Nicolás, el tránsfuga: de IU y UPYD a salvar al PSOE en Torremolinos tras pasar por Cs

La RAE y su definición sobre la palabra tránsfuga: del lat. 'transfŭga'.

1. Persona que pasa de una ideología o colectividad a otra.

2. Persona que con un cargo público no abandona este al separarse del partido que lo presentó como candidato.

3. Militar que cambia de bando en tiempo de conflicto.

De IU a UPYD. Y del partido de Rosa Díez a Ciudadanos. Y de ahí a ‘salvar’ a José Ortiz, el alcalde de Torremolinos (PSOE). ¿Es un tránsfuga Nicolás de Miguel? Descartado el punto tres, es cuestión de analizar el uno y el dos.

“No, no es un tránsfuga”, le defiende un cargo de confianza del primer edil torremolinense. Su explicación: tránsfuga es alguien que va a sacar un beneficio económico donde había estado en contra antes, y De Miguel no lo es, según este cargo. “Tendrá un protagonismo que Ciudadanos no le dejaba tener. Él no ha traicionado a nadie”.

De Miguel aspiraba a ser lendakari (se enfrentó a Iñigo Urkullu en el País Vasco en los comicios autonómicos de 2016) y ahora capitaneará las políticas de Igualdad y en defensa del colectivo LGTBI en el municipio de la Costa del Sol.

"No nos lo esperábamos"

Ciudadanos le pide que entregue su acta de concejal y le recuerda que todos los cargos electos firman una carta ética mediante la cual “se comprometen a devolver dicha acta en el momento de abandonar las siglas del partido”. Vicente Sánchez, coordinador de Cs en la provincia de Málaga: “Ha sido de sopetón. No nos lo esperábamos. No sabemos lo que le ha llevado a esta determinación, y menos sin previo aviso... y cuando te comprometes con unos ideales”.

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Isabel Morillo. Sevilla

Nicolás niega que sea un tránsfuga. “No me he movido de ningún sitio. Sigo con el mismo discurso y mismo proyecto. Ciudadanos ya no es mi partido”, explica a El Confidencial. Está claro que no aceptó el giro del partido naranja. El No es No de Rivera a Sánchez. Tampoco es muy fan del pacto de la Junta de Andalucía. Descarta afiliarse al PSOE: “No, por Dios… No tengo edad. Ya he hecho una trayectoria larga”, admite.

Torremolinos se ha convertido en un polvorín político siempre a punto de convertirse en un lanzallamas. Margarita del Cid, la eterna aspirante, creía que la moción de censura sería cuestión de poco tiempo y que al fin podría convertir en realidad su sueño de la alcaldía.

Una concejala de Vox apoyó al PSOE. También los concejales de Por mi Pueblo, la escisión del PP controlada por Pedro Fernández Montes, enemigo íntimo de Del Cid. Ortiz sabía que su liderazgo estaba débil y sabía cuál era el punto más débil de sus contrincantes políticos: Ciudadanos y en concreto Nicolás de Miguel.

A pesar de haber votado a la lideresa local del PP, no se mostró de acuerdo con la decisión del partido naranja. Él hubiera preferido apoyar al candidato socialista, pero en ese momento mantuvo la disciplina. No deseaba estar sujeto a lo que le mandaran fuera de Torremolinos. De Miguel tenía su propio criterio. Todo se consumó este martes a las 10 de la mañana cuando presentó su baja en el partido. El alcalde ha logrado reunir 12 de los 13 apoyos para la mayoría.

Todo se consumó este martes a las 10 de la mañana cuando presentó su baja en Cs. El alcalde logra reunir 12 de los 13 apoyos para la mayoría

Este donostiarra, nacido en 1963, es licenciado en Historia por la Universidad de Deusto y pasó parte de su juventud en Torremolinos. En unas vacaciones, decidió volver a la Costa del Sol. Fichó como una estrella por Ciudadanos y ha cobrado 52.000 euros como portavoz del grupo municipal. Ahora, como concejal de Igualdad, también recibirá la misma cantidad.

"Soy un romántico de la política"

Habla Nicolás: “De verdad que tengo vocación de servicio público. Soy un romántico de la política, no me arrepiento de lo que he hecho. Y vivo mucho los asuntos sociales con verdadera pasión”.

El ya exconcejal de Cs asegura que quiere “trabajar a tope, a tope”. “Es un tema al que le he dedicado toda mi vida. Quiero dar todo lo mejor dentro de mí en algo tan importante como la ley de la igualdad, abarcándolo todo, y los derechos civiles que simbolizan la tolerancia, convivencia y el aperturismo, la vanguardia; y la duda razonable”.

Aterrizó en Torremolinos en el verano de 2018. Conoció el municipio a finales de los ochenta y principios de los noventa. Recuerda madrugadas en la zona de copas de Pueblo Blanco y la plaza de la Costa del Sol "cuando pasaban coches". "Es el sitio donde quería vivir y ha sido una decisión absolutamente personal. Este es mi lugar", asegura este amante de la literatura rusa, Sartre, Antonio Muñoz Molina y Manuel Vicent.

Vive en el centro y le encanta pasear por la playa del Bajondillo. "Cuando me levanto, veo el mar", dice con orgullo este cinéfilo empedernido; devoto de las películas de cine clásico... y de Billy Wilder sobre todas las cosas. "Soy un hijo de clase trabajadora y educado en un entorno liberal familiar y progresista. Desde pequeño, además de 'Capitán Trueno', también leía los ilustrados franceses. Siempre he creído toda mi vida en el lema de 'Libertad, igualdad y fraternidad".

Descartada, según él, la acepción número uno del significado de tránsfuga, la número dos está clara, aunque descarta su transfuguismo. "Me gusta también la música y el Arte en mayúsculas, como decía el genio", responde por WhatsApp mientras pasea por el Bajondillo. Le acompaña el viento de octubre que, poco a poco, cambia la temperatura.