Raquel Sánchez reitera que ni ADIF ni Renfe recibieron aviso del incendio del tren de Bejís

La ministra de Tranportes, Raquel Sánchez, reiteró este miércoles que ni ADIF ni Renfe recibieron ninguna notificación de alerta sobre el impacto del incendio de Bejís en el tren que se adentró en las llamas y pasó la pelota de la responsabilidad del aviso a los cuerpos de seguridad del Estado y otras "administraciones, pues son los que tienen conocimiento de los incidentes en el entorno que puedan llegar afectar a la vía". Sánchez compareció en el Congreso a petición propia y de grupos de la oposición para dar explicaciones sobre el incidente ocurrido el pasado 16 de agosto, en el que hubo más de una veintena de heridos, dos de ellos todavía hospitalizados.

La ministra defendió la actuación de la maquinista, informó de que un grupo de pasajeros rompió la ventana de emergencia del tercer vagón, activaron el freno de emergencia y decidió abandonar el vehículo, lo que retrasó el regreso del convoy a la estación de Caudiel. La propia maquinista recogió a los heridos en el trayecto de vuelta, pues ninguno de los viajeros que permanecieron en el interior resultaron ilesos, según la ministra.

Los grupos parlamentarios coinciden en advertir fallos de comunicación con Emergencias

Sánchez insistió en que las empresas estatales cumplieron con todos los protocolos de seguridad y que además de no recibir notificaciones de ningún incendio tampoco fueron informadas del cambio drástico de las condiciones del incendio por la mañana ni de que había zonas que estaba siendo desalojadas. "Un tren hizo el mismo recorrido por la mañana sin detectar ninguna complicación", aseguró. "La notificación de la incidencia pueden provenir de múltiples fuentes entre las cuales Cuerpos de Seguridad del Estado o de las diferentes administraciones, pues son las que tienen conocimiento de los incidentes en el entorno que puedan llegar afectar a la vía".

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La frase puede interpretarse como el traspaso de la responsabilidad a las instituciones que estaban al cargo de la extinción del incendio. La dirección del puesto de mando avanzado le correspondía al Consorcio Provincial de Bomberos de Castellón, a su vez tutelado por la Agencia Valenciana de Emergencias, dependiente de la Generalitat. La Administración valenciana ha encargado un informe para conocer toda la secuencia de los hechos, del que todavía se desconoce su ha sido elaborado. El incidente está judicializado por un Juzgado de Borriana (castellón) y la Guardia Civil, en calidad de Policía Judicial, está investigando los hechos.

Una de las incógnitas en las primeras horas era conocer qué había ocurrido dentro del tren. La ministra reiteró el relato ya difundido por Renfe de que la maquinista fue la que informó por primera vez al puesto de mando de la presencia de las llamas, paralizó el vehículo y pidió permiso para regresar, que le fue concedido. En el cambio de cabina de la conductora, que iba sola y sin asistencia de ningún interventor, algunos pasajeros se pusieron nerviosos y optaron por salir al exterior. Sánchez insistió en que la maquinista les informó de que iba a dar marcha atrás, pero la desoyeron. La activación del freno de emergencia retrasó la puesta en marcha y elevó la tensión en el interior. La maquinista sufrió quemaduras en los dos brazos que pueden estar relacionadas con la recogida de pasajeros heridos.

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La ministra de Transportes señaló que su departamento está trabajando en el análisis del incidente de 16 de agosto para poder "extraer lecciones y puntos de mejora". Se abrió a estudiar cambios legales "para que cualquier situación anómala en los territorios sobre los que discurre una infraestructura deba ser comunicada al titular de dicha infraestructura". En este sentido, anunció próximas reuniones con los responsables de la Generalitat valenciana y la puesta en marcha de simulacros y ensayos para "lograr mejor entendimiento por parte de los departamentos responsables de protección civil de cada comunidad autónoma".

Fallos de coordinación

En la intervención de los grupos presentes en la Comisión de Transportes del Congreso de los Diputados, tanto Ciudadanos, como Compromís o Teruel Existe señalaron la existencia de fallos de comunicación entre las administraciones y reclamaron cambios para evitar que pueda producirse incidente similar "que pudo acabar en una tragedia", señaló el parlamentario de Compromís, Joan Baldoví. "Falló la detección o la coordinación y la comunicación", desde el puesto de mando avanzado, insistió Marisa Saavedra, diputada de Unidas Podemos por Castellón. Los parlamentarios reprocharon la ausencia de un interventor que apoyase a la maquinista, un hecho que el diputado de Teruel Existe, Tomás Guitarte, atribuyó a los problemas de infrainversión y déficit crónico en la línea Valencia-Zaragoza y en otras líneas de media distancia en España. Saavedra añadió que si hubiera habido personal ferroviario en estaciones como la de Caudiel se podría haber detectado la cercanía del incendio.

Vox responsabilizó al Gobierno de no haber avisado a ADIF y Renfe de la existencia del incendio. La formación derechista aludió al "retraso en la transmisión de alertas entre Administraciones". "Por qué se permitió que el tren se adentrara en la llamas", preguntó Patricia de las Heras, tras enseñar un mapa de calor de la Unidad Militar de Emergencias (UME). La parlamentaria reprochó también que la Agencia Valenciana de Emergencias remitiese al Consorcio Provincial de Bomberos de Castellón como responsable de decidir un corte de vía.

El diputado popular Óscar Clavell criticó que el tren saliese hacia el incendio tres horas después de que se hubiese desalojado la localidad de Bejís. "El tren nunca debió salir de Valencia. No busquen culpables entre la maquinista y el pasaje", dijo el parlamentario. "¿Qué organismo debio notificar el incendio de Bejís? ¿Va usted a reclamar responsabilidades?¿Qué expicaciones les va a dar la Generalitat valenciana?", interpeló Clavell a la ministra Sánchez.