Este sistema elimina las humedades por capilaridad con ondas electromagnéticas

La Organización Mundial de la Salud establece en su guía sobre la calidad del aire interior, centrada en la humedad y el moho, una relación directa entre la presencia de estos componentes en el hogar con el desarrollo de diversas enfermedades respiratorias y alergias.

Para prevenirlo es fundamental mantener niveles adecuados de humedad y revisar el estado de las paredes y los suelos donde pueden producirse humedades por capilaridad. Estas aparecen como resultado de un fenómeno físico por el cual el agua subterránea asciende por los poros de los materiales de construcción hasta alcanzar, aproximadamente, un metro de altura. Por ello, se produce con más frecuencia entre las baldosas, las paredes de los sótanos y las plantas bajas.

Cuando esto sucede, el primer síntoma visible es la aparición de manchas en la parte baja de las paredes, que pueden llegar a producir desconchamientos en la pintura. En zonas poco ventiladas como el sótano, es posible que se produzca un fuerte olor a húmedo y que aparezca moho. Asimismo, con el paso del tiempo, se pueden producir otros problemas como abombamientos en las paredes, averías eléctricas en los enchufes, un ambiente más frío a pesar del uso de la calefacción o, incluso, daños estructurales.

Todo ello tiene diferentes consecuencias tanto para la salud (asma, reumatismo, alergias…) como para la economía, ya que el deterioro del inmueble devalúa su precio y aumenta los gastos de mantenimiento de la casa. De hecho, se estima que el deterioro de las paredes puede aumentar el gasto en calefacción en hasta un 30%.

Al producirse por factores externos como lo es el agua subterránea que se encuentra bajo la construcción del edificio y tratarse de un proceso físico, es complejo prevenir que se produzca. Una vez aparece, el procedimiento habitual para su eliminación implica llevar a cabo una obra compleja. El sistema electro-físico HS-221 se creó precisamente para evitar esto, cuando en 2011 el doctor en ciencias físicas Juan Alberto Viñas de la Cruz estaba lidiando con este problema en su residencia familiar. Al igual que el problema, esta tecnología de Humitat-Stop está basada en la física y genera unos trenes de ondas de muy baja frecuencia que rechazan las moléculas del agua hacia el subsuelo, evitando que su polo negativo esté hacia arriba.

HS-221 está certificado por la CE en Europa, la FCC en Estados Unidos y por el ICNIRP como seguro para la salud de las personas, los animales y las plantas. Se instala en una pared gruesa de la casa que de al exterior y sus ondas se transmiten por paredes y suelos, abarcando hasta 2.500 m2. Las humedades desaparecen en un plan de entre cuatro y nueve meses, dependiendo de los materiales de construcción o la antigüedad de la casa. En el caso de las paredes de ladrillo o bloques de hormigón, puede eliminarlas en menos de cuatro meses. El sistema deja en las paredes unos niveles de humedad entre el 3% y el 6%, ya que secarlo más podría deteriorar la estructura.

El nuevo modelo HS-221 PRO+, además de esto, también cumple la normativa ROHS de no contener materiales peligrosos para nuestro ecosistema e incluye un sistema geomagnético, logrando un incremento de la eficacia en un 5%. Pero lo más novedoso es que incluye un lector de las humedades y, mediante conexión Bluetooth, se transmite con una aplicación móvil válida tanto en Android como iOs. De esta forma, se puede hacer seguimiento del proceso de secado de las paredes en todo momento. Si sufres de este problema y quieres más información, puedes rellenar este formulario.