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Santander articula en cuatro ejes su defensa para evitar sanciones por la cuenta iraní
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Santander articula en cuatro ejes su defensa para evitar sanciones por la cuenta iraní

El banco está relativamente tranquilo por el origen británico del cliente, que no estaba sancionado, el bajo importe que tenía y porque recibió dinero en libras

Foto: Oficina de Santander en Reino Unido. (EFE/Andy Rain)
Oficina de Santander en Reino Unido. (EFE/Andy Rain)
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Las oficinas de Banco Santander han sido un hervidero desde hace una semana, cuando se tuvo consciencia de las informaciones que iba a publicar Financial Times sobre una cuenta relacionada con empresas iraníes. Desde entonces, sin embargo, los análisis legales realizados hasta ahora llevan a Santander a respirar con relativa tranquilidad respecto a los riesgos legales derivados de este caso.

Hay cuatro ejes sobre los que descansa esta relativa comodidad. El primero es que la empresa por la que se ha relacionado a Santander con el caso no figura en ningún listado de sanciones norteamericano, lo que hubiera generado un riesgo directo para el banco.

Por ello, desde la entidad señalaban el mismo lunes que "Banco Santander no ha incumplido la normativa estadounidense sobre sanciones impuestas a terceros de acuerdo a nuestra investigación". "El banco cuenta con políticas y procedimientos para asegurar que se cumplen los requisitos relativos a las sanciones. Santander continuará colaborando proactivamente con las autoridades británicas y estadounidenses pertinentes", añadían.

La segunda clave es el volumen de dinero investigado. La normativa norteamericana, por saltarse las sanciones a las empresas iraníes, fija unos umbrales que no superaron los movimientos de la sociedad clienta de Santander UK, Pisco, por lo que se ha conocido hasta ahora. Así, como publicó este medio, esta empresa recibió una transferencia de menos de 16.000 libras (unos 18.500 euros) y tenía cantidades marginales según sus registros.

Foto: Documentación de la transferencia hecha a un cliente de Santander relacionado con empresas iraníes. (EC)

Así, a 31 de diciembre de 2023, mantenía 5.962 libras en sus cuentas, y un año antes, un importe negativo de 1.911 libras. El capital y las reservas ascendían a 978 libras y la cuenta en Santander ya había sido cerrada, según publicó FT.

El tercer factor que ha aflorado en los análisis del banco español es el origen del ciudadano que estaba detrás de Pisco, Abdollah-Siauash Fahimi, un ciudadano británico. Posteriormente, se ha conocido que podría ser un testaferro de la sociedad pantalla, pero desde la entidad ven imposible haberlo detectado en su momento. Y desde el sector financiero se pone el acento en que son los gobiernos los que tendrían que tomar la responsabilidad de que deje de haber sociedades pantalla.

En el pasado, han aplicado sanciones de miles de millones a grupos como BNP, Standard Chartered o Unicredit

Y el cuarto motivo que induce a la calma es que la sociedad bajo el foco, Pisco, manejó siempre libras. Algo que a priori aleja la posibilidad de que las autoridades norteamericanas tomen cartas en el asunto. En el pasado, han aplicado sanciones de miles de millones a grupos como BNP, Standard Chartered o Unicredit.

Con todos estos factores, de momento ningún supervisor, ni estadounidense ni británico, han abierto procesos frente a Santander, ni frente a Lloyds, la otra entidad señalada por el artículo del rotativo anglosajón.

Las únicas noticias que han surgido de momento en este sentido han llegado de bufetes que están estudiando medidas por el dinero que perdió en bolsa Santander el pasado lunes, más de 3.000 millones. Son Frank R. Cruz, Block & Leviton y Bronstein, Gewirtz & Grossman.

Las oficinas de Banco Santander han sido un hervidero desde hace una semana, cuando se tuvo consciencia de las informaciones que iba a publicar Financial Times sobre una cuenta relacionada con empresas iraníes. Desde entonces, sin embargo, los análisis legales realizados hasta ahora llevan a Santander a respirar con relativa tranquilidad respecto a los riesgos legales derivados de este caso.

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