El PSOE fija su hoja de ruta igualando en ataques a Podemos y Pedro Sánchez
Las feministas del partido se rebelan y exigen rechazar la gestación subrogada mientras que 'desde arriba' dan orden de no cerrar posiciones en ningún asunto que genere división
Del foro político del PSOE, ese gran encuentro para fijar el qué y el proyecto, no saldrá un documento político cerrado. No aún. Es así, explican desde la gestora, ante la "avalancha" de enmiendas recibidas durante el debate. Las bases se verán el próximo sábado 1 de abril, en el comité federal que convocará el 39º Congreso y establecerá definitivamente el calendario del proceso, que tendrá como principal hito las primarias para elegir líder, que se esperan para el 21 de mayo.
La convención política, que coordinaba Eduardo Madina, llamada a convertirse en la última gran discusión programática antes del pistoletazo de salida de la lucha entre los tres candidatos al liderazgo del PSOE, se convirtió en buena medida en la antesala de la puesta de largo de Susana Díaz, que arrancará este domingo en Madrid. Antesala porque estuvo trufada de ataques, más o menos directos, hacia Pedro Sánchez... y en paralelo hacia Podemos, en algunos casos asimilándolos. Y es que para muchos dirigentes alineados con Ferraz el ex secretario general está más "fuera del PSOE" que dentro.
Abrió fuego por la mañana, en la inauguración del foro, Javier Fernández, el presidente de la dirección provisional, al alertar de que el PSOE no puede convertirse en una "mera plataforma al servicio de un líder", ni ser un partido "más asambleario que representativo". Combatía así el modelo de hiperliderazgo atribuido a Sánchez. Y siguieron por la tarde, en la clausura, tanto Madina como Mario Jiménez, el portavoz de la gestora. Ambos apuntalaron la idea de que el PSOE necesitaba una reflexión "serena y tranquila", un "esfuerzo de discusión intelectual" que afronte los desafíos del país, porque "la realidad de España ni se resume en una consigna, ni cabe en un lema ni se expresa en 140 caracteres", en palabras del dirigente andaluz.
"Y lo hemos hecho —siguió— fortaleciendo nuestra organización con el material más preciado, con el que se han hecho los sueños, que son las ideas". Y aquí intercaló Jiménez su andanada contra Sánchez, sin mentarlo. "Sé que hablar de ideas o de ideología en un momento en que algunos están intentando repartir carnés de posicionamientos ideológicos puede ser complicado, pero yo no me resisto. No me gusta que pase en mi partido, pero está pasando", apuntó, para que no cupiesen dudas de que se refería a Sánchez, que se presenta ante los militantes como el aspirante de la izquierda del partido. Jiménez, no obstante, criticó a continuación a otros partidos —léase Podemos— que están aprovechando "los procesos internos" para "juzgar" a los socialistas.
Jiménez defiende el debate de las ideas frente a quienes quieren "repartir carnés ideológicos" en el PSOE (Sánchez) y también fuera de él (Podemos)
Madina, mientras, aseguró que se propuso, como coordinador de los trabajos, "no entrar en la tienda de las ocurrencias", ni hacer "un corta y pega", ni "caer en la tentación del 'trending topic', ni en lo que más suena y pita", sino poner el foco "en los problemas de la sociedad, que es lo que este documento [la ponencia marco] hace". Reivindicaba así, como había hecho horas antes Fernández, el ser y esencia del PSOE, que a juicio de los oficialistas ha desvirtuado Sánchez... igual que Podemos prefiere deslizarse por las modas en lugar de presentar un proyecto solvente.
No tocar los "consensos nucleares"
El parlamentario recalcó que la ponencia "avanza en ciertos campos", pero en otros "estabiliza" y "refuerza posiciones" políticas ya muy aquilatadas dentro del PSOE, como el modelo federal o las propuestas planteadas en los dos anteriores programas electorales, los de Sánchez. Así que el documento presentará una "foto fija sin oscilaciones". Sin virajes bruscos, con algunos cambios pero sin tocar los "consensos nucleares del PSOE que tienen años y años" y que se "respetan".
