Ciudadanos exige ya la dimisión del alcalde de Arroyomolinos o le expulsará del partido

Ciudadanos ha dado un paso más tras la implicación de algunos cargos del partido en la operación Enredadera en la que la UDEF de la Policía Nacional investiga supuestos amaños en contratos en 40 ayuntamientos españoles para beneficiar a una filial de Sacyr, y ha pedido al alcalde de Arroyomolinos, Carlos Ruipérez, —de su formación y detenido en el marco del caso este martes— que dimita como regidor del municipio madrileño. La decisión del núcleo duro naranja llega después de que el juez haya tomado declaración a Ruipérez, dejándole en libertad con cargos. Además, la formación que dirige Albert Rivera advierte que si la dimisión no se produce en las próximas horas, quedará expulsado de sus filas por completo.

El partido está empeñado en diferenciarse de los 'viejos partidos' (PP y PSOE, también implicados en la trama) y para sus dirigentes reaccionar con rapidez ante el primer caso de corrupción que se produce en las siglas naranjas es fundamental. De la misma forma, aseguran que si el concejal del municipio leonés de San Andrés del Rabanedo, Juan Carlos Fernández, se encontrase en esta misma situación, le trasladarán la misma petición. Además de estos dos cargos públicos, los agentes de la UDEF detuvieron también a un asesor del partido en la Diputación de León, Sadat Maraña, que fue coordinador de la formación en esta provincia hasta 2016 e iba encabezar la lista para las generales de 2015 aunque finalmente su candidatura se frustró por una polémica en torno a su currículo profesional. La Policía también investiga al primer teniente de alcalde de Ruipérez en Arroyomolinos, Juan José González Arroyo.

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La reacción dentro de la formación fue inmediata desde el primer momento tras conocerse la operación. En el partido insisten en que no quieren dejar dudas de que "no les temblará el pulso" para combatir cualquier caso de corrupción. La primera medida disciplinaria tomada fue la de suspender cautelarmente de militancia a los detenidos. Y aseguraron que si se confirmaba una imputación, serían expulsados directamente de sus filas. Fuentes del partido reconocen que optaron por ponerse "en el peor escenario" hasta que el juez se pronunciara y si después había que rectificar, lo harían. Cosa que no ha ocurrido y este miércoles al mediodía ya han tenido que dar un nuevo paso al frente exigiendo la dimisión del regidor de Arroyomolinos que, en todo caso, es decisión del propio alcalde. Si no lo hace, Ciudadanos le retirará el carné del partido.

Algunos de los principales dirigentes ya entendían el martes, cuando estalló el caso, que en esta batalla no podrían dar ni un solo paso atrás y la actitud debe ser la de prevención en lugar de "arrastrar los pies", como "siempre hacen PP y PSOE". En la operación Enredadera, la mayoría de casos afectan a estos dos partidos.