Sánchez transfiere el IMV al País Vasco y salva la enmienda a la totalidad del PNV

El Gobierno acepta transferir la gestión integral del ingreso mínimo vital al País Vasco y amarra, con ello, que el PNV no presente enmienda a la totalidad a los Presupuestos Generales de 2022. La ejecución de la promesa es cuestión de semanas, según indican fuentes gubernamentales a El Confidencial. Con este movimiento, Moncloa daría un paso para conseguir el voto favorable del grupo vasco a las cuentas públicas del próximo año en las votaciones decisivas, a la espera de las enmiendas parciales donde los 'jeltzales' esperan conseguir mejoras en el tren de alta velocidad.

Los nacionalistas habían exigido al Ejecutivo central completar este traspaso para apoyar los PGE de 2022. De hecho, el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones ha acelerado en los últimos días esta transferencia para que la prestación sea gestionada de forma completa por el País Vasco. Hay unos 150.000 beneficiarios del ingreso mínimo en la comunidad autónoma vasca, que se convertiría en la primera Administración autonómica en dirigir la gestión del mismo. Cataluña y Navarra también lo han pedido.

El departamento dirigido por José Luis Escrivá incrementó a la vuelta del verano las conversaciones con el Ejecutivo vasco para proceder a la transferencia. La decisión política, por tanto, ya está tomada a falta de los últimos trabajos técnicos que se espera que estén finalizados a principios de año. En estas negociaciones con Ajuria Enea, en las que también está participando la socialista Idoia Mendía, vicelendakari segunda y consejera de Trabajo y Empleo, que será quien dirija la gestión de la prestación, están implicados el Ministerio de Hacienda y el de Política Territorial.

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Se trata de una "prestación híbrida", explican las fuentes gubernamentales consultadas, que "bebe" de los datos de Hacienda. En efecto, para la concesión del ingreso mínimo vital no solo hace falta la participación de la Seguridad Social. El papel de la Agencia Tributaria es clave para autorizarla, de ahí que los trabajos técnicos lleven tanto retraso. Es necesario, en definitiva, firmar un "protocolo" que se está ultimando en al Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS).

El Gobierno ya se comprometió con el PNV en la negociación de los Presupuestos en vigor a ejecutar la transferencia del ingreso mínimo al País Vasco. Para el grupo parlamentario dirigido por Aitor Esteban era una condición indispensable para sentarse a negociar. “Lo firmamos el 20 de mayo de 2020 y todavía no ha llegado”, denunciaron los socios del Gobierno hace unos días.

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De hecho, en el proyecto de ley de Presupuestos en negociación, el Gobierno incluyó una disposición adicional donde se concreta esta transferencia del ingreso mínimo al País Vasco. "En razón de la especificidad que supone la existencia de haciendas forales, en relación con esta prestación, las comunidades autónomas de régimen foral asumirán, con referencia a su ámbito territorial, las funciones y servicios correspondientes que en este Real Decreto-Ley se atribuyen al Instituto Nacional de la Seguridad Social así como, en atención al sistema de financiación de dichas haciendas forales, el pago, en relación con la prestación económica no contributiva de la Seguridad Social del ingreso mínimo vital, en los términos que se acuerde".

Es decir, el Gobierno crea en esta disposición adicional, la vigésima cuarta, el marco legal para la transferencia de la prestación a las haciendas forales. Navarra, sin embargo, tendrá que esperar. Fuentes de la Seguridad Social quieren especificar que esta decisión no supone la ruptura de la caja única.