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Accidente de avión: El copiloto se negó a abrir la cabina y estrelló el avión de forma voluntaria contra la montaña
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Accidente de avión: El copiloto se negó a abrir la cabina y estrelló el avión de forma voluntaria contra la montaña

Fue una "abstención voluntaria" de abrir la cabina lo que motivó el accidente, habiéndose accionado adrede el botón de la pérdida de altitud de la aeronave

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La Fiscalía de Düsseldorf ha comunicado que la policía alemana ha registrado las viviendas -una propia, en la misma localidad, y la familiar- del copiloto del avión de Germanwings estrellado en los Alpes, Andreas Lubitz, horas después de anuciar que solo él se encontraba en la cabina de la aeronave, que llevaba 150 personas (lista de pasajeros).

A pesar de tener una vivienda en Düsseldorf, Lubitz residía con sus padres en en el pequeño pueblo de Montabaur, en la región alemana de Renania-Palatinado.

La declaración de que el copiloto estaba solo en la cabina ha sido reforzada por el fiscal de Marsella, Brice Robin, que lleva desde el martes la investigación del accidente. En ella, Robin ha aclarado que el copiloto tuvo "la voluntad de destruir el avión" y que la investigación apunta a un "homicidio involuntario" por parte de Lubitz, de 27 años, –siga aquí en directo la información.

"El copiloto se abstuvo voluntariamente de abrir la cabina" y accionó el botón que ordenó la pérdida de altitud de la aeronave, ha afirmado el fiscal de Marsella, que ha insistido en que, de momento, no se puede hablar de un suicidio como motivo de las acciones del piloto. "No utilizo ese término porque tenía la responsabilidad de 150 personas", ha sostenido el fiscal.

"No tenía ninguna razón para no responder a las llamadas del control aéreo", aseguró Robin ante los medios. "Te dejo los mandos" son las últimas palabras dichas por el capitán que abandonó la cabina y que fueron grabadas en el audio recuperado. Además, le dejó el piloto automático activado. Según parece, Lubitz aprovechó la ausencia del capitán para cerrar la puerta por dentro y hacer descencer el aparato hasta su impacto final.

El Consejo de Ministros de España se reunirá este viernes para analizar los últimos datos acerca del accidente de la aeronave, en la que viajaban 50 españoles.

Varias aerolíneas, como la británica easyJet, han reaccionado a los resultados de la pesquisa con un cambio en su política empresarial, obligando a que dos miembros de la tripulación permanezcan en la cabina en todo momento durante los vuelos.

Lubitz, un hombre aparentemente normal

Andreas Lubitz –cuyo perfil ha sido redactado por El Confidencial- estaba vivo en el momento del choque: "Oímos la respiración del copiloto hasta el impacto", ha dicho el fiscal de Marsella añadiendo que en la grabación "hay un silencio total hasta el impacto, pero se le oye respirar", por lo que se descarta que tuviera algún tipo de problema de salud.

En cuanto a la nacionalidad del copiloto, el fiscal de la investigación ha confirmado que es alemán pero que desconoce su origen familiar. En este punto ha afirmado que "no aparece en las listas de miembros terroristas" y "nada hace pensar en un ataque terrorista".

Pese a que en los primeros 20 minutos el copiloto mantuvo una conversación "normal y cortés" con el comandante, después se escucha al piloto preparar el informe de aterrizaje en Düsseldorf, al lo que el Andreas Lubiyz responde de forma "lacónica". Según ha informado Robin, las víctimas no se dieron cuenta de lo que iba a suceder hasta el último momento puesto que en la grabación no se escuchan gritos hasta poco antes del impacto. "Sabían que iban a morir", ha sentenciado.

El presidente de la aerolínea Lufthansa, Carsten Spohr, dijo que la compañía desconoce los motivos que llevaron al copiloto a provocar de forma consciente el descenso del avión en el que iban 150 personas, y estrellarlo. Afirmó que la empresa está "consternada" tras conocer la grabación de la caja negra del avión siniestrado de su filial Germanwings y dijo que "lo que ha ocurrido era inimaginable".

"Ni en nuestros peores sueños hubiéramos podido imaginar algo así", dijo el presidente de Lufthansa, que aseguró que la aerolínea selecciona el personal con mucho cuidado. Spohr mostró absoluta confianza en sus pilotos y en los criterios de selección que tiene la mayor aerolínea de Alemania, y calificó lo ocurrido como "el acontecimiento más horrible en la historia de nuestra compañía".

La web Flightradar 24 apunta también en esta dirección. Según anuncian en su perfil de Twitter, el piloto automático fue cambiado de forma manual de 38.000 a 100 pies a las 9:30:55 horas.

Lufthansa y Germanwings confirman la versión

Por su parte, el CEO de Lufthansa, Carsten Spohr, ha confirmado que el capitán abandonó la cabina cuando logró la velocidad de crucero y que el copiloto no le permitió el acceso a su compañero al interior. "El piloto introdujo el código pero le bloqueó la entrada", ha dicho.

Insistiendo en varias ocasiones en que ambas compañías seleccionan de "forma estricta" a sus trabajadores y que en los pilotos "no solo buscan experiencia sino aptitudes psicológicas", Spohr ha informado que Andreas Lubitz comenzó su formación en 2008 y que hizo un "parón" en ella durante varios meses. Una vez de vuelta, pasó los pertinentes controles.

