Aforo y refuerzo de la limpieza: Andalucía pone a punto sus playas para el verano
El objetivo es adecuar sus kilómetros de playa a las medidas sanitarias y de protección necesarias para evitar contagios del covid-19
Las imágenes de las playas abarrotadas en verano no se repetirá este año, se quedarán guardadas en el archivo histórico como consecuencia de la pandemia del coronavirus. Sin embargo, la recuperación de esos espacios para reactivar el turismo es fundamental para las comunidades costeras. Una de ellas, Andalucía, destinará 10,5 millones de euros a adecuar sus kilómetros de playa a las medidas sanitarias y de protección necesarias para que los bañistas disfruten de la arena y también a promocionar y apostar por un turismo más sostenible.
Esos millones se reparten en dos partidas: cinco millones para que los ayuntamientos costeros puedan llevar a cabo planes de contingencia individualizados para garantizar el uso seguro de las playas; y otros cinco millones y medio de euros para actuaciones de limpieza y protección del medio ambiente.
Con esta primera partida, los ayuntamientos podrán implantar planes de seguridad y aforo en las playas, así como adaptar duchas y equipamiento. Se deberán incluir carteles informativos, señalización, control de aforo, refuerzo de la limpieza o la vigilancia.
Uno de los planes de Andalucía es calificar sus playas según el riesgo: libres, es decir, aptas; peligrosas, que se puede acceder con limitaciones; o de uso prohibido. Estas calificaciones tendrán grados: bajo, moderado o alto. Esos grados de protección serán determinados por cada ayuntamiento y sus playas y se establecerán en función de la afluencia de visitantes, el histórico de incidencias o si se contemplan actividades deportivas. Estos planes de contingencia que se pondrán en marcha para las playas se mantendrán vigentes mientras dure la alerta sanitaria, con el propósito de garantizar la seguridad de las personas mientras se permite el uso de los diferentes servicios.
Los otros cinco millones y medio irán destinados a subvenciones dirigidas a la recuperación medioambiental y uso sostenible de las playas del litoral andaluz. La crisis sanitaria ha golpeado fuertemente al sector turístico, quien debe replantearse cómo debería ser ese turismo del futuro. Por eso, la Junta de Andalucía convoca estas subvenciones con el objetivo de promover la sostenibilidad ambiental y socioeconómica de estas zonas costeras.
Todos estos planes se sustentan en la idea de la comunidad andaluza de adelantar la apertura de las playas y piscinas a la fase 2, en vez de esperar a la fase 3 como está previsto, y así se lo ha solicitado al Gobierno.
300 millones para reactivar el turismo
Además, Andalucía ha elaborado un plan de choque para el turismo que movilizará 300 millones de euros. Los objetivos de este plan son reducir el impacto de la crisis derivada de la alerta sanitaria, fortalecer la estructura laboral y preparar al sector turístico para la nueva etapa. Por ejemplo, un millón de euros será para impulsar la contratación o para la bonificación en la cuota de autónomos.
Asimismo, la comunidad autónoma quiere posicionarse como un destino seguro y de calidad y para eso invertirá tres millones de euros de ese plan de choque en promoción y campañas de publicidad. También se potenciará la alianza con 'touroperadores' y líneas aéreas.
Para a apoyar estas medias, el Gobierno andaluz también ha reclamado al Ejecutivo central otras como bonos turísticos, rebajas del IVA turístico del 10 al 4% o la extensión de los ERTE más allá del estado de alarma.
Las imágenes de las playas abarrotadas en verano no se repetirá este año, se quedarán guardadas en el archivo histórico como consecuencia de la pandemia del coronavirus. Sin embargo, la recuperación de esos espacios para reactivar el turismo es fundamental para las comunidades costeras. Una de ellas, Andalucía, destinará 10,5 millones de euros a adecuar sus kilómetros de playa a las medidas sanitarias y de protección necesarias para que los bañistas disfruten de la arena y también a promocionar y apostar por un turismo más sostenible.