Cataluña quiere recusar a cuatro jueces del Constitucional por su "afinidad con el PP"

Hasta cuatro jueces del Tribunal Constitucional pueden ser recusados por el Parlamento catalán en las próximas semanas. ¿El motivo? Haberse significado políticamente en los últimos años o haberse posicionado claramente “contra el derecho a decidir”.

La decisión de la recusación fue tomada por la Mesa de la Cámara autonómica catalana. El tema no figuraba en el orden del día, pero se planteó igualmente. Y todos los grupos, excepto el PP (es decir, CiU, ERC, PSC e ICV), aprobaron “encargar a los servicios jurídicos de la Cámara un informe “con urgencia y a fondo” que estudie la viabilidad de recusar a algunos magistrados del TC por sus posicionamientos públicos y sus afinidades ideológicas en contra del derecho a decidir y de diferentes aspectos relacionados con Cataluña”.

Una nota oficial del Parlament detalla que la intención es materializar la recusación “en una o dos semanas, antes de que el TC dicte sentencia sobre la impugnación por el Gobierno español de la resolución 5/X, por la que se aprueba la declaración de soberanía y del derecho a decidir del pueblo de Cataluña”.

Esta declaración fue aprobada por el pleno parlamentario el 23 de enero del año pasado y en su texto señalaba que “el pueblo de Cataluña tiene, por razones de legitimidad democrática, carácter de sujeto político y jurídico soberano”. Asimismo, aseguraba que el proceso del “derecho a decidir” será “escrupulosamente democrático” y que “se dialogará y se negociará con el Estado español, con las instituciones europeas y con el conjunto de la comunidad internacional”. Apoyaron este texto los tres partidos del bloque soberanista, formado por CiU, ERC e ICV, además de un diputado de la CUP.

La presidenta del Parlamento, la democristiana Núria de Gispert, justificó la iniciativa porque algunos magistrados “muestran animadversión clara contra los nacionalismos territoriales” y subrayó que los miembros del TC “han de ser independientes y la independencia se ha de considerar desde la imparcialidad y la neutralidad”.

De momento, los servicios jurídicos se han puesto a trabajar buscando intervenciones públicas de los magistrados en los últimos tiempos. Y hay dos jueces que claramente están en el punto de mira: Pedro González-Trevijano y Enrique López. A ellos se les pueden unir dos más, según manifestaron a El Confidencial fuentes políticas. La Cámara ya intentó recusar el pasado año al propio presidente del TC, Francisco Pérez de los Cobos, debido a que había ocultado su militancia en el PP, pero esa recusación no fue aceptada.

“Esto es muy perverso. No se puede poner en duda la objetividad de un tribunal de esta manera. Lo que están haciendo es seguidismo de la deriva separatista de Artur Mas intentando desacreditar a las instituciones del Estado. Podemos hablar del Consejo de Garantías Estatutarias, cuya última incorporación fue Joan Ridao, exsecretario general de ERC. Y entre sus miembros hay exasesores de partidos políticos y grupos parlamentarios. ¿También tenemos que recusarlos a la hora de emitir dictámenes? Vamos a dejarnos de tonterías”, asegura a este diario Santi Rodríguez, portavoz adjunto parlamentario del PP.

De la misma forma se expresa Carina Mejías, portavoz de Ciutadans. “Es de una hipocresía total. El Gobierno catalán tiene una auténtica obsesión por elaborar listas de profesionales por su sesgo ideológico sin tener en cuenta los méritos profesionales”.

El propio portavoz del Gobierno, Francesc Homs, sin embargo, manifestó que el Ejecutivo que preside Artur Mas apoya la iniciativa de la Mesa del Parlament. “El Gobierno da apoyo a esta acción. Nosotros, de momento, no haremos nada. No tenemos prevista ninguna acción concreta. Pero apoyaremos todo lo que se haga y, si podemos echar una mano, la echaremos”, afirma una fuente de la Generalitat a El Confidencial.