Tudanca se alinea con Garzón y carga contra las macrogranjas en Castilla y León

El candidato del PSOE en las elecciones de Castilla y León, Luis Tudanca, ha consumado el giro de su partido respecto a la polémica por las macrogranjas. Un tipo de ganadería intensiva sobre el que ha cargado el líder de los socialistas en Castilla y León al asociarlo a fondos de inversión que "vienen a explotar nuestro territorio, estropear el medioambiente, crear empleo escaso y luego se van".

Un modelo, según advirtió durante un desayuno informativo en Madrid, que se resume en el titular de que "Zamora tiene tres cerdos por habitante" y en que habrían generado "graves problemas" en el norte de Palencia o en la Ribera del Duero. Tudanca se ha alineado así con las tesis del ministro de Consumo, Alberto Garzón, que le valieron una desautorización de la parte socialista del Ejecutivo.

El modelo que ha querido poner en valor Tudanca es el de la ganadería intensiva, "un modelo social agrario" potenciando las cooperativas. En definitiva, que, frente al promovido por los fondos de inversión, "ayude a fijar población y crear riqueza". De hecho, las políticas para afrontar el reto demográfico han ocupado un espacio central en el discurso de Tudanca.

Desde el Gobierno, ya se alinearon esta semana con las tesis de Garzón sobre las macrogranjas, que pasaron de ser una "opinión personal", sin encaje en la línea política del Gobierno, a ser compartidas "en lo sustancial". Así lo expresó este lunes la portavoz del Gobierno, Isabel Rodríguez, remarcando que "en lo sustancial ha quedado patente" que están "de acuerdo". Un giro de guion al que se sumaba unos minutos después el portavoz del PSOE, Felipe Sicilia, desde Ferraz, dando un volantazo y asumiendo las tesis de Garzón tras desautorizarlo públicamente.

El uso de los populares de la polémica, hasta el punto de convertirla en el centro de su campaña, ha empujado a los socialistas a detallar el modelo de ganadería que defienden y que casaría a grandes rasgos con el expuesto por el titular de Consumo. El líder de los socialistas y candidato en los comicios de Castilla y León ha dicho ver con "estupefacción" el "espectáculo" de los populares en esta campaña electoral, que explicó por su "necesidad de lanzar una cortina de humo para que no se hable de lo suyo", en referencia a la corrupción. "Han renunciado a defender un proyecto para nuestra tierra" y a "hablar de los problemas reales de Castilla y León".

El desgaste por la polémica que impulsaron los propios socialistas al desmarcarse de su socio de coalición se ha ido haciendo patente por varios motivos. Por un lado, por la pérdida de la bandera verde, dejando a sus socios todo el espacio para reivindicar las políticas en transición ecológica. Por otro, por contribuir a fijar en la agenda el principal asunto con el que el PP está centrando su campaña en Castilla y León, lo que a su vez impide a los socialistas centrar su discurso en la gestión y la recuperación económica, como pretendían.

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Iván Gil

Sobre la política de pactos electorales, Tudanca se ha abonado a las candidaturas de la plataforma España Vaciada. "Confío en que seamos capaces de entendernos para que el Gobierno de cambio llegue", explicó empatizando con las reivindicaciones de este movimiento. "Lo entiendo y lo comprendo, especialmente en mi comunidad autónoma", explicó en referencia a los desequilibrios territoriales, en materia de desarrollo de infraestructuras, creación de empleo y despoblación.

"A eso responden esas candidaturas y yo, desde luego, creo que todos aquellos que quieran sumarse al cambio en Castilla y León son bienvenidos", respondió a la pregunta de si había suficientes coincidencias con estas candidaturas para tejer pactos poselectorales. Al mismo tiempo, advirtió que "ya hemos vivido que quienes enarbolan la bandera del cambio luego, cuando llega el momento, no lo hacen" porque "siempre acaba habiendo tentaciones de perpetuar lo que tenemos". En esta línea, llamó la atención sobre la heterogeneidad del movimiento porque en provincias como Valladolid copan sus listas exmiembros de Ciudadanos. "No parece que represente ni mucha novedad ni mucha revolución", afeó. Es por ello que postuló como la única garantía de sacar a Alfonso Fernández Mañueco de la Junta de Castilla y León que "el PSOE tenga mayoría".

La intención de los socialistas pasa por desplegar una campaña de “guante blanco” con las candidaturas de la plataforma España Vaciada. Poner el foco en lo propositivo para contrarrestar el efecto de una plataforma que reconocen conecta bien con un sentir social del que también pretenden hacerse cargo.

Las candidaturas abanderadas por la plataforma España Vaciada se presentarán en cinco de las nueve circunscripciones castellanoleonesas (Soria, Valladolid, Salamanca, Burgos y Palencia) y, según los cálculos del PSOE, podrían actuar de “bisagra” para la conformación de mayorías. En un contexto en el que los dos grandes partidos necesitarán casi con total seguridad recabar el apoyo de otras formaciones para sacar adelante la investidura, los socialistas no quieren descartar esta plataforma como potencial aliada para empujar un cambio en la Junta y deslizan su voluntad de tender puentes.