Un alto cargo de Medio Ambiente se estrena con la firma de un contrato a un antiguo socio

Las empresas privadas han encontrado un filón muy rentable en la política de agua que está realizando el actual Gobierno. Es el caso de Iberhidra, una compañía hasta hace poco desconocida y que, desde la llegada del PSOE al poder, ha multiplicado por cuatro su tamaño. El 23 de febrero de 2005, Adrián Baltanás, director general de Aguas de las Cuencas Mediterráneas S.A. (Acuamed), entidad dependiente del Ministerio de Medio Ambiente, firmó su primera adjudicación. Los beneficiarios de la misma era una UTE formada por Iberhidra y Urbaconsult. Casualmente, el administrador de Iberhidra es Guillermo Casanova Campos, ex socio de Baltanás.

La adjudicación fue la primera realizada por el presidente de Acuamed nada más llegar al cargo, al resolver el expediente PI/01/04, relativo a la redacción de proyectos informativos de actuaciones urgentes para la mejora de la gestión de recursos hídricos de Málaga, por valor de 938.106,04 euros. Acuamed es la compañía pública encargada de desarrollar el denominado Plan Agua, que sustituye al antiguo Plan Hidrológico Nacional (PHN).

La compañía pública ha restado importancia a la información y ha asegurado a El Confidencial que el que “adjudica los contratos es el Consejo de Administración y no el director general. Además, es normal que existan estas coincidencias porque los ingenieros vienen y van de la empresa privada. Es lo normal”.

Desde la llegada del PSOE al poder, Iberhidra es una sociedad en auge, que, de 2003 a 2004, ha multiplicado por cuatro su facturación. En este tiempo, Iberhidra ha ascendido al puesto 28 del ranking de empresas de ingeniería adjudicatarias de la Administración del Estado, con una facturación en 2004 de 6.137.082,76 euros, según datos en poder de la patronal de las empresas españolas de Ingeniería. En 2003, esta misma sociedad ingresaba tan sólo un millón y medio de euros y ni siquiera figuraba en el ranking.

Como administradores de Iberhidra figuran Guillermo Casanova Campos y Asunción Boada Vilahur. Casanova fue socio de Adrián Baltanás en Acronia S.L., empresa ubicada en la calle San Juan Bautista, 36, de Las Rozas (Madrid) con un capital social que se elevaba a 3.006 euros en 2002, teniendo como actividad principal el servicio de hospedaje: hostales, hoteles, moteles y pensiones con restaurante.

El presidente de Acuamed, Adrián Baltanás, se dio de baja como administrador de Acronia S.L. el 8 de febrero de 2005, al ser nombrado presidente de Acuamed por la ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona.

Se da la circunstancia de que Acronia comparte sede con Iberhidra -sociedad adjudicataria del primer contrato decidido por Baltanás-, en la citada calle de San Juan Bautista, en la localidad madrileña de Las Rozas. Constituida en 1993, Iberhidra tuvo unas ventas en 2001 de 1.021 euros; que en 2002 se elevaron a 1.311.102,15 euros y en 2003, fueron de 1.466.216,34 euros.