Momentos estelares del debate: del "no es decente" de Sánchez al "arte de fingir" de Aznar a Felipe

En la historia política de España, los debates televisivos han desempeñado un papel fundamental, convirtiéndose en escenarios de confrontación y momentos decisivos que han dejado una huella imborrable en la memoria colectiva del país. A lo largo de los años, estos debates han servido como plataformas para que los líderes políticos expongan sus ideas, defiendan sus posturas y se enfrenten directamente ante la mirada atenta de millones de espectadores (el debate electoral entre Zapatero y Rajoy en 2008 fue el más visto de la televisión, con más de trece millones de personas). Sin embargo, algunos de estos momentos han quedado para la historia. Vamos a repasarlos:

El debate electoral entre Felipe González y José María Aznar reunió a 9.625.000 personas de media (61,8% de share)

Aznar a Felipe: "En el arte de fingir es difícil igualarle"

El primer debate televisivo en España entre candidatos a la presidencia del Gobierno, previo a las elecciones generales de 1993, marcó un hito en la historia política del país. La tensión del primer debate de la historia en nuestro país fue en aumento con el paso de los minutos. José María Aznar, candidato a la presidencia con el PP, lanzó una ofensiva a Felipe González señalando que "en el arte de fingir es difícil igualarle". La reacción del candidato socialista fue inmediata: "No he querido ser en ningún caso ofensivo con usted". Durante el cierre del minuto de oro —simbólico en cuanto a duración— de cada candidato, la tensión alcanzó su punto máximo en el plató tras no haber llegado a un acuerdo, tanto el PP como el PSOE, para decidir quién cerraría el debate: José María Aznar o Felipe González.

El por entonces líder del PSOE, ofreció el último discurso en el primero de los dos debates electorales que se celebrarían durante aquel año. Este momento histórico reflejó la intensa rivalidad política de aquellos tiempos y dejó una huella imborrable: La televisión tardó quince años para repetir un nuevo cara a cara entre candidatos. El primer debate de la historia de la televisión no afectó al PSOE, ganador de las elecciones generales en aquel año con el 38,8% del los votos.

Quince años después, el debate entre Zapatero y Rajoy logró agrupar a 13.043.000 espectadores de media, el más visto de la televisión (59,1% de share)

El ataque de Rajoy a Zapatero: "Ha aceptado el chantaje de ETA"

Los debates electorales en nuestro país volvieron quince años después. En febrero de 2008, José Luis Rodríguez Zapatero (presidente del Gobierno) y Mariano Rajoy (líder de la oposición) protagonizaron el tercer debate cara a cara de la televisión. Cuanto el debate giraba en torno a política exterior y seguridad, el líder del PP acusó a Zapatero de haber "negociado" con ETA: "Ha engañado a todos los españoles, ha negociado políticamente con ETA, ha jugado con la ley, ha crecido ante los terroristas y ha aceptado el chantaje". El líder del PSOE, en su defensa, se defendió lanzando un ataque. Mientras Rajoy mantenía la mirada baja, el socialista afirmó que ningún Gobierno había calificado al grupo terrorista como hizo el ex presidente Aznar: "Un movimiento de liberación nacional vasco".

El debate cara a cara entre Pedro Sánchez y Mariano Rajoy obtuvo la atención de 9.728.000 personas (54,2% de share)

Sánchez golpeó primero a Rajoy: "No es un presidente decente"

Durante el debate televisivo previo a las elecciones generales de 2015, el entonces presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, lanzó un feroz ataque verbal contra Pedro Sánchez, líder del PSOE, tras acusarlo y relacionarlo con Luis Bárcenas. Sánchez, frente a Rajoy, fue tajante: "No es un presidente decente". El líder socialista quiso desquiciar a Rajoy, mientras que el popular adelantó que Sánchez iba a perder las elecciones de aquel año. El ex presidente del Gobierno, ligeramente encendido, invitó a que Pedro Sánchez lo denunciara en caso de que tuviera algún asunto pendiente. Utilizando palabras como "ruin, mezquino y miserable", Rajoy desencadenó una 'tormenta' en el plató y en la opinión pública.

El debate a cuatro en abril de 2019 marcó el mínimo histórico de espectadores, con 8.886.000 personas de media (43,8% de share)

Rivera y el adoquín que revolvió Cataluña

En el marco de las elecciones generales de 2019, se celebró un debate televisivo en el que participaron los líderes de los cinco principales partidos políticos en ese momento: Pedro Sánchez, Pablo Casado, Albert Rivera, Pablo Iglesias y Santiago Abascal. Fue Rivera quien protagonizó un momento inesperado que abordó la problemática de las trifulcas en Cataluña. Durante su intervención, mostró un adoquín lanzado por varios manifestantes a policias nacionales y a los Mossos d'Esquadra durante las protestas por parte del movimiento nacionalista catalán para mostrar un apoyo político a los condenados por sedición en el referéndum de indepencia de 2017. Este gesto capturó la atención de la audiencia y puso en entredicho a Pedro Sánchez, que agachó la cabeza y no replicó al candidato de Ciudadanos.

Opinión

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Un lapsus inesperado de Iglesias

Durante el debate televisivo en noviembre de 2019 —primero de la historia en España en reunir a cinco candidatos a la presidencia del Gobierno— , Pablo Iglesias, líder de Podemos, protagonizó un desliz lingüístico sorprendente y embarazoso. Mientras recordaba los casos de violaciones en Pamplona y Manresa, Iglesias confundió las palabras "manadas" y "mamadas", pronunciando: "Hay mujeres escandalizadas con tantas mamadas". Este lapsus fue ampliamente comentado en los medios de comunicación y en las redes sociales.

Pedro Sánchez y Alberto Núñez Feijóo tomarán, esta noche a las diez, el testigo de los debates electorales en el único cara a cara, previsiblemente, de la campaña electoral. Será el duodécimo debate electoral entre aspirantes a la presidencia (seis fueron en formato de dos personas; cuatro de estos reunieron a cuatro candidatos; tan solo uno fue entre cinco líderes políticos). Para el socialista será el séptimo debate televisado—segundo cara a cara— como aspirante a la presidencia del Gobierno; el de Feijóo será el primero como candidato nacional.