Simón habla de "suave ascenso" y señala el cansancio de la población por las medidas

Los últimos datos de la pandemia siempre hay que interpretarlos con mucha prudencia, repite cada semana Fernando Simón. No lo dice por capricho. El pasado jueves, el director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias (CCAES) explicó que se apreciaba "una cierta estabilización" y que podríamos estar en una fase de descenso. Cuatro días después, tras la notificación de 37.899 casos durante el fin de semana, ese moderado optimismo es mucho más frágil.

"Ese descenso que observamos a principio de la semana pasada habría que tomárselo con mucho cuidado", dijo Simón este lunes en rueda de prensa. "La estabilidad que estábamos viendo en las últimas semanas parece que tiene un repunte", añadió el epidemiólogo. "Hemos observado durante unos días un suave descenso y ahora estamos observando un suave ascenso. No sabemos qué observaremos en los próximos días (...) El ministro (Salvador) Illa lo calificó como inestable, que es probable que sea más adecuado de lo que yo pude decir".

El Ministerio de Sanidad notificó este lunes 37.899 nuevos casos y 217 muertes por covid-19. El total de contagiados desde el inicio de la pandemia está muy cerca del millón: 974.449. La incidencia acumulada (casos por 100.000 habitantes) a 14 días está en 312,22, con cuatro comunidades o cuidades autónomas por encima de los 500. Navarra es la región con la incidencia más alta: 945,41 casos por cada 100.000 habitantes en las dos últimas semanas. La situación en Madrid, con una incidencia de 439,33, sigue estabilizándose.

Fuentes de Sanidad señalan que la velocidad a la que están creciendo los contagios en otros países europeos en esta segunda ola es mayor de España a lo largo del verano, y que la duda es saber si aquí se está ya en una fase de estabilización o descenso o la situación será similar en las próximas semanas.

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P. B. A. M. R.

"Estamos todos muy cansados, la población ha estado durante muchos meses con muchas medidas. Con un impacto económico y social muy importante", reflexionó Simón. En su opinión, la adopción de medidas más restrictivas es ahora más difícil porque la ciudadanía sería menos receptiva.

"Imponer medidas más duras es fácil que cueste mucho implementarlas. La aplicación a título individual puede evitar la implementación de medidas muy duras a nivel poblacional. Es lo que puede evitar que se implementen medidas mucho más drásticas que realmente vayan a afectar a nuestra vida social. Y que serían difícil de implementar porque la gente está en un período de cierto agotamiento", dijo. "Tenemos que conseguir que toda la población de españa aplique las medidas de prevención individuales", añadió el director del CCAES.

Sobre la opción de decretar el cierre de los interiores de los locales de hostelería, algo que está sobre la mesa para el nuevo plan de respuesta coordinada que preparan el Gobierno y las comunidades autónomas, y que será estudiado el miércoles por el Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud, Simón, dijo que es "una posibilidad que hay que valorar siempre".

"Todos sabemos que la transmisión en interiores es mucho más fácil que en exteriores. Hay mucha más probabilidad. Eso no quiere decir que todos los interiores sean de alto riesgo. En según qué lugares, si todo se hace muy bien, se puede reducir enormemente ese riesgo. Pero es muy posible que con muchos de ellos, en situaciones de alto riesgo, se tenga que pensar en la posibilidad de cerrarlos", declaró.