Calviño se reúne con Botín, Goirigolzarri y Torres tras amenazar con prorrogar el impuesto

El nuevo curso económico arranca con fuerza entre los grandes bancos españoles. Los presidentes de las principales entidades han sido convocados este lunes para una reunión con la vicepresidenta primera del Gobierno, Nadia Calviño, tras las amenazas de un incremento del impuesto extraordinario de la semana pasada y los mensajes para que se aumente la remuneración de los depósitos.

Según recogía la agenda para este lunes del Gobierno, el motivo de la reunión es abordar cuestiones relacionadas con la presidencia europea y a la situación económica: "Se reúne con presidentes de entidades financieras sobre los expedientes financieros que se abordan en la Presidencia española del Consejo de la UE y la situación económica, en la sede del ministerio".

Sin embargo, la vicepresidenta ha aprovechado la ocasión para lanzar un mensaje directo de que se empiecen a remunerar más los depósitos: "Se ha señalado la necesidad de seguir apoyando el crecimiento económico, a través de una oferta de crédito competitiva y la mejora en la remuneración de los depósitos", expone una nota del ministerio.

La reunión ha sido al máximo nivel, con la presencia los presidentes de las tres mayores entidades: Ana Botín, de Santander; Carlos Torres, de BBVA, y José Ignacio Goirigolzarri, de CaixaBank.

También han acudido Josep Oliu, presidente de Sabadell; María Dolores Dancausa, consejera delegada de Bankinter; Víctor Iglesias, CEO de Ibercaja Banco; Antón Arriola, presidente de Kutxabank; Juan Carlos Escotet, de Abanca, y Luis Rodríguez, de Banco de Crédito Cooperativo (BCC). También estaba prevista la asistencia de Manuel Azuaga, presidente de Unicaja, pero no pudo llegar a tiempo por los cortes que hubo en las líneas de alta velocidad.

Sobre la mesa

La reunión ha llegado en un momento de alta tensión entre las entidades y el Gobierno, sobre todo tras la reunión de finales de junio con las patronales y los mensajes de Calviño de la semana pasada. En julio, la vicepresidenta intentó una reforma del Código de Buenas Prácticas hipotecario que podría haber provocado un agujero contable al sector. Sin embargo, el sector consiguió frenarlo con la ayuda del Banco de España.

En esta línea, Economía ha afirmado que "está trabajando con el Banco de España para analizar la aplicación de los distintos mecanismos disponibles y mejorar la protección de las familias afectadas por el alza de las hipotecas, al tiempo que se continúa garantizando la estabilidad financiera".

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Junto a ello, Calviño tiene entre ceja y ceja que los bancos empiecen a remunerar los depósitos a un nivel superior al actual, como ha mostrado en la reunión.

Otro de los temas que ha sobrevolado el cónclave son las declaraciones de la semana pasada en la Cadena SER, en las que avanzó que el impuesto a la banca podría prolongarse más allá de este año, provocando una caída en bolsa al sector de más del 5%.

Calviño y los banqueros también han hablado de los fondos europeos cuyo nuevo tramo de préstamos está pendiente de despliegue, comprometiéndose a "para poner en marcha antes de final de año un mecanismo eficiente para su canalización".