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Madrid salva el caos de la primera nevada y aguanta la respiración ante una noche gélida
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FUERTE TEMPORAL EN LA COMUNIDAD

Madrid salva el caos de la primera nevada y aguanta la respiración ante una noche gélida

Las alertas continúan este martes y seguirán vigentes hasta que el tiempo mejore y no existan riesgos. El lunes se cancelaron más de 70 vuelos y se limitó el tráfico en carreteras

Foto: Vista de la fuente de Cibeles bajo la intensa nevada en Madrid este lunes. (EFE)
Vista de la fuente de Cibeles bajo la intensa nevada en Madrid este lunes. (EFE)

La estampa que dejó la nieve en Madrid no se recordaba desde hacía tiempo. Copos de nieve cayendo por la Gran Vía de la capital y el parque del Retiro teñido de blanco. Muchas administraciones y empresas mandaron a los trabajadores de vuelta a casa en vista de los problemas que tenían con el tráfico, y alumnos de la Universidad Autónoma y de la Rey Juan Carlos vieron cómo sus clases quedaban suspendidas desde el mediodía. Pero no todo fue un paisaje bucólico. La abundante precipitación cuajó rápido y tuvo especiales consecuencias en las carreteras. Las vías urbanas e interurbanas comenzaron a llenarse de coches y se generaron grandes atascos. Incluso la Guardia Civil limitó la circulación en la M-40 a dos o tres carriles en algunos tramos y obligó a camiones y vehículos pesados a parar durante horas, hasta que el temporal amainó. Las alertas continúan este martes y seguirán vigentes hasta que el tiempo mejore y no existan riesgos.

En la tarde del lunes, el Ayuntamiento de Madrid activó el nivel naranja del Plan de Emergencias Invernales, que se pone en marcha cuando el espesor acumulado de nieve prevista es superior a cinco centímetros en el área metropolitana. Una alerta que se mantendrá hasta ver cuál es la situación a lo largo de este martes, aunque el balance de la primera jornada de fuerte nevada fue positivo. Los servicios de limpieza municipales comenzaron el domingo las tareas de esparcimiento de sal por los 21 distritos y a lo largo de la jornada de ayer actuaron intensamente en las labores de retirada de nieve. Priorizaron, según explica el consistorio, los intercambiadores de transporte, centros de salud, parques de bomberos y las principales vías de circulación ante la previsible bajada de temperaturas en la noches del lunes al martes.

Los pasajeros graban los estragos de la nieve en el aeropuerto Madrid-Barajas

Las calles consideradas principales —que sirven de salida o acceso a núcleos de población— son un total de 608 (donde el ayuntamiento puso el foco esta noche), y de las secundarias, 452 también se vigilaron especialmente, al ser zonas que podían acumular placas de hielo. En total, la ciudad registró a lo largo del lunes 48 accidentes de tráfico con alguna persona herida y otros 30 siniestros sin daños personales. El cuerpo de bomberos municipal realizó un total de 40 salidas relacionadas con la meteorología.

placeholder Nieva en el madrileño parque del Retiro. (Reuters)
Nieva en el madrileño parque del Retiro. (Reuters)

Uno de los grandes focos de atención está puesto en el aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas, en el que las aerolíneas cancelaron un total de 70 vuelos (33 llegadas y 37 salidas) y desviaron seis (dos a Barcelona y cuatro a Valencia) de los 1.075 programados para todo el día: en total, el 7% de los vuelos. Igual que las administraciones, ante la llegada del temporal Aena activó el Plan de Invierno en el aeródromo para evitar que las pistas se helaran y la nieve quedara acumulada. Eso supuso trabajos de prevención y el cierre de dos de las cuatro pistas durante dos horas. Con todo, no es la primera vez en que el aeropuerto madrileño ha tenido que cerrar por las inclemencias meteorológicas. En 2009, y bajo el mandato de Zapatero con Magdalena Álvarez en el Ministerio de Fomento, Barajas cerró alrededor de cinco horas por una nevada caótica que puso en jaque a la capital y al resto de España.

