El Supremo abre juicio a la 'exconsellera' Serret y envía la causa a Cataluña
Fugada desde 2017, regresó a España y se entregó al juez del Tribunal Supremo Pablo Llarena hace más de un año
El Tribunal Supremo acaba de abrir juicio oral por un delito de desobediencia grave a la 'exconsellera' de Agricultura del Gobierno catalán Meritxell Serret. Fugada desde 2017, regresó a España y se entregó al juez del Tribunal Supremo Pablo Llarena hace más de un año. El TS ha dictado ahora un auto en el que, además, acuerda el envío de la causa al Tribunal Superior de Justicia de Cataluña por ser el órgano competente para su enjuiciamiento, al no haberse formulado acusación contra ella por un delito de malversación de caudales públicos.
En su escrito, la Sala recuerda que el Ministerio Fiscal, la Abogacía del Estado y la acusación popular, ejercida por Vox, solicitaron la confirmación del auto de conclusión del sumario dictado por el instructor de la causa del ‘procés’, Pablo Llarena, con fecha 6 de mayo de 2021, y la apertura del juicio oral contra la exconsejera catalana únicamente por desobediencia. En consecuencia, la apertura, por aplicación estricta del principio acusatorio, es exclusivamente por el delito de desobediencia del artículo 410 del Código Penal, "como han solicitado todas las partes personadas, y no puede esta Sala abrir juicio oral por otros delitos sin petición expresa de alguna de ellas".
Tras la apertura de juicio oral por el citado delito, explica que procede, al amparo del artículo 19.3 de la Ley de Enjuiciamiento Criminal, dada la condición de diputada autonómica de Serret, y en coherencia con el criterio de la Sala al resolver los artículos de previo pronunciamiento planteados en la causa del 'procés' por otros acusados, “declinar la competencia a favor del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña, órgano competente para su enjuiciamiento y al que se remitirá el testimonio de particulares correspondiente”.
Excluida
Detrás su entrega, que rompió el bloque de Waterloo, hubo motivos personales. Desde 2017 hasta ayer, Serret fue sintiéndose cada vez más sola, aislada y excluida. Su nombramiento como delegada de la Generalitat no acabó de llenar el vacío de la distancia de los suyos y el apoyo incondicional de ERC no le bastaba. Pese a ser procesada por desobediencia a las decisiones del Tribunal Constitucional y por malversación, Llarena decidió hace meses, tras la sentencia del 'procés', no reactivar la busca y captura en su contra, lo que la dejaba fuera del tira y afloja de la entrega, de la pelea internacional.
El camino que comenzó a diseñar en diciembre acabó a las 10:40 del 11 de marzo en la entrada que el Tribunal Supremo tiene para aquellos que lo visitan en la calle Marqués de la Ensenada. Acompañada por su abogado, se presentó a los agentes que custodian la puerta para anunciar que quería presentarse ante el instructor del 'procés' para regularizar su situación. Llarena no llegó siquiera a verla. Se limitó a indicar que debía ser citada junto al resto de las partes para el próximo 8 de abril a las 11 de la mañana y que debía quedar en libertad.
Fue la letrada del TS la encargada de llevar a cabo la comparecencia, la citación y la notificación del auto que dejaba sin efecto la única de las órdenes de detención que quedaban activas, la dictada para España. Permaneció en el edificio del alto tribunal bajo custodia policial algo más de dos horas y abandonó el lugar con un deseo: "Ahora de lo que tengo ganas, sobre todo, es de hacer los últimos 406 kilómetros hasta mi pueblo para abrazar a mi familia y a mis amigos y seguir adelante".
Otra evidente señal del apoyo de ERC fue la acogida que la esperaba en la puerta. Para darle la bienvenida y acompañarla, se desplazó al lugar el portavoz en el Congreso, Gabriel Rufián, que alabó su "enorme valentía". También estuvieron allí la diputada de la CUP en el Congreso Mireia Vehí y el diputado de EH Bildu Jon Iñarritu. Junqueras lanzó en Twitter: "¡Qué ganas de abrazarte!". Tras la entrega, fue nombrada este domingo nueva portavoz adjunta de la formación en el Parlament.
El Tribunal Supremo acaba de abrir juicio oral por un delito de desobediencia grave a la 'exconsellera' de Agricultura del Gobierno catalán Meritxell Serret. Fugada desde 2017, regresó a España y se entregó al juez del Tribunal Supremo Pablo Llarena hace más de un año. El TS ha dictado ahora un auto en el que, además, acuerda el envío de la causa al Tribunal Superior de Justicia de Cataluña por ser el órgano competente para su enjuiciamiento, al no haberse formulado acusación contra ella por un delito de malversación de caudales públicos.