Dirigentes del PSC piden a Carme Chacón que se marche a Madrid y se afilie al PSOE

Carme Chacón hace amigos por un lado y los pierde por otro. La carta abierta publicada este lunes pidiendo al Partit dels Socialistes Catalanes (PSC) que se desmarque de la estrategia rupturista del presidente catalán, Artur Mas, ha sentado realmente mal entre las filas del partido: a unos, por el fondo, a otros por las formas y a unos terceros por ambas cosas. Tanto que ya han surgido algunas voces que piden que abandone la militancia del PSC y se afilie únicamente al PSOE.

El portavoz del PSC, Jaume Collboni, lo explicó muy claro ayer, aunque con buenas palabras: “Ella conoce perfectamente la posición de su partido sobre el derecho a decidir porque éste fue aprobado democráticamente por la inmensa mayoría del consejo nacional del PSC”. Collboni aseguró que Chacón jamás había expresado ninguna opinión parecida en los órganos internos del partido. “No teníamos ninguna noticia de que tuviese esta opinión de la cumbre”, subrayó. Por tanto, para los socialistas catalanes, “la carta llega en un momento muy inoportuno y hacerla pública horas antes de que comience la cumbre no favorece la interlocución que ha de tener nuestro primer secretario en esta reunión”.

Pero hay sectores que no son tan suaves. “Se ha equivocado. Es inexplicable lo que ha hecho. En vez de publicar una carta en los periódicos, podría haber llamado por teléfono”, señalan fuentes internas del PSC a El Confidencial. El líder del PSC, Pere Navarro, no obstante, tenía conocimiento exacto de lo que Chacón iba a hacer, porque éste le envió el escrito por correo el fin de semana pasado, explicándole que lo pensaba publicar el mismo lunes.

Un veterano militante señala también que “lo que ha hecho Carmen Chacón hay que leerlo en clave personal. Ella está en otra guerra, haciendo campaña para posicionarse de cara a la secretaría general del PSOE y de ahí el desmarque del PSC, cuyos planteamientos nunca han sido bien recibidos por una parte importante de la estructura del PSOE. A esa estructura es a la que Chacón quiere atraerse”.

En esta lectura coinciden varias de las fuentes consultadas. “Hay que leer su carta en clave de Madrid, de lo que va a hacer allí, pero no en clave catalana. De todos modos, no queremos tampoco darle más importancia”, dice un actual dirigente socialista a este diario.

Pero la polémica ya está sembrada. Hay voces que piden que se vaya a Madrid y se encuadre en el PSOE. El diputado y líder del PSC en Tarragona, Xavier Sabaté, llegó a comentar ayer que su recomendación a Chacón era que se diese de baja entre los socialistas catalanes y que se afilie a la Federación madrileña del PSOE porque “es allí donde reside y donde puede desarrollar mejor su actividad política”. La recomendación, subrayó, la hace “con todo el cariño” y en base a la amistad que se profesan desde hace muchos años.

Contraataque de los catalanistas

No tan sutil fue el sector catalanista del PSC, que contraatacó rápidamente suscribiendo un escrito en el que la acusan de simplista y de caer en improvisaciones.

Ha sido el mismo grupo que ya hizo el Manifiesto de Septiembre pidiendo un Estado propio el que ha rebatido sus palabras. “No es verdad la afirmación deque el apoyo del PSC al derecho a decidir no se corresponde con sus principios y su trayectoria. Después de la liquidación del pacto estatutario de 2006,con la consiguiente liquidación del pacto constitucional de 1978, la mayor parte de los catalanes y las catalanas entiende que el Estado español ha pasado página hacia atrás”. 

Recuerda el escrito de contestación que el PSOE también aprobó en sus congresos de 1974y 1979 que “la definitiva solución del problema de las nacionalidades parte indefectiblemente del pleno reconocimiento del derecho de autodeterminación” y que, contrariamente a lo que dice Chacón, “las libertades políticas, sociales y nacionales son una sola cosa. No vale contraponerlas, es antidemocrático, es tramposo (…) Tratar de oponer supuestos intereses “de clase” es una pirueta cada vez más arriesgada por demasiado conocida y desprestigiada”.

Dicen los federalistas que tratar de enfrentar a los trabajadores de “unos y otros pueblos del Estado es un pleito que está planteado en términos muy claros, desde todos los puntos de vista y que no admite simplismos ni improvisaciones por parte de ningún responsable político”.

Una cumbre sin resultados

Mientras los socialistas pleiteaban entre ellos, Artur Mas salía airoso de la cumbre convocada para aunar criterios sobre la consulta independentista, aunque no hubo avances significativos ni acuerdos. Un alto cargo socialista señala a este diario que a pesar de la carta de Chacón, la postura del PSC es “escuchar lo que se dice y presentar nuestras propuestas”. Lo que Pere Navarro llevó a la reunión es que la consulta ha de hacerse dentro de la legalidad y, además, de mutuo acuerdo con el Gobierno central. Pero, además, los socialistas no abandonan su tesis de reclamar un Estado federal.

Para no cerrarse puertas, Artur Mas cedió que el Consejo Asesor de la Transición Nacional que ha nombrado estudie también la vía federalista como modelo territorial, aunque eso es sólo una concesión sobre el papel, ya que otra cosa será pasarlo a votación en el Parlamento. A Navarro, este planteamiento no le parece suficiente. “No jugaremos a que se nos implique en un proceso independentista por fascículos”, dijo tras la cumbre. Y arremetió contra el partidismo del Gobierno catalán de dar por hecho el referéndum independentista y de tirar por la vía de en medio creando “estructuras de Estado” cuando todavía no hay nada decidido. Aprovechó también el líder socialista para criticar al consejo asesor por su perfil netamente independentista. “El Gobierno no es neutral”, enfatizó Navarro.