Pedro J. Ramírez presenta su último libro en presencia de Aguirre, Bono y Zapatero

La salida de Pedro J. Ramírez de la dirección deEl Mundono ha minado supoder de convocatoria. El periodista presentó este jueves su último libro, La desventura de la libertad (La esfera de los libros),en el Ateneo de Madrid y lo hizo acompañado por, entre otros,Esperanza Aguirre, José Bono y José Luis Rodríguez Zapatero.

Los tres, de diferente talante y condición, coincidieron en la necesidad de arovechar la obra presentada para extraer conclusiones a partir de las cuales obtener una tercera España. Es decir, una nueva ruta de entendimiento que devuelva al país la ilusión que parece haber perdido.

Entre los asistentes al acto se encontrabanla líder de UPyD,Rosa Díez,la alcaldesa de Madrid,Ana Botella; losexministros 'populares'Eduardo Zaplana yAna Palacio, la exministra del PSOECristina Alberdi; el escritorÁlvaro Pombo; la historiadoraCarmen Iglesias, el juristaJavier Gómez de Liaño;el periodistaFederico Jiménez Losantos yel director deEl Mundo, Casimiro García Abadillo.

La desventura de la libertades un exhaustivo trabajode 1.200 páginas, escrito tras el hallazgo y compra en una librería de viejo del archivo personal de José María Calatrava, que relata los últimos meses del llamado Trienio Liberal.

El libro reconstruye los dramáticos cinco meses de 1823 en los que el último gobierno del Trienio Liberal de España, con los Cien Mil Hijos de San Luis avanzando sin oposición a Madrid, resiste primero en Sevilla y luego en Cádiz, mientras los generales le traicionan, las arcas públicas se quedan vacías, la diplomacia británica le abandona a su suerte y el monarca conspira para destruir el orden constitucional que ha jurado proteger.La obra va ya camino de su tercera edición después de haber vendido 20.000 ejemplares en un mes.

Si, como apunta Ramírez, en 1823 se dieron todos los ingredientes para que, en una conferencia en el Ateneo,Leopoldo Alas Clarínhablara de “la putrefacción del sistema constitucional”, ahora… “Nuestro sistema también. Si no hay una reforma de la Constitución de 1978, la desafección entre los ciudadanos y el régimen político va a abrir una brecha, en la quecabrá cualquier desenlace revolucionario”, reflexionaba el periodista en una entrevista para este diario.