Es noticia
Empresarios del juego, inmobiliarios y de servicios lideran la lista de morosos de Cataluña
  1. España
  2. Cataluña
según la agencia tributaria de cataluña

Empresarios del juego, inmobiliarios y de servicios lideran la lista de morosos de Cataluña

El fisco catalán reclama casi un millón de euros a César Areces, de la familia del fundador de El Corte Inglés

Foto: Imagen de archivo de un hombre jugando en una máquina tragaperras. (EFE/Ym Yik)
Imagen de archivo de un hombre jugando en una máquina tragaperras. (EFE/Ym Yik)

Importantes empresarios y empresas catalanas figuran en la lista de los principales morosos de la Agencia Tributaria de Cataluña (ATC), entre ellos titulares de estaciones de esquí, empresas de gestión de agua, inmobiliarias, firmas hoteleras o salas de juego. Compañías de familias tan señaladas como los Sanahuja, una conocida saga de empresarios inmobiliarios, engrosan la lista negra del fisco catalán. A 31 de diciembre de 2022 había 41 deudores por 73.801.329 euros. Son 10 personas menos que un año antes. Sus montos se deben a deudas y sanciones tributarias que se refieren a tributos propios o cedidos. La mayoría de esos débitos tienen que ver “con los impuestos de transmisiones patrimoniales y actos jurídicos documentados, sucesiones y donaciones, patrimonio y la tasa sobre el juego o liquidaciones procedentes de la Agencia Catalana del Agua en relación con el canon del agua”, según el Govern.

Los mayores deudores se localizan en el sector del juego. Playbadalona es la empresa que más dinero debe a la ATC. Se trata de una empresa de juegos de azar que regenta un bingo de Badalona y que en la actualidad está en liquidación, al haber presentado expediente de quiebra. Tras esta empresa se encuentran Juan Antonio Martínez Ríos y los hermanos Óscar y Luis Gutiérrez Ramos, que dominan también un pool de empresas inmobiliarias. Esta compañía ya lideraba el ranking de morosos el año pasado, aunque su deuda se ha incrementado en algo más de 100.000 euros: ahora debe 10.166.781 euros al fisco.

Foto: Fachada de la Agencia Tributaria. (Archivo)

El sector del juego ocupa un lugar destacado: la firma Moramar vuelve a aparecer en el listado, esta vez con un débito de 3.321.031 euros. Moramar, con sede en Barcelona, gestionaba un bingo en la capital catalana y tenía como administrador único a Josep Arpa Méndez. El propietario de la compañía, Josep Arpa Aguilar, fue durante un periodo miembro de la junta directiva de la AEJEA, la asociación de bingos de Cataluña. Recreativos Caballero, domiciliada en una urbanización de Premià de Dalt, dedicada a la distribución y explotación de máquinas tragaperras, es otra de las morosas: debe 2.341.161 euros.

El escándalo del agua

La segunda empresa morosa en importancia, sin embargo, es la compañía Rec Madral Companyia d’Aigües, con sede en Girona, con un monto de 7.501.313 euros. Tras la misma se encuentra la familia Mallart. Esta empresa da servicio a muchas localidades gerundenses y ha sido investigada en varias ocasiones por irregularidades. En 2017 se abrió un sumario por presuntos delitos de prevaricación, tráfico de influencias, malversación de caudales públicos y delito contra los recursos naturales y medio ambiente. Además de sospechosas concesiones de contratos públicos de ayuntamientos de Convergència, tenía abultadas deudas con la Hacienda española, la Hacienda catalana y la Agencia Catalana del Agua (ACA). También tuvo denuncias en varias localidades a las que prestaba servicio.

Otra compañía similar es Riera de Cabanyes Companyia d’Aigües, controlada por la misma familia, con una deuda de 6.864.055 euros. Esta empresa abastece a una importante urbanización de Lloret de Mar y Rec Madral a otra. El año pasado, el alcalde de la capital de la Costa Brava rescindió el contrato con ambas después de que los vecinos llevasen años denunciando a las dos compañías por los continuos cortes de agua y la falta de mantenimiento del servicio. Los vecinos de las dos urbanizaciones tuvieron “cientos de reuniones con los técnicos municipales”. Ambas empresas están controladas, en última instancia, por la inmobiliaria Mas Soliva. Los hermanos Anna y Marc Mallart se llevan, sin embargo, la palma de la morosidad, puesto que entre las dos empresas desbancan a Playbadalona, al acumular una deuda global de más de 14,3 millones de euros.

Foto: Román Sanahuja (izq), durante el juicio del caso Can Domenge por la presunta venta fraudulenta de dicho solar. (EFE)

No deja de llamar la atención la inclusión de la empresa inmobiliaria Rialp Residencial, por la que han pasado importantes prohombres del empresariado catalán. En su cúpula han figurado desde el empresario Jordi Sumarroca Claverol (empresario detenido en el marco de la operación 3% por la entrega de supuestas comisiones ilegales a Convergència) hasta los representantes de Ros Roca Group, Revi o Bluegreen Village (empresa que los Sumarroca también utilizaban para hacer donativos a CDC). En su consejo de administración se sentaron también firmas como Motor Lleida o Top Proyectos y Contratas.

