El juez que investiga la ‘patada en la puerta’ rechaza citar a Marlaska como testigo
Atiende el criterio de la Fiscalía y archiva la causa para cinco de los policías implicados y continúa la investigación por allanamiento solo para el mando que ordenó usar el ariete
La Policía tira abajo sin orden judicial la puerta de una casa por una fiesta ilegal.
El juez que investiga a un grupo de policías por entrar a la fuerza en una casa de Madrid para disolver una fiesta en la pandemia ha rechazado citar como testigo al ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, según el auto al que ha tenido acceso El Confidencial. Lo había pedido el abogado del inquilino del piso al que entraron los agentes usando un ariete. El ministro defendió públicamente la actuación y el letrado quería que aclarase si existía alguna orden en la Policía para proceder de ese modo.
“Se deniega la práctica de las diligencias solicitadas por la acusación particular”, dice el titular del Juzgado de Instrucción número 28 de Madrid, Jaime Serret. A su juicio, “es indiferente la opinión del ministro del Interior. La prueba no es sobre opiniones jurídicas. La prueba es sobre hechos”. Contra este auto, cabe la posibilidad de recurso.
El magistrado ha atendido el criterio de la Fiscalía y ha archivado las diligencias contra cinco de los seis agentes investigados. Mantiene la causa por un presunto delito de allanamiento de morada solo para el subinspector que estaba al mando y que, según los testimonios de los implicados, fue quien dio la orden de entrar a la fuerza. Entiende el juez que el resto de los policías cumplía sus instrucciones.
El juez acepta además cursar una serie de diligencias que había solicitado la Fiscalía y que van encaminadas sobre todo a acreditar que el denunciante era el verdadero inquilino del domicilio donde ocurrieron los hechos. Pide datos sobre los pagos del alquiler, el correo en el que recibió el contrato, declaraciones de los vecinos o la empresa arrendataria o que se solicite al Ayuntamiento de Madrid el padrón de la casa.
Tanto los policías investigados como el ministro del Interior defendieron que nadie vivía en ese piso, sino que era un lugar para celebrar fiestas ilegales y que al negarse a abrir la puerta a los agentes incurrieron en un delito flagrante de desobediencia que justificó tirar la puerta abajo para detenerles.
El juez que investiga a un grupo de policías por entrar a la fuerza en una casa de Madrid para disolver una fiesta en la pandemia ha rechazado citar como testigo al ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, según el auto al que ha tenido acceso El Confidencial. Lo había pedido el abogado del inquilino del piso al que entraron los agentes usando un ariete. El ministro defendió públicamente la actuación y el letrado quería que aclarase si existía alguna orden en la Policía para proceder de ese modo.
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