Las fotografías que ponen contra las cuerdas al actor Luis Lorenzo y a Arancha Palomino

Después de ser detenidos, y con una orden judicial bajo el brazo, los investigadores de homicidios de la Guardia Civil de Madrid registraron la casa de los sospechosos de haber envenenado a la tía Isabel, de 85 años. Una de las sorpresas fue localizar más de 142.000 euros en el domicilio. Una gran cantidad en el canapé de la cama de matrimonio, otros en cajas de metal, fajos escondidos entre la ropa y en bolsas de plástico.

Se trataba de paquetes de billetes de 100, 50 y 20 euros casi todos. Para los investigadores no tiene mucho sentido guardar semejantes cantidades en efectivo en un domicilio. ¿De dónde salieron? ¿Le sustrajeron el dinero a la tía Isabel de alguna manera? Luis Lorenzo se negó a declarar tanto ante la Guardia Civil como en el juzgado, por tanto, no ha dado explicación. Su mujer, Arancha, por el contrario, sí respondió a las preguntas de su señoría en el juzgado de instrucción.

Ella aseguró: “No sé desde cuándo mi marido lo tiene guardado en casa. Lo tenía escondido por si venían a robar. Él es el que lo tenía en casa porque no se fía de los bancos”. Con estas palabras, y otras en las que asegura que ella solo posee actualmente 4.000 euros, Arancha se quita el peso de encima y señala a Luis Lorenzo como el dueño de los fajos de billetes y como el responsable de tener semejante cantidad en casa.

Por otro lado, a los investigadores les llamó la atención una sustancia blanca que encontraron debajo de unas pilas dentro de una panera con una tela negra de fondo. Cuando entraron en la vivienda, iban buscando cadmio y manganeso. Esta sustancia fue recogida y enviada a los laboratorios. También requisaron varios botes de tintes para cuero y zapatos de gran potencia. Quieren saber si en el líquido que contienen existe cadmio y manganeso, que son los metales pesados localizados en el cuerpo de la víctima.

A los investigadores les llamó la atención una sustancia blanca que encontraron debajo de unas pilas dentro de una panera con una tela negra

El sumario, al que ha tenido acceso El Confidencial, también revela que Arancha llevó a su tía Isabel al notario el 7 de mayo de 2021 por primera vez. En aquella ocasión, la mujer testó a favor de Arancha y le dejó, en exclusiva y solo para ella, “todas las cantidades monetarias de sus cuentas bancarias y la vivienda sita en Grado, Asturias”. La segunda vez que acudió al notario fue menos de dos semanas después.

El 21 de mayo de 2021, la tía Isabel le otorga plenos poderes a Arancha para poder “1) Seguir y continuar las libretas bancarias, pudiendo ingresar y retirar dinero de las mismas, así como hacer trasferencias a otras cuentas. 2) Efectuar cobros y pagos de las sumas que se adeuden como consecuencia de su cuidado. 3) Practicar toda clase de actos y gestiones sobre la salud de la tía Isabel. 4) Otorgar o firmar documentos públicos”.

Todos estos poderes se firmaron en la notaría de Hugo Lincoln Pascual. Arancha hizo uso de estas prerrogativas y, con su tía ya muerta (la autopsia establece que a las 9.00 ya había fallecido), la mujer del actor Luis Lorenzo se trasfirió desde las cuentas de la tía Isabel a las suyas y las de Luis Lorenzo 9.400 euros. Arancha no se conformó solo con estos poderes. Quiso más. Según relata Ana, la cuidadora, ella acudió en la segunda ocasión con Arancha y la tía Isabel al notario. Se lograron los papeles.

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Sin embargo, volvieron a acudir una vez más y, en esa ocasión, el notario no les hizo ningún papel “por el deterioro mental que tenía en ese momento María Isabel”. No obstante, a la mujer de Luis Lorenzo le dio igual la salud de su “amada” tía, quería su poder. Así que acudió a otro notario en la zona de Arganda del Rey. Este hombre también rechazó hacerle cualquier tipo de papel por “el deterioro físico y dificultad en el habla” de la tía Isabel.

Pero lo más llamativo de todo es que Arancha consiguió los poderes y ser beneficiaria del testamento de su tía en el mes de mayo, cuando un mes antes, en abril, se le diagnostica “demencia severa por trastorno de conducta”. La familia de la tía Isabel tiene claro lo que han hecho Luis Lorenzo y Arancha Palomino, pero también se preguntan si el notario no se dio cuenta de la terrible situación en la que se encontraba ya en mayo la víctima.