Convención del PP: Rajoy omnipresente, sin pistas sucesorias y con Cifuentes diluida

Mariano Rajoy tendrá un presencia constante en la convención nacional del Partido Popular que arranca hoy en Sevilla: los tres días, por la mañana y por la tarde, en la inauguración y la clausura, con Nuevas Generaciones, con estudiantes de Erasmus o el consejo de españoles en el exterior, además de reuniones o entrevistas con dirigentes, militantes e invitados de la sociedad civil. Además de la omnipresencia del jefe del Ejecutivo, la gran asamblea anual de los populares estará marcada por un cuidadoso reparto de papeles entre sus principales figuras del PP para evitar cualquier pista en clave de sucesión de su presidente.

Los pesos pesados del partido participarán en la convención sólo en los foros propios de su actual cargo y para hablar de la materia de su especialidad. María Dolores de Cospedal ejercerá de 'número dos' de la organización, Soraya Sáenz de Santamaría defenderá la gestión del Gobierno en defensa de la unidad de España y 'su' aplicación del artículo 155 de la Constitución en Cataluña. Y el presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo, se sentará en la misma mesa de debate y en pie de igualdad con otros jefe del ejecutivos regionales como Fernando López Miras (Murcia) o dirigentes del partido como Xavier García Albiol, Asier Antona, Mercedes Fernández, y María José Sáenz de Buruaga.

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Cristina Cifuentes estará en otro foro distinto junto con los 'barones' autonómicos Juan Vicente Herrera (presidente de la Junta de Castilla y león), José Ignacio Ceniceros (La Rioja) y Juan José Vivas (Ceuta). En su caso los presidentes regionales adscritos son José Antonio Monago (Extremadura) y Ana Beltrán (Navarra) más la secretaria general del PP andaluz, Loles López.

Rajoy tiene doble cita con jóvenes, primero con los representantes de Nuevas Generaciones encabezados por Diego Gago y después con un grupo de estudiantes de Erasmus de diferentes países europeos que le plantearán preguntas en directo. Será el colofón a un acto de exaltación de los valores de la UE, con vídeo sobre los orígenes de la Unión e himno, todo a cargo de la delegación española en el Parlamento Europeo que dirige Esteban González Pons.

El aparato del PP quiere que la convención, a la que asisten unos 2.500 dirigentes y militantes, sirva como "revulsivo" para la organización con la vista puesta en el ciclo de elecciones que viene: andaluzas en el primer trimestre del próximo año si no se adelantan a este otoño más autonómicas, municipales y europeas en mayo de 2019.

En la sede de Génova también plantean la convención como una oportunidad para reforzar la autoridad de su presidente dado que el propio Rajoy no quiere que se abra el debate sobre su candidatura a la presidencia del Gobierno para las siguientes generales hasta el final de la legislatura.

La asamblea no es órgano de decisión de los populares. Cubre el vacío de los ejercicios sin congreso nacional, pero no sirve renovar cargos ni para aprobar programas, aunque al final de los paneles de debate sí se adoptaran algunas resoluciones que luego podrá inspirar propuestas electorales.

Lo que no estaba previsto en el programa original de la convención es que una de las principales figuras del partido como es Cristina Cifuentes tuviera que lidiar con el caso de su controvertido máster. En fuentes del PP admiten que tendrán que hacer un esfuerzo de coordinación para encontrar el punto medio entre el obligado cierre de filas y la prevención necesaria ante la intervención de los tribunales.