Condenan a año y medio de cárcel al autor del 'tour de la Manada'

El Juzgado de lo Penal número 1 de Pamplona ha condenado a año y medio de prisión a un vecino de Madrid que en diciembre de 2018 creó una página web denominada ‘Tour de la Manada’, en la que se publicitaba el supuesto recorrido que siguieron los cinco hombres que violaron a una joven en los Sanfermines de 2016. Los autores de la página, el colectivo 'ultrarracional' Homo Velamine, alegaron que se trataba de "un falso tour" y defendieron "la ironía como arma para desenmascarar uno de los peores males del ser humano, el dogma", pero sus argumentos no han convencido a la magistrada.

La jueza atiende en parte la postura de la acusación particular y condena al acusado por un delito contra la integridad moral, obligándole además a indemnizar a la víctima con 15.000 euros. En la sentencia se rechaza así el criterio del Ministerio Fiscal, que había reclamado su absolución. Según la magistrada, la víctima de la violación “vio agravado el trastorno de estrés postraumático crónico que padece como consecuencia de los hechos sufridos el 7 de julio de 2016”, por lo que da igual que el tour fuera "falso": la página web convirtió a la joven “en un ‘jolgorio’, en una ironía, lo que constituyó un sufrimiento adicional importantísimo”.

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EFE

“No se trata, como pretendió el letrado de la defensa, de buscar en la web expresiones concretas de carácter vejatorio, o referencias individualizadas a la víctima, se trata de una página web en su conjunto que recoge como tour turístico (no informativo) lo que fue un drama para la víctima”, subraya la sentencia. La conclusión de la magistrada sobre el tour es tajante: "Sin duda cosificaba la figura de la víctima de un grave delito contra la libertad sexual”, por lo que “vio expuesto su sufrimiento, minimizado, banalizado y utilizado, en aras de una presunta crítica, en un claro desprecio a su dignidad”.

La magistrada considera probado que la página web supone "un trato degradante, menoscabando gravemente su integridad moral”, pero descarta condenar también a su autor por un delito de odio, como pedía la acusación particular: “Soy consciente de que la web en su conjunto es una impresentable valoración de un delito de agresión sexual, que constituye una falta de respeto a las víctimas de los mismos, e insisto que en concreto atenta contra la dignidad de la perjudicada en este supuesto, pero la exigencia legal requiere una provocación concreta a la comisión de un delito determinado, que entiendo no concurre en este supuesto”, argumenta en la sentencia.

El juicio, celebrado el 26 de noviembre, la propia víctima explicó que el contenido de la web no le pareció una broma, sino que pensó que se reían de ella. Según manifestó, le avergonzaba la simple idea de que hubiera personas paseándose por el lugar en el que sufrió la agresión. En la sentencia, la magistrada explica que esta situación provocó una recaída para ella: ansiedad, insomnio, náuseas, palpitaciones y empeño por no repetir nada que le recordara a lo sucedido. Su terapeuta también incidió en cómo la joven le trasladó sentimientos de "humillación" y en que tenía "pánico a ser reconocida" tras la creación de la página.