Iceta ya es el nuevo líder del PSC: "Quiero que todos se pongan en movimiento"

“Ahora toca arremangarse”. Ese es el lema de la campaña de Miquel Iceta, virtual nuevo líder del Partit dels Socialistes de Catalunya (PSC), que concurrirá a las primarias que el partido prepara para el próximo 19 de julio. Es virtual nuevo líder porque fue el único que consiguió los avales necesarios para concurrir a esas primarias. En concreto, en vez de los 2.072 avales necesarios, presentó 4.321. Y como lo que quiere es “arremangarse”, ayer mismo comenzó una apretadísima agenda que le llevará por todo el territorio para presentar en persona su programa.

“Es mi lema, pero también es lo que hay que hacer ahora para dotar de nuevo de protagonismo al partido”, señaló Iceta a El Confidencial después de conocerse el escrutinio. Lo dice, claro, quien ha recibido los avales de la quinta parte de la militancia del PSC “y más que los tres candidatos del PSOE juntos”. Iceta señaló también a este diario que “más que un apoyo a mi persona, lo que veo es una voluntad, por parte de los militantes, de levantar el partido. Por eso, ahora lo que quiero es que tanto los que me han avalado como los que no se pongan en movimiento. Para ello, durante los próximos días nos esperan duras jornadas por el territorio para tratar de hablar con la mayor cantidad de gente. Ahora empiezo mi campaña para levantar el voto”.

El presidente del consejo nacional del PSC, Celestino Corbacho, presentó por la tarde el escrutinio, anunciando que los otros dos candidatos que habían manifestado su intención de competir con Iceta se retiraban de la carrera por liderar el partido. Se trata del líder local de Figueres, Pere Casellas, y del concejal de Palafolls Josep Rueda, que obtuvieron en su conjunto algo más de 1.200 votos (algo más de 200 votos el primero y algo más de 800 el segundo).

Por su parte, Iolanda Pineda, portavoz de la gestora que dirige provisionalmente el PSC desde la renuncia de Pere Navarro, calificó de “éxito” la participación de más de 5.000 militantes en el proceso de otorgamiento de avales. Y ello demuestra, subrayó, “que el PSC es un partido abierto con gente con muchas ganas de participar”. De parecida opinión es Iceta, que enfatiza que “lo que demuestran estas primarias es que el partido está vivo”.

Pineda felicitó a Iceta por conseguir los avales necesarios y a sus dos contrincantes “por su participación y su implicación para continuar trabajando con honestidad y lealtad en pro del partido”. La proclamación definitiva de los candidatos se hará mañana día 3 y el 13 de julio será el día que los militantes voten para escoger a su líder. En este caso, deberán votar a Iceta o en blanco. Luego, se celebrará un congreso extraordinario el 19 de julio para proclamar la nueva dirección.

“La base ya existe”

En los próximos meses, el gran reto del nuevo líder es volver a conectar el PSC con los ciudadanos y, en especial, con su tradicional electorado. Desde círculos cercanos a Iceta se señala a El Confidencial que “no se trata de dar un giro copernicano al partido o de elaborar una estrategia intrincada, sino de volver a ilusionar”.

La base de su mandato, apuntan estas fuentes, “ya existe, está en llevar a la práctica la declaración de principios y los documentos que se aprobaron en el último congreso. Con ellos, nos mantenemos fieles a las esencias del PSC y entroncamos con la realidad de Cataluña”.

No obstante, Iceta tendrá que lidiar todavía con un importante sector que reclama que las cuestiones identitarias tengan un mayor peso. Es lo que se lláma el “ala catalanista” o “ala soberanista”, en la que se encuadran algunos exconsejeros como Montserrat Tura, Marina Geli, Antoni Castells o Joaquim Nadal (este último más escorado en los últimos meses hacia posiciones cercanas a Convergència), además de otro hombre de peso, el alcalde de Lérida, Àngel Ros, líder de la corriente Agrupament Socialista.

Con quien no tendrá problemas es con sus dos contrincantes en estas primarias, que al retirarse han anunciado ya que colaborarán con Iceta y que no piensan desatar una batalla interna, aunque no han cerrado la puerta a la creación de algún tipo de corriente de opinión.

El proceso, en cambio, levantó acerbas críticas desde algunos círculos, especialmente los alineados con posiciones cercanas al ya exsocialista Joan Ignasi Elena, líder de Avancem, que la semana pasada dejó el PSC dando un sonoro portazo. Desde esos círculos, se echa en cara a la dirección del PSC las condiciones en las que fueron convocadas estas primarias, ya que para liderar el partido “se necesita el doble de avales que para presentarse a candidato a liderar el PSOE, lo cual es incongruente”. ¿La causa?: los candidatos españoles sólo necesitan que los avale un 5% de la militancia, mientras que los catalanes debían presentar un 10% de avales.