¿Qué se sabe del accidente del helicóptero de la DGT y del piloto que ha dado positivo en drogas?

Un helicóptero de la Dirección General de Tráfico (DGT) se estrelló a las 11 de la mañana del pasado domingo, 5 de marzo, en la Comunidad de Madrid, dentro del término municipal de Robledo de Chavela (4.200 habitantes). El accidente dejó varios heridos leves dentro de las personas que tripulaban la aeronave y la evolución del caso se ha ido desvelando a lo largo de los últimos días.

El lunes, 6 de marzo, el piloto, de 60 años, fue detenido tras haber dado positivo en cocaína y metanfetaminas, según confirmaban fuentes de la Guardia Civil. El aparato, un Pegasus el Eurocopter 355N de la DGT, con matrícula EC-JMK, se precipitó contra el suelo a la altura del kilómetro 2 de la carretera M-512, una vía muy transitada por motoristas deportivos. El acompañante, de 58 años, también perteneciente a la DGT, resultó herido leve y, tras una primera asistencia médica, fue trasladado al Hospital de Puerta de Hierro de Madrid.

En un principio el piloto fue examinado por los médicos del Summa y, como no tenía heridas graves, se marchó a su domicilio de Villanueva del Pardillo tras ser recogido por un familiar. Como ha adelantado El Periódico de España, el piloto, "que se mostraba visiblemente nervioso, huyó rápidamente del lugar para intentar evitar someterse al preceptivo control de alcohol y drogas". Finalmente, tuvo que pasar por el test antidrogas.

Partido en dos

Lo último que se sabe es que la Guardia Civil ha detenido a este funcionario de Tráfico. Todo esto ocurre después de que el lunes se decretase su libertad con cargos tras prestar declaración ante el juzgado de guardia de Móstoles que se ha inhibido a favor del juzgado de El Escorial. Se trata de un hombre que trabajaba en la DGT como piloto desde hace cuatro años y que formó parte de los servicios de emergencia de la Comunidad de Madrid hasta en 2019, año en el que pidió la excedencia para incorporarse a su nuevo destino en Tráfico.

En cuanto al helicóptero accidentado, es uno de los que tiene la DGT para el control de tráfico, especialmente de velocidad y maniobras peligrosas. De hecho, el otro funcionario herido es operador de la cámara de vigilancia con la que está dotado el Pegasus. Como consecuencia del aterrizaje de emergencia, el aparato quedó partido en dos, con la cola desprendida, pero con la carlinga —espacio interior de una aeronave— intacta.

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EFE

En principio, se indicó que el siniestro se produjo por un fallo mecánico que obligó a efectuar a la aeronave un descenso de emergencia en una de las fincas anexas a la carretera. Ahora se descarta esta teoría y al piloto se le acusa de un delito contra la seguridad aérea. Al lugar del accidente acudieron agentes de Seguridad Ciudadana de la Guardia Civil, Policía Judicial y la Comisión de Investigación de Accidentes e Incidentes Aéreos (de la Agencia Estatal de Seguridad Aérea).