La crecida del Ebro amenaza ahora Zaragoza y obliga a cortar accesos en Tarragona
Los aludes y la nieve mantienen cortadas cuatro carreteras en la provincia de Huesca y por la crecida extraordinaria del río Ebro se han cortado otras tres en la ribera alta en la provincia de Zaragoza
La crecida extraordinaria del Ebro tras las intensas lluvias de los últimos días por el paso de la borrasca Barra ha mantenido en vilo a Navarra, La Rioja y País Vasco durante todo este fin de semana. Tras su paso por esas comunidades, los problemas llegaban a Aragón, donde el domingo tarde se preparaban para "la peor de las situaciones" ante las previsiones de que la crecida llegara a la comunidad. El riesgo de crecidas se desplaza ahora hacia Zaragoza tras inundar en casco histórico de Tudela y anegar localidades como Novillas.
Además, a su paso por Tarragona ha obligado en diversas poblaciones a cortar los accesos al río y cerrar algunos servicios de las embarcaciones que cruzan el Ebro, si bien no se prevén mayores complicaciones en esta zona.
El Gobierno ya ha anunciado que declarará zona catastrófica a las localidades inundadas por las riadas, después de que tanto el presidente de Aragón, Javier Lambán, como su homóloga de Navarra, María Chivite, y la de La Rioja, Concha Andreu, hubieran elevado la petición en las últimas horas.
Chivite ha lamentado los dos fallecimientos ocurridos en Navarra durante las inundaciones; el de una vecina de Sunbilla tras derrumbarse un cobertizo sobre su coche y el de un vecino de Elizondo cuyo cuerpo se encontró el sábado en el interior de un vehículo sumergido en el río Bidasoa.
En Navarra persisten las inundaciones a pesar de que haya descendido el caudal y el nivel de los ríos, por lo que el Gobierno foral y los ayuntamientos insisten en su llamamiento al comportamiento responsable de la población para evitar situaciones de riesgo, incluido el acceso a zonas agrícolas afectadas por las avenidas.
Lo ha señalado el Ejecutivo foral en una nota, en la que constata que dos centros escolares, en Pamplona y San Adrián, no han podido abrir hoy sus puertas, mientras que la Escuela Oficial de Idiomas de Tudela ha recurrido a las clases on line, y los alumnos de que residen en Cabanillas y Fustiñana no han podido desplazarse a sus centros educativos al estar inundadas las carreteras.
Desde primeras horas de este lunes el Ayuntamiento de Tudela ha reabierto al tráfico tanto el paseo de Pamplona como el puente sobre el río Ebro, que a las 8 horas presentaba un caudal de 2.322 metros cúbicos por segundo, y que está teniendo un descenso lento.
El alcalde de Zaragoza augura una riada peor que la de 2015
Lambán se ha dirigido a los medios tras asistir a la reunión del Centro de Coordinación Operativa Integrada (CECOPI) en la sede del Gobierno de Aragón para analizar las consecuencias de la llegada de la punta de la crecida del Ebro, sin que hasta el momento se hayan cumplido, ha resaltado, "las peores previsiones".
"Ha sido una noche larga, con los alcaldes al pie del cañón, con todos los operativos activados y muy bien coordinados", ha destacado el presidente de Aragón.
Esperando la punta de la #CrecidaEbro en #Zaragoza,
— AEMET_Aragón (@AEMET_Aragon) December 13, 2021
imagen del domingo 12/12/21 a mediodía, faltando más de 48 h...🌊🌊🌊 pic.twitter.com/SFQwtRkVbR
Tras pasar por la localidad de Novilla, la punta de la crecida del Ebro se dirige ahora hacia Zaragoza y, aunque no llegará hasta últimas horas de este martes, el río ya presenta un caudal de 1.709,83 metros cúbicos por segundo y una altura de 4,71 metros (en 2015, la última gran avenida, alcanzó 2.448 m3/s y 6,10 metros de altura).
"Solo queda esperar y ver cómo transcurren las horas y lo que nos va deparando el río", declaraba a última hora del domingo Lambán. El alcalde de Zaragoza, Jorge Azcón, ha alertado de que la riada será peor que la del 2015, porque con un caudal similar inundará una superficie mayor. Está previsto que llegue a la ciudad en la tarde de este martes, 14 de diciembre y se prolongue durante 48 horas.
El presidente de Aragón ha trasladado su confianza al operativo dispuesto y espera también que los trabajos de limpieza, vegetación y del cauce que se han hecho estos años surtan efectos positivos para aliviar los daños.
En este sentido, ha vuelto a recordar a los agricultores y ganaderos que "los gobiernos no los vamos a dejar abandonados" y que se les tratará de ayudar una vez que se conozcan los daños, ya que la prioridad en estos momentos es salvaguardar la vida de las personas.
Con los alcaldes de #Boquiñeni, #Alcala y #Cabañas, analizando la situación y las previsiones. La colaboración de los ayuntamientos de la ribera es siempre decisiva, por lo que hacen y por lo que saben pic.twitter.com/4YcymAO4CP
— Javier Lambán (@JLambanM) December 12, 2021
El caudal del Ebro en su tramo bajo es de 1.432 metros cúbicos por segundo a su paso por Ascó (Ribera d'Ebre) y de 1.413 metros cúbicos en Tortosa (Baix Ebre).
Según las previsiones de caudal de la Confederación Hidrográfica del Ebro, se llegará a un máximo de 1.459 metros cúbicos en Ascó en las próximas horas, mientras que Tortosa se mantendrá en los 1.412 metros cúbicos por segundos e irá descendiendo paulatinamente.