Madina despertó una gran ovación cuando atacó una de las líneas de flotación de la candidatura del exlíder: su presentación como "candidato de la militancia" frente a lo que encuadra como el 'establishment' del partido. "¿Hay algún problema en reivindicar el orgullo de que este partido haya gobernado? ¿Algún problema? No, no lo hay. Estar sentado al lado de [las exministras] Rosa Conde y Matilde Fernández [que como él han formado parte del equipo redactor de la ponencia marco] es un honor. Es mi partido y es lo mejor que tiene". Esa defensa de los 22 años del PSOE en el poder, que "han cambiado la realidad en nuestro país", es una de las piedras angulares, además, del discurso de Díaz.
La política de alianzas es algo que separa radicalmente a los oficialistas —y a Patxi López— de Sánchez. Mientras que el ex secretario general apuesta con un entendimiento con Podemos y los sindicatos, la dirección provisional y Díaz defienden un PSOE "autónomo" que aspire a ganar, que "no se conforme con ser un sumando", sino que ambicione con "ser el resultado de la suma de la voluntad y del impulso de los hombres y mujeres progresistas de este país", señaló Jiménez ante los 600 asistentes al foro, en el auditorio de la ONCE de Madrid. El PSOE, siguió, no solo "aspira a liderar la izquierda, sino a liderar España".
Madina recibe una ovación cuando recuerda el "orgullo" de los 22 años de gobiernos socialistas. Una defensa del pasado que también hace Díaz
Madina, por su parte, reconoció que ha llegado "el tiempo de la cultura del pacto y del acuerdo político al servicio de la sociedad española", pero no todos los pactos valen, avisó. Y ahí defendió la labor desplegada por la gestora y la promoción de los acuerdos trenzados en el Congreso, algunos de ellos con el PP, como la prohibición de los cortes de luz a las familias vulnerables o la subida del salario mínimo, y otras tejidos contra el Gobierno, como el comienzo del desmontaje de la reforma laboral o de la 'ley mordaza'.
En definitiva, según recalcó el diputado vasco, de la ponencia política sale un PSOE "más unido y más fuerte" , con "un proyecto de país mucho mejor" y que llevará al partido "en volandas en las próximas elecciones generales a ganarlas y ser primera fuerza".
La pugna con el colectivo LGTBI
Pero el debate no concluye aquí. Una vez que la ponencia marco incorpore las últimas modificaciones, acordadas hoy, y sea aprobada por el comité federal del 1 de abril, el texto pasará a ser enmendado por los militantes, y su redacción final se aprobará en el 39º Congreso, el 17 y 18 de junio. Precisamente porque queda camino por delante, el PSOE no entró a fondo en el debate de la gestación subrogada y optó por aparcar un asunto que genera una gran tensión en las filas del partido.
Micaela Navarro, que presidía una de las mesas, subraya que no es momento de fijar posición y Valcárcel pide abrir un debate "sin acritud"
Ese choque entre las feministas y el colectivo LGTBI no afloró pero está ahí. Las primeras trataron de empujar para que la gestación subrogada sea rechazada en el documento marco que llegará al próximo congreso federal. La catedrática de Filosofía Moral y Política Amelia Valcárcel, consejera de Estado y miembro del equipo redactor de la ponencia, lideró este debate y de antemano dejó claro su rechazo. Sin embargo, fuentes socialistas aseguraron que el documento, aunque fijará un no de entrada a los vientres de alquiler sí remarcará que no está cerrado el debate sobre este asunto.
