TSK logra un pacto con la banca tras cobrar la gran obra del Bernabéu y vender activos

TSK firmó la semana pasada un nuevo contrato de financiación con la banca para superar sus recientes tensiones de liquidez. La compañía ha recibido 40 millones de euros procedentes de Santander, Caixabank, BBVA y Sabadell, a cambio de comprometerse a varias desinversiones inmediatas en México, Israel y Panamá por hasta 200 millones. Un acuerdo con el que el grupo asturiano de ingeniería gana tiempo para buscar un nuevo inversor en la segunda parte del año.

Fuentes próximas a TSK han confirmado el pacto con la banca, que meses atrás se negó a darle una nueva línea de crédito por 120 millones. La compañía gijonesa se ha tenido que conformar con una tercera parte de lo solicitado, pero esperar ingresar la cantidad esperada en un principio mediante dos desinversiones. La primera, la de unos activos en México, que valora en 60 millones y para cuya venta ha contratado a BBVA.

La segunda, en Panamá, de donde espera obtener otros 100 millones adicionales de un proyecto que ha acabado con un litigio con la empresa Avanzalia, con el embargo provisional de unos 105 millones. La compañía de ingeniería gijonesa también quiere desprenderse de un 10% de la mayor planta termosolar de Israel, cuya construcción corrió a cargo de TSK después de que Abengoa fuese excluida por problemas de financiación.

Si TSK cumple este plan de desinversiones, los acreedores, compuestos por un total de ocho bancos, se dan por satisfechos. No obstante, según fuentes financieras, el grupo necesita acometer una transacción de mayor profundidad y con un calado estructural. En concreto, una ampliación de capital con la aportación de dinero fresco de nuevos socios. Una operación que supondría la dilución de Sabino García Vallina, el actual presidente y dueño del casi el 85% del capital. El resto de las acciones está en manos de minoritarios, como Francisco Javier García y Víctor José González, ambos con el 5,2%.

Si TSK cumple este plan de desinversiones, los acreedores, compuestos por un total de ocho bancos, se dan por satisfechos

Joaquín García Rico, consejero delegado, ha reconocido que el consejo de administración ha sopesado la salida a bolsa como alternativa para conseguir reforzar los recursos propios. Esta opción, la de hacer una Oferta Pública de Suscripción (OPS) mediante la venta de acciones nuevas ya fue debatida por García Vallina y el resto de socios y consejeros, sin que hasta la fecha se haya tomado una decisión al respecto. Dados los ratios a los que cotizan las comparables de TSK, fuentes bancarias lo consideran difícil, pese a la mejora sustancial de las cuentas del grupo asturiano.

En 2023, la multinacional alcanzó unas ventas de 1.250 millones, las mayores de su historia y superiores a las registradas antes de la aparición del covid. Su beneficio operativo o Ebitda se ha elevado hasta los 70 millones, un 25% más, mientras que la deuda se mantiene en 270 millones. La compañía sostiene que el valor de los activos ajenos a la actividad, como participaciones en plantas solares e inmuebles, supera los 230 millones.

En 2023, la multinacional alcanzó unas ventas de 1.250 millones, las mayores de su historia

Las previsiones para 2024 apuntan a que este ejercicio se supera la cifra de negocio. Especialmente porque TSK ha logrado un contrato de 450 millones de euros en Puerto Rico y en los próximos días firmará una obra de más de 200 millones en República Dominicana. El plan estratégico prevé en 2026 unas ventas de 1.600 millones y un beneficio operativo de 120 millones.

La compañía, que cuenta con una plantilla de 1.500 empleados, tiene actualmente en ejecución once centrales térmicas de ciclo combinado por 6.000 megawatios en México, República Dominicana, Costa de Marfil y Mozambique, más otros 1.000 MW en plantas de renovables. No obstante, el grupo ha cogido reconocimiento internacional por ser el que ha ejecutado el revolucionario sistema de césped retráctil del nuevo Santiago Bernabéu, el estadio del Real Madrid. Un proyecto que le ha sumado 80 millones.