Como medida de prevención, el Ayuntamiento de Tortosa ha cerrado los accesos al río. Algo más arriba, en Miravet, el paso de barca, que permite cruzar el río a los coches, no funciona estos días debido al incremento de caudal.
En estos momentos los embalses de la parte final del Ebro, Mequinenza y Ribarroja, se encuentran al 72% y al 83% de su capacidad respectivamente y ello permite aminorar el crecimiento del río en su tramo final. Tanto es así que en Amposta, por ejemplo, no se ha previsto, de momento, ninguna medida de prevención.
Novillas y Tudela
Las primeras inundaciones obligaron al desalojo de 55 vecinos de 23 viviendas de la calle Pablo Herráez de Novillas, en una evacuación en la que han participado 16 agentes de la Guardia Civil, cuerpo que se ha reforzado con efectivos llegados desde Madrid.
La punta de la crecida ha anegado dos tercios del término de Novillas, pero ahora la población respira aliviada tras pasar esta noche sin causar daños personales y a la espera de que baje el nivel del agua para evaluar el resto de daños.
Aunque la situación "no es tan crítica" como anoche y el caudal ya ha bajado unos 30 o 40 centímetros, el alcalde, Abel Vera, ha informado de que sigue en niveles "muy altos" y no descarta que aguas abajo la fuerza del agua haya roto todas las motas.
De las 2.500 hectáreas de término municipal, el alcalde calcula que el agua habrá anegado dos terceras partes y se ha "salvado" el casco urbano y "algo" de monte, por lo que ya es superior a la de 2015.
Cruz Roja ha montado camas para 200 personas en cada uno de los pabellones de Luceni y Tauste (Zaragoza), que se han habilitado como albergues provisionales, de los que está a cargo voluntariado del Equipo de Respuesta Inmediata en Emergencias (ERIE) de albergue y psicosocial de la organización, y a los que se han trasladado parte de los vecinos evacuados de Novillas previa realización de test de antígenos.
🌊 El servicio @CopernicusEMS está ofreciendo imágenes #crecidasEbroDiciembre2021 a petición @CH_Ebro que solicitó su activación para ⬆️ el conocimiento con 📷 de zonas inundadas:
— CH del Ebro (@CH_Ebro) December 12, 2021
1. Zadorra - Vitoria 10/12 18:40
2.Tramo Ebro San Adrián -Tudela + confluencia Aragón 11/12 17:49 pic.twitter.com/e1z6CDcDnO
SEGUIMIENTO HIDROLÓGICO 🌊 Máximos del episodio de #CrecidaEbro de carácter extraordinaria se encuentran en el tramo medio en la Ribera Alta aragonesa #Novillas-#Pradilla (Z).
— CH del Ebro (@CH_Ebro) December 13, 2021
✅ Estación #Novillas ya tendencia descendente ⬇️#crecidasEbroDiciembre2021 https://t.co/i4RYVIJMkI pic.twitter.com/L2hSouJzEX
En Pradilla se han reforzado las motas y se han cortado las carreteras CP-2 de la A-126 a Novillas, en Boquiñeni la CP-3 y la A-127a en el acceso a Gallur desde la A-127. Los aludes y la nieve mantienen cortadas cuatro carreteras en la provincia de Huesca y por la crecida extraordinaria del río Ebro se han cortado otras tres en la ribera alta en la provincia de Zaragoza.
En Zaragoza ciudad, el Ayuntamiento ya ha desalojado la urbanización de Doña Sancha, la zona baja del barrio rural de Alfocea y ha comenzado la evacuación de las áreas urbanizadas de Casetón y Torre Villarroya en Movera.
Se han habilitado los pabellones en #Tauste y #Luceni para acoger a personas desalojadas de sus viviendas. @CruzRojaZgz pic.twitter.com/OarVa9jNAo
— Gobierno de Aragón (@GobAragon) December 12, 2021
El Gobierno de Aragón tiene desplegadas en las poblaciones de la Ribera Alta del Ebro en torno a un centenar de personas repartidas entre Sarga (10), siete Agrupaciones de Voluntarios de Protección Civil, personal de 112 y Protección Civil (30 personas), además de Agentes de Protección de la Naturaleza (APN), personal del 061 y trabajadores y trabajadoras sociales.
Está desplegado también personal de los bomberos de la DPZ, Confederación Hidrográfica y Cruz Roja (80).
En Tudela se ha alcanzado el máximo de la crecida en la tarde del domingo, con 2.700 m3/s y una altura de 6,18 metros y ha pasado a nivel 1 de emergencia de inundaciones tras descender el nivel del río Ebro de los 2.709 metros cúbicos por segundo, que registró el domingo a las dos de la tarde a su paso por la ciudad, a los 2.292 metros cúbicos por segundo que ha marcado el sistema de medición instantánea de la Confederación Hidrográfica del Ebro a las 9:00 horas de hoy.
A Zaragoza se calcula que llegará el martes por la tarde, con un caudal entre 2.200 y 2.500 m3/s y una altura de 5,8 a 6,2 metros, mientras que en 2015 se alcanzaron 2.448 m3/s y 6,1 metros.
La crecida extraordinaria del Ebro tras las intensas lluvias de los últimos días por el paso de la borrasca Barra ha mantenido en vilo a Navarra, La Rioja y País Vasco durante todo este fin de semana. Tras su paso por esas comunidades, los problemas llegaban a Aragón, donde el domingo tarde se preparaban para "la peor de las situaciones" ante las previsiones de que la crecida llegara a la comunidad. El riesgo de crecidas se desplaza ahora hacia Zaragoza tras inundar en casco histórico de Tudela y anegar localidades como Novillas.