La Moncloa presiona a Junts por su órdago con la amnistía: "Tendrán que explicarlo"

El Gobierno deja la presión sobre Junts per Catalunya en la negociación in extremis sobre la amnistía. Los neconvergentes han decidido que votarán contra el dictamen de la ley negociada durante meses con el PSOE y el resto de socios de la investidura de Pedro Sánchez, a excepción de Coalición Canaria. Esto es así porque los últimos autos de los jueces, según los de Carles Puigdemont, no dan garantías a la norma para que beneficie a “todos” los implicados en el procés. Pero el Ejecutivo no se ha movido, por el momento, de su posición y se centra en poner el foco sobre los independentistas catalanes.

“Que lo expliquen ellos”, explican desde la Moncloa después del último órdago de Junts, en caso de que se acabe cumpliendo. En el Gobierno aseguran que el texto que resultó de la última sesión de la comisión de Justicia es el óptimo. Esa versión de la ley de amnistía ya incluye ocho enmiendas técnicas pactadas por el PSOE con sus socios y que cuentan con el aval de Junts. Y también tres modificaciones acordadas por los independentistas con los socialistas a última hora y que aluden a los delitos de terrorismo.

Para el Ejecutivo, “el objetivo de la ley está claro”. Y ha sido la portavoz del Gobierno, Pilar Alegría, quien se ha encargado dejarlo claro en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros. “Es una ley que garantiza una mejora de la convivencia en Cataluña y la mejora de la convivencia entre Cataluña y el resto de España”, ha dicho la también ministra de Educación, que ha repetido esta letanía hasta cuatro veces. Alegría ha insistido en el “firme compromiso” del Ejecutivo con la norma, pero ha dejado las conversaciones de última hora en los grupos parlamentarios.

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En caso de que Junts cumpla su amenaza, el texto volverá a la Comisión de Justicia y los partidos tendrán un plazo máximo de un mes para elevarlo de nuevo al pleno. El texto sería el que salió de la primera sesión de la comisión, con las enmiendas pactadas ya incluidas en la ponencia. No podrían incluirse nuevas enmiendas, pero sí negociar sobre las que los grupos ya tienen registradas, por lo que los cambios que se introduzcan pueden ser de calado. La intención de Junts es que se atiendan sus propuestas relacionadas con el delito de terrorismo y también con los de traición para poder así blindar la amnistía a Carles Puigdemont por su implicación en los casos Tsunami Democràtic y Voloh.

“Máximo respeto a los poderes que conforman el Estado de derecho”, ha dicho Alegría en referencia tanto al legislativo como al judicial. La ministra portavoz ha defendido que el texto es un “paso importante” y beneficioso para el país.