Los independentistas y los comunes piden investigar las filtraciones del caso Voloh

Los grupos secesionistas catalanes, así como EH Bildu, el BNG y En Comù Podem (la confluencia catalana de Unidas Podemos), han registrado una petición conjunta para reclamar a la Mesa del Congreso de los Diputados la creación de una comisión que investigue las filtraciones de la operación Voloh, de la que ha venido informando El Confidencial. La propuesta llega después de que el portavoz de ERC, Gabriel Rufián, haya presentado una denuncia ante la Fiscalía en la que pide no publicar las conversaciones en las que aparece dentro del sumario del caso y después de que este medio haya desvelado reuniones de su partido en las que este participaba con Xavier Vendrell, investigado en la causa.

"La intromisión a la intimidad por medios ilícitos de líderes políticos y sociales con la intención de conocer información para influir en el debate público ha venido siendo una práctica recurrente", argumenta el escrito en el que se incide en que "la persecución de la disidencia política es una realidad a día de hoy en el Estado español, algo totalmente impropio en una democracia". Los grupos firmantes suscriben que "esta persecución supone un socavamiento de los derechos fundamentales". En concreto, aseguran que se estarían viendo afectados los derechos a la libre asociación política, el derecho a la intimidad y a la libre expresión, reunión y circulación y el derecho al honor".

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Así, explican que se propone la "creación de una comisión de investigación sobre las filtraciones en la conocida como 'operación Volhov (sic) para influir en el debate público". El objetivo de la misma sería "conocer al detalle quienes de los miembros de las FCSE (Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado) son los responsables de las filtraciones de secretos sumariales así como de grabaciones de conversaciones privadas".

El documento también apunta a la necesidad de "investigar la posible existencia de cualquier trama parapolicial al margen de la legislación y el control democrático en el seno de las instituciones". En esta línea, asegura que se pretende "analizar las actuaciones" de Interior sobre las "presuntas irregularidades que vinculan los cuerpos y mandos policiales con las filtraciones" y proponer "medidas de prevención"para "imposibilitar la creación futura de tramas de espionaje irregulares". Proponen, asimismo, que la comisión actúe durante un plazo de entre tres y seis meses desde su constitución, aunque se desconoce por el momento si otros grupos aprobarán su creación.

La petición, presentada este martes, llega horas después de que ERC informara de la denuncia de Rufián en la que solicita las conversaciones en las que participa junto a Vendrell, el asesor de comunicación del partido Sergi Sol y el periodista Eduard Voltas. En esos intercambios dialécticos se duda de la conveniencia de que sea Pere Aragonès el candidato de la formación a la Generalitat.

Solicita, de este modo, que "los medios de comunicación mencionados [sobre El Confidencial] dejen de publicar cualquier grabación de conversaciones privadas en las que me encuentre relacionado, así como que retiren de sus plataformas cualquier mención a estas, en protección de los derechos que me asisten y apelando en todo caso a mi condición de diputado en las Cortes españolas y la necesidad de proteger también la tranquilidad en el desarrollo de mis tareas de representación política".

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El diputado por Barcelona incide en que "estas conversaciones, si han sido obtenidas legítimamente, han sido filtradas a la prensa por los responsables de grabarlas y custodiarlas, es decir, las unidades de policía judicial comisionadas a tal efecto en las que concurren los deberes de sigilo que prevé la normativa procesal". Aunque Rufián no está relacionado con la causa en cuestión, sí que está investigado por tráfico de influencias en la misma uno de sus interlocutores, Vendrell, y se abordan durante la conversación asuntos públicos como la estrategia del partido de cara al 14-F.