Bárcenas retira la acusación contra el PP por el borrado de sus ordenadores

El extesorero del PP Luis Bárcenas ha decidido retirar la acusación que mantenía contra el PP en la causa que investigaba los ordenadores del que fuera responsable de las cuentas del partido. Los discos duros de los dispositivos fueron destruidos por orden de los responsables de Génova en plena polémica por la supuesta contabilidad B del partido y el extesorero lo denunció. La causa que instruye el Juzgado 32 de Madrid investiga desde entonces si los que borraron los dos equipos que utilizaba habitualmente Bárcenas incurrieron en un delito de daños informáticos o en otro de encubrimiento.

La titular del Juzgado de Instrucción 32 de la capital, Rosa María Freire, procesó el pasado mes de julio al partido, a su tesorera Carmen Navarro, al informático José Manuel Moreno y el abogado de la formación Alberto Durán, por la eliminación de los discos duros de los dispositivos que el extesorero empleaba en la sede del partido en la calle Génova de Madrid. Según los informes periciales, fueron formateados hasta 35 veces, como adelantó El Confidencial, con el fin de realizar un borrado completo, cosa que el PP argumentó diciendo que es lo que exigen los protocolos.

La magistrada entiende que los altos cargos del partido que ordenaron la destrucción de los dispositivos podían estar tratando de eliminar la contabilidad B del partido que almacenaba el extesorero. Cuando en 2003 se conoció el escándalo de estas cuentas paralelas que llevaba Bárcenas, el PP le prohibió acceder a su despacho. El exsenador solicitó sus pertenencias y los dirigentes del PP le devolvieron 27 cajas de documentación, pero no los ordenadores.

Ahora, sorprendentemente, Bárcenas ha dado instrucciones a su abogado, Francisco Maroto, para que se retire de este procedimiento, en el que también ejercen la acusación la Asociación Libre de Abogados y otras agrupaciones. El procesamiento fue recurrido por el PP en reforma a principios de verano y la Fiscalía no había presentado acusación alguna.

De este modo, la causa pierde al acusador más importante, y la imputación contra todo el partido, uno de los argumentos más empleados por la oposición para denunciar la corrupción en el PP, puede quedar finalmente archivada.