Sacresa Terrenos 2, perteneciente a la familia Sanahuja, figura como deudora de 991.705 euros. Los Sanahuja (que llegaron a ser el principal accionista de Metrovacesa) presentaron suspensión de pagos en 2010 y en 2018 la Sareb les ejecutó bienes por una deuda de 13 millones. En esa medida se sacó a subasta incluso el chalé donde vivía uno de los hijos del dueño de Sacresa, una vivienda que era vecina de la Infanta Cristina e Iñaki Urdangarín, en una de las zonas más exclusivas de Barcelona.

Los empresarios individuales

También hay nombres propios en el listado de la ATC. Entre ellos, figura el de Montserrat Unanue Navarro. Debe 3.156.698 euros. Fue presidenta de la inmobiliaria Martí Unanue. Su familia controlaba también la firma Solucions Immobiliàries Barcelonines y la empresa de restauración Butch Bar, que gestiona uno de los locales de referencia del Gayxample, es decir, la zona del distrito del Eixample barcelonés en la que predominan los locales LGTBI. La empresaria Nancy Janneth Suárez, propietaria al parecer de un locutorio telefónico, es otra que ya lleva varios años apareciendo como una de las grandes deudoras individuales al fisco catalán: en esta ocasión, la deuda se eleva a 2.464.074 euros.

Le pisa los talones el empresario Enrique Travé Valls, dedicado al sector de los viajes y vicepresidente de una compañía internacional. Su agujero es de 2.416.891 euros. También Víctor Juan Fontfreda Puig, con 2.342.000 euros está en el listado. El empresario del ladrillo Miquel dels Sants Anglada Puigcerver debe 1.615.846 euros. Anglada, que dominaba un emporio inmobiliario desde Barcelona, se desprendió de la mayoría de sus empresas y se centró en mantener a flote Icace Residencial.

placeholder El empresario Jordi Sumarroca (d), presidente de la empresa Teyco. (EFE)
El empresario Jordi Sumarroca (d), presidente de la empresa Teyco. (EFE)

El empresario Luis Ventura, que regenta un túnel de lavado en Castelldefels, es otro de los grandes, con una deuda de 1.561.854 euros. Y Francisco Vicente Ros, del sector textil y con procesos al parecer, pendientes en Brasil, acumula un débito de 1.487.740 euros.

Como nombres propios destaca en este particular universo Natividad Casanovas, expropietaria de la estación de esquí Boí Taüll, que es también una de las principales deudoras, con 1.348.834 euros. Se da la circunstancia de que la estación de esquí Boí Taüll fue rescatada con dinero público en 2018, después de que la empresa Parcs Turístics de Muntanya, del grupo Nozar, renunciase por sorpresa a la gestión. El Govern tuvo que acudir en auxilio de la estación, que pasó a depender de la sociedad pública Actius de Muntanya.

Como nombres propios destaca en este particular universo Natividad Casanovas, expropietaria de la estación de esquí Boí Taüll

Víctor Ivanow es un prolífico empresario que debe 1.197.366 euros. Es vicepresidente de Titanarts Distribution y de Talens España, así como directivo de Manufacturas Titanarts. Los hermanos Vendrell Schwaiger, con importantes negocios en la Costa Brava, y cuyo epicentro está en Platja d’Aro, son integrantes también de la lista negra del fisco catalán: Víctor Vendrell acumula una deuda de 1.113.669 euros, mientras que su hermana Maria Alexandra debe 915.310 euros. Entre las raras avis del listado de morosos catalanes figura, por último, César Carlos Areces Fuentes, integrante de la familia fundadora de El Corte Inglés, con un débito de 918.877 euros.

Importantes empresarios y empresas catalanas figuran en la lista de los principales morosos de la Agencia Tributaria de Cataluña (ATC), entre ellos titulares de estaciones de esquí, empresas de gestión de agua, inmobiliarias, firmas hoteleras o salas de juego. Compañías de familias tan señaladas como los Sanahuja, una conocida saga de empresarios inmobiliarios, engrosan la lista negra del fisco catalán. A 31 de diciembre de 2022 había 41 deudores por 73.801.329 euros. Son 10 personas menos que un año antes. Sus montos se deben a deudas y sanciones tributarias que se refieren a tributos propios o cedidos. La mayoría de esos débitos tienen que ver “con los impuestos de transmisiones patrimoniales y actos jurídicos documentados, sucesiones y donaciones, patrimonio y la tasa sobre el juego o liquidaciones procedentes de la Agencia Catalana del Agua en relación con el canon del agua”, según el Govern.

Ministerio de Hacienda
El redactor recomienda