Soraya exige a Casado cuota en su equipo y el presidente recuerda que ganó el congreso

Soraya Sáenz de Santamaría ha rechazado cualquier cargo para ella misma en el Partido Popular, pero ha exigido una cuota “digna y proporcional” para sus partidarios (42% del voto de los compromisarios) en la primera conversación sostenida con Pablo Casado para buscar la integración del partido tras la pelea del XIX Congreso.

El nuevo presidente del PP ha tenido que recordar a la exvicepresidenta del Gobierno que él ganó el congreso y ahora se dispone a elegir a "los mejores" para los órganos de dirección, incluidos los dirigentes que apoyaron la opción de Santamaría, pero que el encaje no puede ser "proporcional".

Después de casi dos horas de entrevista en el despacho que el presidente del PP ocupa en el Congreso como jefe de la oposición, la exvicepresidenta del Gobierno ha insistido en que su primera y principal preocupación es garantizar la unidad del partido y que los afiliados y compromisarios que le votaron se sientan representados en todos los órganos de dirección.

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Sáenz de Santamaría también ha pedido a Casado el máximo respeto para los dirigentes regionales y provinciales que se decantaron por su candidatura, al tiempo que volvía a recordar que en el voto directo de la militancia registrado el pasado día 5 ella había quedado por delante del nuevo presidente.

A partir de ahora, representantes de los equipos de ambos se encargarán de negociar las incorporaciones solicitadas por la exnúmero dos de Mariano Rajoy. Se ocupan de ello José Luis Ayllón por parte de Santamaría y Teodoro García más Javier Maroto por parte de Casado.

El sucesor de Rajoy destacó después de entrevistarse con Santamaría que había decidido respetar los resultados de todos los congresos regionales y provinciales celebrados en la última etapa, así como las decisiones ya tomadas o "previsibles" sobre las candidaturas en el ámbito autonómico (Andalucía) y municipales.

Sobre la conformación final del comité ejecutivo nacional elegido en el congreso, Casado recalcó que es una decisión que le corresponde a él como presidente y que mantiene su oferta a la exvicepresidenta para que ocupe la plaza de vocal que queda vacante en el grupo de "libre designación" del presidente. Sobre la negociación abierta con el equipo de campaña de Santamaría, puntualizó que se trata de "escuchar" propuestas y nombres, no de fijar cuotas. Comentó al respecto que le resultaba chocante que su antigua rival "pasara en dos días de la defensa de la lista más votada a la proporcionalidad".

Antes y después de la entrevista, Sáenz de Santamaría insistió en su no a desempeñar cargo alguno. "Voy a seguir en política, pero no necesito ningún puesto", sentenció al llegar al Congreso.