Rubalcaba se debate entre mantener su apoyo institucional y tomarse la revancha ante Rajoy

Alfredo Pérez Rubalcaba debe jugar ahora el partido de la oposición en una cancha que no le agrada en absoluto. El rescate limita el margen de manioba política tanto para el Gobierno como para el PSOE, y Mariano Rajoy no lleva suficente tiempo en Moncloa como para que la responsabilidad del Ejecutivo socialista haya desaparecido de la mente del electorado. El secretario general, a quien Rajoy matuvo informado durante el día de la petición de ayuda al Eurogrupo, se debate entre mantener su apoyo institucional y tomarse la revancha por la oposición que, a su juico, ejerció el PP a la gestión de José Luis Rodríguez Zapatero.

Frente al empuje de sectores como el de Carme Chacón o Tomás Gómez, que confían en virar el discurso hacia la izquierda para dar la puntilla a Rajoy, Rubalcaba sostiene que el PSOE debe preservar su perfil institucional y permanecer como un partido de Gobierno. Ante el anuncio de Luis de Guindos de que España pedirá 100.000 millones para salvar a la banca, Ferraz optó por lanzar un doble mensaje: por un lado, se rechaza el rescate y se exige a Rajoy que dé la cara, pero, por otro, se apela al a unidad de los españoles para hacer frente a las dificultades económicas.

El líder del PSOE es consciente de que la indignación se extiende entre las bases, y que los militantes siempre esperan mayor contundencia para azotar al PP. Por ello, el respaldo de la dirección socialista se limita a defender la solvencia de España en Europa y ante las amenazas de los acreedores internacionales. Un consenso parcial que busca que el tsunami del rescate no se lleve por delante el sistema de alternancia de los dos grandes partidos en el poder, como puede suceder en Grecia.

Así, en un comunicado de la Comisión Ejecutiva Federal, la cúpula socialista afirma que “en este momento tan difícil, los españoles, todos unidos, tenemos que defender ante Europa y ante el resto del mundo que somos un país serio, con una economía solvente y que vamos a salir adelante”. En esta línea se expresó también el presidente andaluz, José Antonio Griñán, quien ayer insistió, a través de su blog y cuenta en Twitter, en la necesidad de conservar la unidad y alcanzar pactos de Estado para salir de la crisis.

El PSOE, que asumió el giró económico de Zapatero en 2010 con la obsesión de que España no fuera rescatada bajo su mandato, recuerda a Rajoy que “siempre ha trabajado para evitar el rescate, tanto cuando estaba en el Gobierno como ahora en la oposición apoyando al Ejecutivo en Europa”. Con este tono de decepción por la rendición de Moncloa, el comunicado de Ferraz tacha de “mala noticia” la petición de auxilio a la banca, y anuncia que exigirán la comparecencia en el Congreso de los Diputados de Rajoy. El mutismo del presidente ha aderezado la polémica en torno al rescate, y ha contribuido a reforzar el retrato negativo que los socialistas hacen del líder popular. 

“Que no paguen justos por pecadores”

En el plano de las críticas, los socialistas también buscan la manera de conectar con los ciudadanos que observan cómo se movilizan 100.000 millones para recapitalizar al sistema financiero, mientras los clientes de los bancos tienen que seguir afrontando las mismas dificultades para conseguir un crédito, pagar la hipoteca o recuperar los ahorros invertidos en las llamadas participaciones preferentes. “En ningún caso este rescate a la banca lo pueden pagar justos por pecadores, no puede recaer sobre los ciudadanos que ya están pagando duramente la crisis”, se asegura desde Ferraz, donde también se advierte que “todo el dinero público que se destine a la banca tiene que volver a las arcas públicas y a la sociedad.”

En estos términos se expresó Rubalcaba por la mañana, antes de conocerse el resultado del Eurogrupo, en una reunión en Ferraz con alcaldes de su partido. Pero también Chacón, que a través de Twitter, reclamó que Rajoy acuda al Parlamento, insistió en su petición de crear un "comisión de la verdad", y pidió ayuda para los afectados por las preferentes. La exministra ha recuperado su perfil público, y tras el pulso que ganó en el seno del partido a cuenta de la posición sobre Bankia, ya no se priva de colar su mensaje en los momentos importantes.

Tras la comparecencia de Guindos, el PSOE optó por limitar su respuesta a una nota de prensa, pero este domingo está prevista una ruedad e prensa del secretario general. Será al finalizar una reunión de trabajo con Griñán, Elena Valenciano, Soraya Rodríguez, Eduardo Madina, Óscar López, Inmaculada Rodríguez-Piñero y Valeriano Gómez. Durante la jornada de ayer, Rubalcaba estuvo en contacto con Rajoy, quien le mantuvo informado de las resoluciones del Eurogrupo. Ambos aprovecharon este diálogo para cerrar el nombre del subgobernador del Banco de España, que finalmente será Fernando Restoy, toda vez que la primera candidata del PSOE, Soledad Núñez, fue vetada por Cristóbal Montoro.