos y decimos sí. No es un sí indiferenciado. Sí a las políticas públicas, a las instituciones justas, al compromiso con los deberes cívicos. No se trata de reivindicar a las instituciones, sino que sean justas, que generen capacidad y credibilidad”.

Los voluntarios avisaban de que el escenario estaba prácticamente lleno una hora antes de que comenzara el acto. Hubo muchos militantes –la media de edad superaba los 45 años– que escucharon al recién estrenado candidato desde la calle. Casi todos llegaron a la sede de la Fundación ONCE en una manada de autobuses que los soltaba en la puerta. A las siete en punto se produjo un tapón en la puerta de entrada que provocó empujones leves y malas palabras paras los organizadores. Los protagonistas del acto –Sánchez, Gabilondo y Carmona–, entraron por la puerta de atrás, evitaron los altercados y, de paso, sortearon las preguntas de los medios de comunicación.