Zapatero duda entre el 'político' Granado y el 'técnico' Vegara para relevar a Solbes

Pedro Solbes tiene los días contados en el Gobierno. Casi nadie, dentro o fuera del PSOE, alberga la más mínima duda de que el vicepresidente económico abandonará el Ejecutivo en la próxima remodelación ministerial. Superado por la magnitud de la recesión económica, criticado en el partido y sin el apoyo de José Luis Rodríguez Zapatero, las cábalas ya no se centran en si Solbes será o no relevado, sino en la fecha de su salida y, sobre todo, en la identidad de su sustituto.

Los secretarios de Estado Octavio Granado (Seguridad Social) y David Vegara (Economía) son los que cuentan con más posibilidades de reemplazar al ya amortizado Solbes, según las fuentes socialistas consultadas por El Confidencial, que aseguran que Zapatero aún se debate entre el carácter más político del primero y el perfil eminentemente técnico del segundo. Pero, sea quien sea el elegido, su capacidad de maniobra estará muy limitada por la extrema debilidad de todos los indicadores económicos y la falta de apoyos parlamentarios del Gobierno.

El Congreso, que ayer recuperó su actividad habitual después de otras dos semanas de parón por las elecciones vascas y gallegas, era un hervidero de rumores sobre la inminente crisis de Gobierno que prepara Zapatero. Diputados y periodistas cruzaban pronósticos sobre la fecha, el alcance, las repercusiones y los protagonistas de la remodelación del Ejecutivo, que algunos dirigentes socialistas situaban, incluso, para antes del final de marzo. Pero la unanimidad era absoluta acerca de la definitiva marcha de Solbes, que ayer mismo ofreció una muestra más de su ya habitual indolencia.

Al vicepresidente económico, que asistió en Bruselas a una nueva cita del Ecofin (el foro que reúne a los ministros de Finanzas de la UE), le preguntaron su opinión acerca de los insistentes rumores que le sitúan fuera del Gobierno. Y su respuesta fue: "Pregúntenle al señor Zapatero".

El único miembro del Ejecutivo que aún parece confiar, al menos públicamente, en la continuidad de Solbes es el titular de Industria. Miguel Sebastián apostó ayer por su permanencia al frente del Ministerio de Economía y Hacienda, y defendió el "buen trabajo" de Solbes para "sacar a España de la crisis económica".

El favorito 

Octavio Granado (1959) se ha ganado la confianza y el respeto de Zapatero, y cuenta con el aval entusiasta del número dos del PSOE, José Blanco. No en vano Granado, como responsable de Política Económica y Empleo en la Ejecutiva socialista, es uno de los más estrechos colaboradores de Blanco en materia económica, pese a que proviene del mundo de la enseñanza.