Martínez Arrieta, presidente del tribunal del 'procés' tras la salida de Manuel Marchena

El máximo responsable de la Sala de lo Penal del Tribunal Supremo, Manuel Marchena, abandonará su actual puesto para convertirse en presidente del Consejo General del Poder Judicial y del Tribunal Supremo, nombramiento que han pactado PP y PSOE en las últimas horas. El juez ya no dirigirá por tanto el juicio del 'procés' en el alto tribunal, papel que, según informan fuentes jurídicas a El Confidencial, asumirá ahora otro de los magistrados de la Sala de lo Penal: Andrés Martínez Arrieta, considerado más progresista que Marchena.

Martínez Arrieta, de 62 años, formó parte del comité fundador de la asociación judicial Francisco de Vitoria y tiene 38 años de experiencia como juez, 19 de ellos en el Tribunal Supremo, donde pasará ahora a presidir la Sala de lo Penal. El tribunal del 'procés', que está compuesto por siete jueces, lo conformarán además Luciano Varela, Antonio del Moral, Juan Ramón Berdugo, Ana Ferrer y Andrés Palomo, quedando por ahora en el aire el séptimo magistrado que se sume al mismo tras la salida de Marchena, un nombramiento que todavía no ha trascendido. De todos modos, el orden de antigüedad indica que será la magistrada progresista Susana Polo, que tomó posesión de su plaza en la Sala hace menos de dos meses.

Martínez Arrieta es además el magistrado designado por el CGPJ para conocer las actividades del Centro Nacional de Inteligencia (CNI), responsabilidad que desempeña desde que Sánchez Melgar abandonase este trabajo para convertirse en fiscal general a finales de 2017. Aunque Sánchez Melgar fue cesado el pasado junio, Martínez Arrieta sigue siendo a día de hoy el magistrado competente para conocer las actividades de inteligencia.

TE PUEDE INTERESAR

Marchena, el hombre que renunció a dirigir el poder judicial

B. P.

Licenciado en Derecho por la Universidad Complutense de Madrid, Martínez Arrieta tuvo su primer destino en el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción de Azpeitia y, tan solo un año después, en marzo de 1980, fue nombrado vocal del CGPJ en representación de los jueces de primera instancia e instrucción, cargo que mantuvo hasta que ascendió a la categoría de magistrado en 1983.

El juez pasó entonces a un Juzgado de Móstoles y después al Juzgado de Instrucción Número 11 de Madrid, donde se hizo cargo de la causa por la desaparición de Santiago Corella, 'el Nani', un conocido delincuente cuyo rastró se perdió en 1983 después de una polémica detención en la que sufrió torturas.

En 1986 Martínez Arrieta se incorporó a la Audiencia Provincial de Madrid y en 1988 fue nombrado magistrado del Gabinete Técnico del Tribunal Supremo, donde consiguió una plaza definitiva diez años después, en noviembre de 1998. Con 43 años, el juez se convirtió así en el magistrado más joven en acceder a este tribunal.