Hasta 2010 y durante 8 meses, el copiloto alemán trabajó como auxiliar de vuelo hasta que finalmente logró su actual puesto. "Su actitud era impecable", ha asegurado el CEO de la compañía aérea.

Esta 'doble' confirmación llega más de 12 horas después de que un militar de alto rango involucrado en la investigación informara al diario estadounidense 'The New York Times' que uno de los pilotos del avión de Germanwings se encontraba fuera de la cabina de mando antes del accidente.

La fuente consultada por el periódico estadounidense explica que en la primera parte del vuelo entre Barcelona a Düsseldorf se escuchaba una conversación "muy suave" entre los pilotos. Sin embargo, el audio indica que a continuación "uno de los pilotos salió de la cabina y no pudo volver a entrar". 'Le Monde' apunta a que sería el capitán quien se quedó en la cabina.

"Se puede escuchar que está intentando echar abajo la puerta y no había una respuesta", ha agregado el investigador a The New York Times, que indica cómo la intensidad de los golpes se iba incrementando sin encontrar respuesta. El informador -en condición de anonimato, pues continúan las investigaciones- dice desconocer la razón por la que uno de los pilotos abandonó la cabina. "Lo que está claro es que al final del vuelo el otro piloto está solo y no se abre la puerta", concluye el investigador, que con estos datos de voz facilitados profundiza en el misterio que rodea el accidente.

Rajoy, "conmocionado" por la información

El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, se ha mostrado en su cuenta en Twitter "conmocionado" por la información facilitada por el fiscal de Marsella, Brice Robin, encargado de la investigación del accidente del avión de Germanwings en los Alpes franceses. Minutos después de concluir la rueda de prensa de Robin, el presidente el Gobierno –que se va a reunir con el Rey después de conocer la nueva información– ha lanzado un mensaje en el que asegura que se siente "conmocionado por los últimos datos facilitados por los investigadores" y expresa su "abrazo emocionado a las familias".

La identidad de los pilotos

Mientras la lísta de pasajeros facilitada este miércoles a última hora no incluía el nombre de los pilotos, estos han trascendido este mediodía. El capitán Patrick Sonderheimer tenía dos hijos, era alemán y acumulaba más de 6.000 horas de vuelo y el copiloto, Andreas Lubitz, de 27 años, vivía con sus padres y apenas tenía 630 horas de vuelo. También era alemán.

Comienzan las evacuaciones de los cuerpos

Los equipos de rescate han comenzado la evacuación de los restos de las víctimas del avión de Germanwings que se estrelló el martes en los Alpes franceses (siga la cobertura en directo), según han informado las fuerzas desplegadas sobre el terreno.

"La evacuación en helicóptero de los cuerpos de las víctimas ha comenzado", ha confirmado un coronel de la Gendarmería, sin entrar en más detalles.

Cientos de efectivos están desplegados desde el mismo día del accidente en la zona del siniestro para recuperar los restos de la aeronave. Francia consiguió extraer con éxito el contenido de la primera caja negra (sonido y voces) en la tarde de este miércoles y esperan recuperar una segunda caja que registra los parámetros técnicos.

La aeronave, un Airbus A320, no dio señales de alarma a los controladores aéreos y la investigación de la catástrofe puede llevar semanas o meses, según dijeron ayer los encargados de las pesquisas.

Así funciona el sistema de seguridad de la cabina

Para evitar la entrada de personas no autorizadas, la puerta de acceso a la cabina está reforzada y lleva incorporados varios sistemas de seguridad. Para entrar en este espacio hay un teclado numérico que posibilita, a través de una clave, el acceso a la zona de los mandos del avión o la petición de entrada a cabina. El sistema de los Airbus prevé que, después de insertar el código, hay que esperar durante medio minuto a que la puerta se desbloquee. Permanece abierta solo durante 5 segundos.

Por ahora no se tiene claro si el Airbus A320 contaba con este sistema de seguridad o si se produjo algún fallo en el caso de que sí lo llevara. Sin embargo, todo apunta a que si el piloto golpeó la puerta para entrar (según puede escucharse en la grabación) algo no funcionaba con normalidad en la aeronave.

Fue al baño y no pudo entrar en cabina

El pasado mes de febrero un vuelo de Delta Airlines con destino Las Vegas tuvo que realizar un aterrizaje de emergencia después de que el piloto saliera de la cabina para ir al baño, dejando a cargo de la nave al copiloto. A su vuelta, la puerta de la estancia no se abría y, después de comentar lo ocurrido a la tripulación, el capitán decidió comunicar a los pasajeros que se iba a proceder a un aterrizaje de emergencia en el aeropuerto internacional de Mc Carran, que no tuvo mayores consecuencias.

La Fiscalía de Düsseldorf ha comunicado que la policía alemana ha registrado las viviendas -una propia, en la misma localidad, y la familiar- del copiloto del avión de Germanwings estrellado en los Alpes, Andreas Lubitz, horas después de anuciar que solo él se encontraba en la cabina de la aeronave, que llevaba 150 personas (lista de pasajeros).

Andreas Lubitz The New York Times
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