Cadenas en los puertos, cortes en carreteras

La Comunidad de Madrid también actuó de forma preventiva ante las copiosas nevadas que llegaban a primera y a última hora del día. La primera se prolongó durante alrededor de seis horas, desde las 10 de la mañana hasta las cuatro aproximadamente. El temporal dio entonces un respiro hasta las nueve de la noche, cuando comenzó a nevar intensamente. En total, el dispositivo desde el fin de semana puso a pleno rendimiento cerca de 200 máquinas quitanieves para limpiar la red de carreteras de la región, de 2.500 kilómetros. La actuación extraordinaria de los servicios de emergencias se enmarcó en el nivel 2 del Plan de Inclemencias Invernales de la Comunidad de Madrid (el más alto es el 3, y ya requeriría de medidas extraordinarias por parte del Ministerio del Interior), cuyos miembros estuvieron toda la tarde reunidos en el Centro de Emergencias 112 para hacer un seguimiento exhaustivo de la situación.

placeholder Fotografía facilitada por Iberia del aeropuerto de Barajas, donde el temporal obligó a cerrar dos pistas.
Fotografía facilitada por Iberia del aeropuerto de Barajas, donde el temporal obligó a cerrar dos pistas.

A lo largo de la tarde se hizo necesario el uso de cadenas en los puertos de Navacerrada, Cotos, Morcuera, Canencia, El Cardoso, La Hiruela y Navafría, que hasta media mañana podían ser transitados sin problemas. Tras la primera nevada, sin embargo, la Dirección General de Tráfico recomendó no atravesarlos, llevar cadenas y usar transporte público si fuera posible. Durante las primeras precipitaciones del día, el 112 gestionó 73 expedientes por incidencias relacionadas con la nieve. De ellos, nueve por accidentes de tráfico sin heridos graves.

Algunos de los episodios más extraordinarios los gestionó Cruz Roja con la coordinación de la comunidad, como fue el del aparcamiento situado en el kilómetro 45 de la A-1 en El Molar, donde debieron proveer a última hora de la tarde del lunes de alimentos y bebidas a un grupo de camioneros, que se encontraban allí desde primera hora de la mañana y habían solicitado ayuda.

Dispositivo especial de la DGT

La Dirección General de Tráfico decidió mantener este martes el dispositivo especial con motivo del fuerte temporal que azota todo el país y especialmente el norte de la península Ibérica. La Agencia Estatal de Meteorología prevé que a lo largo del día se mantenga el riesgo de nevadas tanto en Cataluña como en el norte de Castellón y Aragón. Será en estas comunidades, por lo tanto, donde se centrará la atención especial de la DGT, que estos días ha desplegado efectivos en la práctica totalidad de las provincias del norte de España.

Foto: Una máquina quitanieves limpia la A-67, a la altura de la localidad cántabra de Pesquera. (EFE)

En concreto, Asturias, Castilla y León, Cantabria y La Rioja han sido las regiones más afectadas por la nieve, con numerosos pasos cerrados o restringidos al tráfico de camiones. En un nivel ligeramente más bajo, Cataluña, Comunidad Valenciana, País Vasco, Extremadura y Madrid. En total, cerca de 400 carreteras se encontraron afectadas por la nieve y el hielo en todo el país, de las que 56 permanecieron cortadas al tráfico.

Ante tal temporal, que ha provocado 12 muertos en las carreteras durante el fin de semana, el lunes se reunió en el Ministerio del Interior el denominado Comité Especial de Coordinación de Nevadas en Grandes Ciudades, presidido por el subsecretario Luis Aguilera y representado por los altos cargos de Transportes de la Comunidad de Madrid, de la Dirección General de Carreteras, de Protección Civil, de Tráfico, de la Agencia Española de Meteorología, Emergencias, la Guardia Civil y del ayuntamiento de la capital.

La estampa que dejó la nieve en Madrid no se recordaba desde hacía tiempo. Copos de nieve cayendo por la Gran Vía de la capital y el parque del Retiro teñido de blanco. Muchas administraciones y empresas mandaron a los trabajadores de vuelta a casa en vista de los problemas que tenían con el tráfico, y alumnos de la Universidad Autónoma y de la Rey Juan Carlos vieron cómo sus clases quedaban suspendidas desde el mediodía. Pero no todo fue un paisaje bucólico. La abundante precipitación cuajó rápido y tuvo especiales consecuencias en las carreteras. Las vías urbanas e interurbanas comenzaron a llenarse de coches y se generaron grandes atascos. Incluso la Guardia Civil limitó la circulación en la M-40 a dos o tres carriles en algunos tramos y obligó a camiones y vehículos pesados a parar durante horas, hasta que el temporal amainó. Las alertas continúan este martes y seguirán vigentes hasta que el tiempo mejore y no existan riesgos.

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