La portavoz de Igualdad en el Congreso, Ángeles Álvarez, pidió la palabra en el debate interno para respaldar las tesis de este sector del PSOE que se niega tajantemente a lo que consideran una mercantilización del cuerpo femenino, que abunda además en el clasismo económico y denigra a las mujeres, según sus opiniones. Su petición era que ya llegara un rechazo fijado a los vientres de alquiler en la ponencia marco. Micaela Navarro, presidenta del PSOE andaluz y encargada de conducir la mesa de diálogo donde se discutía este tema a puerta cerrada, dejó claro que no era el momento de fijar posiciones y Valcárcel solicitó abrir un debate "con razones" y "sin acritud".
"Saldrá un partido feminista que aplica políticas feministas no como un colectivo o un regalo, sino porque las mujeres son la mitad", dice Madina
Los socialistas no quieren fijar ninguna posición de antemano y el colectivo LGTBI, a favor de la gestación subrogada, también se ha posicionado para dejar muy claro que quiere tener voz y la oportunidad del debate. Fuentes socialistas señalaron que Susana Díaz había pedido especial cuidado con este asunto y no entrar en asuntos que "solo pueden generar más divisiones". Ella, aseguran desde su entorno, no tiene una opinión cerrada y escucha a muchos compañeros gays y lesbianas que le piden dar una oportunidad a esta regulación.
La ley de reproducción asistida de 2006 que aprobó el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero en 2006 declaraba nulos los contratos de gestación subrogada pero dejó abierta una puerta para que los niños se pudieran inscribir en el Registro Civil. "De aquí saldrá un partido feminista que aplica políticas feministas no como un colectivo o un regalo, sino porque las mujeres son la mitad de la sociedad. No hay posibilidad de ser socialista sin ser feminista", lanzó como guiño en su intervención Madina. El PP también pasó de puntillas a pesar de que un sector del partido se mostró públicamente a favor de regular este asunto.
El PSOE pone punto final a la discusión preliminar sobre el qué. Ahora empieza (lo había hecho ya, pero ahora de forma inexorable) la guerra del quién. La que atraviesa a todo el partido y la que verdaderamente le fractura.
Las camisetas hípsters 'made in PSOE'
Ya que una marca americana ha copiado tal cual el logo histórico del PSOE, el que José María Cruz Novillo creó en 1977, y lo ha plantado en camisetas hípsters a unos 30 dólares, pues el propio PSOE ha pensado que mejor rentabiliza él su imagen. Así que el partido ha puesto a la venta unas camisetas con el mismo diseño que la estadounidense Stussy: con el puño y la rosa estampado en la parte izquierda de la pechera y en la espalda, bien grande. En varios colores y a 12 euros. O sea, algo más baratas que las americanas y con el mismo aire retro. Dicho de otro modo: el PSOE aprovecha el tirón de la polémica para hacer negocio. Las camisetas estaban este sábado a la venta en un 'stand' del foro político y próximamente estarán disponibles en la web de la tienda del partido.
La convención de este domingo congregó a más dirigentes socialistas que la anterior, la económica, hace un mes. Los portavoces del partido en Congreso, Senado, Parlamento Europeo, Asamblea y Ayuntamiento de Madrid, Antonio Hernando, Tini Álvarez Areces, Ramón Jáuregui, Ángel Gabilondo y Puri Causapié; la eurodiputada Elena Valenciano; el expresidente andaluz José Rodríguez de la Borbolla; los patxistas Rafa Simancas, Javier Rodríguez o José Enrique Serrano... Un ramillete completo de oficialistas y partidarios del exlendakari..., pero allí no había nadie del núcleo duro de Pedro Sánchez. Igual que ocurrió hace un mes.
Del foro político del PSOE, ese gran encuentro para fijar el qué y el proyecto, no saldrá un documento político cerrado. No aún. Es así, explican desde la gestora, ante la "avalancha" de enmiendas recibidas durante el debate. Las bases se verán el próximo sábado 1 de abril, en el comité federal que convocará el 39º Congreso y establecerá definitivamente el calendario del proceso, que tendrá como principal hito las primarias para elegir líder, que se esperan para el 21 de mayo.