Sánchez pacta con Yolanda Díaz dar entrada a Calviño y Escrivá en la reforma laboral

El Gobierno de coalición, tras seis días de tensión que han puesto a prueba las costuras del Ejecutivo, ha alcanzado en la mañana de este miércoles un acuerdo sobre cómo y quién va a abordar el desmontaje de la reforma laboral del PP. Se intenta poner fin así a una situación incómoda tanto para PSOE como para Unidas Podemos que llevó incluso a convocar una comisión de seguimiento del pacto de Gobierno.

El pacto consta de cuatro puntos. En primer término, la coalición ha acordado dar entrada en la mesa del diálogo social para la reforma laboral, que se reúne todos los miércoles por la mañana, a miembros de los equipos de Nadia Calviño y de José Luis Escrivá. De esta forma, la delegación del Gobierno en esa mesa, donde también se sientan empresarios y sindicatos, la encabezará el secretario de Estado de Empleo, Joaquín Pérez Rey, y entrarán a formar parte de ella un director general de la Vicepresidencia económica y otro director general del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones. No se han concretado los nombres. En función de los temas que se aborden en la mesa, además, podrán acudir representantes de los otros ministerios afectados, como, por ejemplo, Hacienda o Educación.

Este acuerdo supone en la práctica que Economía y Seguridad Social tendrán conocimiento directo de todos los asuntos que se aborden en la mesa de diálogo social, algo que hasta ahora, según denunciaban en los últimos días desde la parte socialista, estaba en cuestión. También se diluye el papel de la Vicepresidencia segunda en esa negociación, hasta ahora exclusivo, ya que a partir de ahora habrá un reparto de papeles entre los ministerios del área económica del Gobierno.

El acuerdo alcanzado diluye el papel de la Vicepresidencia segunda en la mesa de la reforma laboral

Sánchez y Díaz también han acordado que el próximo martes, 2 de noviembre, se celebrará una reunión presidida por el propio Sánchez, y en la que estarán Calviño, Díaz, María Jesús Montero, Escrivá y Pilar Alegría, para fijar la posición del Gobierno en la mesa de diálogo social para la reforma laboral. En este punto es importante que el acuerdo al que han llegado PSOE y Unidas Podemos este miércoles contempla que esa posición sea la misma que "los términos del acuerdo de Gobierno de coalición", indica Moncloa.

Además, todos los martes a las 17:00 horas, tras el Consejo de Ministros, se celebrará una reunión para fijar la posición del Gobierno en esa mesa. A esa reunión asistirán el secretario de Estado de Empleo; el de Economía, Gonzalo García, y el de Seguridad Social y Pensiones, Israel Arroyo. En función de los temas a tratar, podrán acudir otros secretarios de Estado o representantes de los diferentes ministerios que puedan verse afectados. Esas mismas personas se reunirán también los miércoles por la tarde para analizar el desarrollo de la mesa y coordinar el trabajo de preparación de la siguiente mesa de diálogo.

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Por último, cuando sea necesario por la importancia o complejidad política de los asuntos, se producirán reuniones a nivel de vicepresidentas y ministros que se celebrarán, con carácter general, inmediatamente antes o después de la Comisión Delegada para Asuntos Económicos para facilitar la coordinación de agendas. Esta comisión suele reunirse los viernes y es presidida por Calviño. En ella también participan Díaz y Escrivá.

Los términos del acuerdo de coalición

La "derogación" de la reforma laboral es uno de los primeros puntos del acuerdo de coalición sellado en diciembre de 2019. En él se recogen estos términos: "1.3.- Derogaremos la reforma laboral. Recuperaremos los derechos laborales arrebatados por la reforma laboral de 2012". Añade que "impulsaremos en el marco del diálogo social la protección de las personas trabajadoras y recuperaremos el papel de los convenios colectivos. En concreto y con carácter urgente: derogaremos la posibilidad de despido por absentismo causado por bajas por enfermedad; derogaremos las limitaciones al ámbito temporal del convenio colectivo, haciéndolo llegar más allá de las previsiones contenidas en el mismo, tras la finalización de su vigencia y hasta la negociación de uno nuevo; y derogaremos la prioridad aplicativa de los convenios de empresa sobre los convenios sectoriales".

A continuación, el pacto contempla que "modificaremos el artículo 42.1 del Estatuto de los Trabajadores sobre contratación y subcontratación laboral a efectos de limitar la subcontratación a servicios especializados ajenos a la actividad principal de la empresa". Y concluye con "limitaremos la capacidad de modificación unilateral de las condiciones del contrato por parte de la empresa" y "revisaremos el mecanismo de inaplicación de los convenios colectivos, orientándolo a descuelgue salarial vinculado a causas económicas graves".