Mas pone a Junqueras en su sitio y se proclama timonel del proceso soberanista

Amigos, pero la vaca por lo que vale. Algo así le vino a decir esta mañana el presidente de la Generalitat de Cataluña, Artur Mas, a su socio de Gobierno Oriol Junqueras, presidente de Esquerra Republicana de Cataluña (ERC). Éste le había exigido “liderazgos compartidos” en la hoja de ruta hacia la independencia, pero Mas le puso en su sitio.

“En mi discurso de investidura ya hablé de liderazgos compartidos. Pero por muy compartido que sea un liderazgo, siempre hay un presidente de la Generalitat que se convierte en una referencia. Si tenemos que ir a la Moncloa, no vamos a ir todos juntos. ¿Qué quiero decir? Que sí quiero liderazgos compartidos, pero cada uno tiene su papel y ha de saber cómo realizarlo”. En otras palabras, si hay alguien qua ha de capitanear el barco, será él, porque para algo es el President.

La advertencia fue realizada en el Parlamento catalán, donde se celebra el debate de política general (el Estado de la Nación de esta comunidad). La jornada de hoy comenzó con la réplica de Junqueras al discurso que Mas pronunció ayer por la tarde. Y su tono fue el esperado. Junqueras echó toda la culpa de la situación económica a Madrid, porque es Madrid “quien decide el total del Presupuesto de la Generalitat, y es también el Gobierno español quien decide si paga o el techo del déficit. Por eso necesitamos las herramientas de un Estado propio”.

Los discursos trenzados de los dos máximos dirigentes de las fuerzas soberanistas fueron pronunciados en un mismo sentido: poner de relieve el ahogo económico del Estado español hacia Cataluña y, a partir de ahí, la necesidad de un Estado propio para salvar el estado del bienestar. Junqueras definió muy bien la estrategia: “Si alguno es independentista, es por muchas razones, pero esencialmente por dos: primero, porque es un derecho; y segundo, porque es una necesidad urgente, es la necesidad de muchos conciudadanos, lo que para nosotros constituye una obligación”. El líder republicano volvió a entonar que “amamos a España, a su lengua y a su cultura, pero no nos fiamos del Estado español”.

Las dos réplicas de Mas a Junqueras fueron más bien un diálogo de camaradas de excursión, si exceptuamos la llamada al orden del President para dejar claro que aquí no hay más líder que él. “Usted, señor Junqueras, decía que el presupuesto de Cataluña lo decide Madrid. Yo no lo dije con tanta rotundidad, pero queda dicho. Y conste que no lo dice la Generalitat ni CiU, sino que lo dice ERC”. Y desgranó argumentos para apoyar el asertto del republicano: “¿Quién decide el déficit decidiendo cuánto podemos gastar? Y otra cosa: Nos dicen: ‘A ustedes les toca este déficit y si te pasas, como tengo el grifo de la tesorería, no te pago y entonces tú no puedes pagar las nóminas a fin de mes. Aquí hay una indefensión total de las instituciones catalanas”, clamó Artur Mas.

Los dos dirigentes, convergente y republicano, coincidieron en las críticas al Gobierno central. Se encarnizaron con el Ejecutivo español porque fija un techo de déficit del 1% cuando a las autonomías les correspondería el 1,9%, ya que el gasto público que soportan es de un tercio del global del Estado.

Y ahí el President volvió a sacar a la palestra la deuda de España con Cataluña. “A finales de este año, habremos tocado todos los impuestos posibles que dependen de nosotros, pero el presupuesto de la Generalitat se ha visto reducido un 20% en los últimos años. Pero para el 2014, los catalanes nos hemos de comer 1.200 millones de euros más, que es una decisión que nos la toman desde Madrid”, esxplicó. Y añadió: “El Estado nos debe 1.700 millones por una cosa que está en el Estatut [se refiere a las inversiones que se deberían haber hecho en infraestructuras conforma la disposición adicional tercera]. Fue una cláusula que se cumplió durante algunos años, pero que ya se incumplió en el último Gobierno de Rodríguez Zapatero, a pesar de que había una dotación en los Presupuestos de aquel año. Desde entonces, no se nos paga. Pero si el Gobierno central nos reconoce esta deuda, aunque no nos la pague en cash, en 2014 podremos cumplir el déficit que nos impone Madrid. Y si establece un techo justo del déficit, nos daría incluso para recuperar inversiones y para aumentar servicios sociales. ¿Dónde ha de poner el acento este Parlamento y los partidos catalanes? En esto, que está en la ley”.

Ambos pusieron también el acento en la subida del IVA por parte del Gobierno central. “Si Cataluña se quedase con la recaudación del IVA adicional, muchos de los recortes no se harían. Nosotros tenemos el 50% de la recaudación de este impuesto, pero cuando el Cristóbal Montoro subió del 18 al 21%, ese incremento se lo quedó íntegramente él. Y, además, nos cuesta dinero, porque la Generalitat, igual que los Ayuntamientos, paga IVA, por lo que ahora pagamos el aumento del impuesto para que se lo quede el ministro Montoro o el Gobienro central”.

Lo que quedó claro es que la hoja de ruta independentista no tiene frenazo ni marcha atrás. Y el líder de Esquerra lanzó un reto a la oposición. “La manifestación del 11 de septiembre del año pasado y la cadena humana de este año avalan nuestra hoja de ruta, Vamos por un camino conocido y se llegará al Estado propio ya sea a través del referéndum o de elecciones. Pero si ustedes, señores de la oposición, tienen algún problema, lo tienen fácil: demuestren que tienen la misma capacidad de convocatoria que tenemos nosotros”, clamó mientras, visiblemente enfadado, llamaba la atención a los diputados de la oposición por sus protestas.

Eso sí, Junqueras reclamó también a Mas “los presupuestos más justos, al menos en términos relativos, de las últimas décadas para 2014”, desterrando los recortes. Y Mas, aquí, sí fue condescendiente: “Señor Junqueras, respecto a los presupuestos de 2014, intentaremos hacerlos de la manera que usted dice”.