El PSOE arranca la 'operación Valencia' sin cambiar de candidata (Sandra Gómez)

El relevo en la Delegación del Gobierno en la Comunidad Valenciana tiene doble lectura política. La marcha al Senado por elección territorial de Gloria Calero, considerada afín al abalismo, y su sustitución por Pilar Bernabé, concejala socialista en el Ayuntamiento de Valencia, han sido interpretadas en las filas del PSPV-PSOE como un movimiento para reforzar el perfil político del puesto a un año de elecciones autonómicas y municipales. Según confirman fuentes de la dirección socialista, Bernabé (Valencia, 1979) llega con el encargo de hacer de enlace y elevar la coordinación entre Moncloa y los ministerios, la Generalitat y el consistorio valenciano, donde los de Ximo Puig gobiernan en coalición con Compromís, que ganó la alcaldía como primera fuerza para Joan Ribó.

La clave de Valencia ciudad no es gratuita. Los socialistas, liderados aquí por la vicealcaldesa, Sandra Gómez, se juegan no solamente intentar recuperar posiciones y repetir coalición con Compromís, sino también ser capaces de atraer voto urbano en una más que probable cita conjunta con las autonómicas. La sigla del puño y la rosa volvió a tocar poder municipal en 2015 tras un acuerdo de hegemonía popular, pero lo hizo con el peor resultado de su historia, apenas 58.338 votos, el 14% de las papeletas emitidas. Fue el crecimiento de Compromís, con casi 100.000 votos y nueve concejales, lo que permitió a la izquierda sumar mayoría en el consistorio. Los socialistas recuperan apoyos cuatro años después, con Sandra Gómez al frente de la candidatura, dos concejales más y casi el 20% de las papeletas. Sin embargo, fueron tercera fuerza tras la coalición de Ribó y el PP.

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Los sondeos conocidos hasta la fecha auguran una batalla electoral a cara de perro en la capital valenciana, con ligera ventaja para la popular María José Catalá, que podría sumar con Vox y recuperar la vara de mando para los conservadores. La demoscopia sigue situando al PSPV-PSOE en tercer lugar, una circunstancia que ha abierto un debate en círculos de Ferraz sobre la posibilidad de explorar nuevos cabezas de cartel para la tercera capital de España. En esta línea, surgió desde Madrid el nombre de la ministra de Ciencia e Innovación, Diana Morant, exalcaldesa de Gandía.

Hay quien ha visto en la designación de Pilar Bernabé un primer movimiento para después de las elecciones municipales

La alternativa, avanzada como posibilidad por 'El Periódico de España', apenas ha calado en la federación valenciana. Morant está bien valorada, pero no tiene ningún vínculo con la ciudad. Su llegada como 'paracaidista' no garantiza un mejor resultado, señalan desde el PSPV. Hay consenso en que podría encabezar la lista de la provincia de Valencia en las generales tirando de su galón de ministra y que, si gana en proyección, podría intentar jugar a largo plazo la baza de la sucesión de Puig si este da un paso atrás después de 2023.

La propia Gómez, que se ha hecho con el control del partido en la ciudad y mantiene el apoyo de las principales familias locales, ya ha advertido de que su formación tiene habilitadas las primarias para el cabeza de cartel. Ha invitado a los militantes que lo deseen a competir abiertamente, como ocurrió en 2018 en el pulso orgánico por la secretaría general local, una señal de que ella dará también la batalla por defender su posición.

La decisión, al menos por ahora, ha sido cambiar la estrategia. El líder del PSOE, Pedro Sánchez, y el barón valenciano, Ximo Puig, han pactado un relevo en la Delegación del Gobierno, que ha situado como nueva responsable a una persona del equipo de Gómez, Pilar Bernabé. La concejala y cuarta teniente de alcalde fue la encargada de suplir a la vicealcaldesa cuando estuvo de baja por maternidad. Su labor fue reconocida internamente, también desde el Palau de la Generalitat, que busca darle proyección y posicionar a una persona afín en la relación entre la Moncloa y el Ejecutivo autonómico.

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En este mismo sentido se interpreta en las filas socialistas de Valencia ciudad. "Con Calero, nos hemos encontrado con visitas a Valencia de ministros pactadas con Compromís de las que ni nos habían avisado", admiten desde el equipo de Gómez. "Son amigas y puede abrirle las puertas de Moncloa de cara a un mayor apoyo en elecciones", afirma otra fuente con responsabilidad en la federación valenciana. La propia vicealcaldesa admitió que el nombramiento "acerca la Moncloa a Valencia". "No se me ocurre mejor política del PSOE para la Delegación del Gobierno y para representar los intereses de Valencia", manifestó Gómez en rueda de prensa.

Con todo, hay quien ha visto en la designación de Bernabé, que no era la primera opción para el puesto, un primer movimiento por lo que pueda ocurrir tras las elecciones municipales. Hermana de Toni Bernabé, que fue alto cargo de Turismo y también delegado del Gobierno en la etapa de José Luis Rodríguez Zapatero, la concejala saliente escala posiciones en el partido tras haber pasado por diversos cargos, desde asesora en las Cortes Valencianas (2006-2011) y en el consistorio valenciano (2011-2019) hasta concejala y teniente de alcalde municipal.