El PP se alía con sus enemigos para arrebatar al PSOE la alcaldía de Benalmádena

Con tal de conseguir el poder, todo vale en política. También aliarte con el enemigo al que has denunciado e incluso puesto querellas. El centro-derecha de Benalmádena, municipio malagueño pionero en el turismo de la Costa del Sol, se ha unido para presentar una moción de censura contra el alcalde socialista, Javier Carnero, primer edil desde las elecciones de 2007.

Para ello, el PP se ha olvidado de la querella que presentó en 1999 contra Manuel Crespo, en aquel entonces concejal de Playas por el Grupo Independiente de Benalmádena (GIB), por un presunto delito de tráfico de influencias y malversación de caudales públicos. Crespo ahora formará parte del nuevo gobierno de la localidad que dirigirá Enrique Moya, del Partido Popular. “En ese momento el PP se dedicó a ponernos denuncias y llevarnos a los tribunales, pero perdieron todos los juicios o los juzgados archivaron directamente las causas. Esa que a la que me hace referencia, también”, explicó Crespo a El Confidencial.

No es la única causa de los populares contra sus nuevos aliados que hasta ayer eran enemigos políticos. Hace dos años, Moya presentó una denuncia contra el grupo independiente Movimiento por Benalmádena, en la que figuraba el nombre de Mari Carmen Romero, concejal tránsfuga de este grupo, que hasta ahora sustentaba el Gobierno del PSOE, y que será la edil que permita el cambio de Alcaldía. “Fuimos contra el partido, no contra Mari Carmen, porque nos acusaban de intentar sobornarlos para presentar una moción de censura y no nos podíamos quedar callados. Luego hubo un acto de conciliación y se retiró. Tampoco pasa nada. Fue un calentón”, argumentó a este diario el futuro alcalde de Benalmádena.

El obscuro currículum de Bolín

La sombra de Enrique Bolín, quien ya fue alcalde durante el franquismo y que ha regido el municipio durante décadas, puede seguir planeando en el nuevo equipo de gobierno que asumirá la vara de mando en el pleno municipal del próximo 18 de mayo. Bolín, ex senador del Partido Popular, fundó el GIB (Grupo Independiente de Benalmádena) a semejanza de las siglas del GIL de Jesús Gil.  También copió del ex presidente de Atlético de Madrid las formas obtusas, el continuo desafío institucional y el convertir la política en un carrusel judicial sinfín. El entonces senador fue detenido en 1989 en el puerto de Gibraltar en compañía de varios menores con 20 gramos de cocaína, así como algunos vídeos pornográficos prohibidos por la legislación británica. Por ese motivo lo expulsaron del PP.

El histórico alcalde de Benalmádena se retiró de la política tras perder la Alcaldía en 2007, aunque el PSOE denuncia que la operación huele a "bolinismo". Según el secretario general del PSOE, Miguel Ángel Heredia, Carnero ha sido un regidor "con la mano tendida y que no ha buscado el enfrentamiento". Según Heredia, “ha sido atacado por quienes no admitieron que Benalmádena pidiese otras formas de gobernar”.

El secretario general del PP de Málaga, Francisco Salado, descartó el regreso de Bolín a las filas del Partido Popular. “Él cerró una etapa y no contamos con su incorporación al PP”, remarcó Salado a este diario, quien reconoció desconocer las querellas. Eso sí, precisó que ningún concejal estaba “imputado o con causa judicial pendiente”. Y añadió: “Creo que se le están sacando tres pies al gato. En las mejores familias ha habido problemas y lo que no tiene es que volver a ocurrir”.