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Setién sacude a la Iglesia con su nuevo libro 'Un Obispo ante ETA', en el que aboga por reabrir el proceso
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Setién sacude a la Iglesia con su nuevo libro 'Un Obispo ante ETA', en el que aboga por reabrir el proceso

El obispo emérito de San Sebastián, José María Setién, irrumpirá esta semana en el tenso escenario vasco con un nuevo libro, Un obispo ante ETA, en

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Setién sacude a la Iglesia con su nuevo libro 'Un Obispo ante ETA', en el que aboga por reabrir el proceso

El obispo emérito de San Sebastián, José María Setién, irrumpirá esta semana en el tenso escenario vasco con un nuevo libro, Un obispo ante ETA, en el que vuelve a quebrar los complejos y difíciles equilibrios en el seno de la Iglesia en Euskadi. Una postura que aboga por reabrir el proceso de paz abierto en su día por Zapatero y que incide en la división que se viene viviendo en el seno de la Iglesia española durante décadas.

Nacido en uno de los feudos tradicionales de la izquierda radical -la localidad guipuzcoana de Hernani-, alabado por quienes le admiran por su altura intelectual, y denostado por sus críticos por su soberbia altivez, Setién siempre se ha resistido a ser encuadrado en las filas ideológicas del nacionalismo vasco, pese a haberse convertido con el paso de los años en una figura recurrente para el discurso del abertzalismo. Hasta tal punto es así que se le considera una de las personas a quien ha recurrido, con cierta asiduidad y siempre privadamente, el lehendakari Ibarretxe para recabar asesoramiento.

Las tesis de su nuevo libro son coherentes con la trayectoria del prelado, que siempre ha abogado por buscar cauces para la paz aun cuando ETA siguiera atentando. Setién cuestiona que la unidad de España pueda considerarse el "único bien moral" defendible -incluso contra el criterio de la Conferencia Episcopal- y mantiene, aunque él lo niegue, una postura abiertamente equidistante entre víctimas y verdugos.

Aún se recuerda la imagen de Setién pasando fríamente frente a los hijos del empresario José María Aldaya, reunidos junto a trabajadores de Alditrans en la capital donostiarra para pedir la liberación de su progenitor, que entonces llevaba 260 días secuestrado por ETA. El obispo no se dignó ni a mirarlos.

La ambigüedad de Blázquez, Uriarte et alii

El libro de Setién está llamado a escorar nuevamente a la Iglesia Vasca hacia la polémica, con unos posicionamientos de clara inspiración nacionalista. En los últimos años, el episcopado ha firmado posicionamientos muy comprometidos -Blázquez, Uriarte y Asurmedi elaboraron una pastoral crítica con la ilegalización de Batasuna- y ha apoyado el proceso. Es un hecho que la Iglesia ha estado al corriente de las negociaciones con ETA y Batasuna que siguieron a la declaración de tregua: no en vano, los contactos entre el PNV, los socialistas y el partido de Otegi se celebraron en el santuario de Loyola; y que alguno de sus miembros se encargó de ir introduciendo en los ambientes de los contactos al sacerdote redentorista Alec Reid, uno de los promotores del proceso de paz irlandés y distinguido por sus posiciones intermedias entre la izquierda abertzale y el Gobierno.

Pese a advertir sombras en el camino, Setién -que no escucha la COPE- siempre confió en el éxito del proceso. En su libro aboga por reabrir un nuevo proceso, en un momento en el que las voces de los prelados vascos no son coincidentes. Prueba de ello es que en la homilía con motivo de la festividad de la Virgen el obispo de Bilbao y presidente de la Conferencia Episcopal, Ricardo Blázquez, exigió sin ambages el final de ETA, mientras que el sustituto de Setién, Juan María Uriarte, pedía a "todas las partes" que cedan en favor de la paz.

El obispo emérito de San Sebastián, José María Setién, irrumpirá esta semana en el tenso escenario vasco con un nuevo libro, Un obispo ante ETA, en el que vuelve a quebrar los complejos y difíciles equilibrios en el seno de la Iglesia en Euskadi. Una postura que aboga por reabrir el proceso de paz abierto en su día por Zapatero y que incide en la división que se viene viviendo en el seno de la Iglesia española durante décadas.

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