El traslado de Ferrovial refuerza a Ámsterdam como heredera de la City tras el Brexit

La salida de Ferrovial a los Países Bajos ha causado cierta sorpresa en el mundo empresarial y un gran malestar y fuertes críticas por parte del Gobierno, que ha arremetido contra la decisión que llevará a cabo Rafael del Pino, presidente del grupo de infraestructuras. Un traslado que, valoraciones aparte, pone de relieve el atractivo de Ámsterdam como centro financiero europeo de referencia tras el vacío que ha dejado la City de Londres como consecuencia del Brexit. De hecho, la firma española ya trasladó hace años varias filiales desde Reino Unido a Países Bajos.

El traslado de Ferrovial no es el único que se ha producido a Países Bajos en los últimos meses/años, aunque sí es el más relevante dentro de nuestro país. Otras han optado por mudarse a París, Fráncfort o Dublín, pero parece que en esta carrera Ámsterdam ha obtenido otro respaldo para llevarse la palma. "Justo después de la finalización del proceso del Brexit, la mayor parte de la negociación de acciones denominadas en euros por parte de los inversores de la UE se trasladó a Ámsterdam, convirtiéndola en el centro de negociación de acciones número uno de Europa", explica Nicky Maan, CEO de Spectrum Markets, firma alemana propiedad de los británicos IG Group.

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Por tanto, Ámsterdam se ha erigido como el sustituto de la City de Londres, pese a los esfuerzos realizados por Reino Unido para recuperar sus volúmenes de negociación a través de diversos incentivos. El caso más claro de la incipiente hegemonía de Ámsterdam lo vemos en que empresas de calado en el mundo financiero ya se han asentado allí. El de más calado es Euronext, la sociedad que fusionó la Bolsa de Bruselas y la Bolsa de París, pero también hay otras como el mayor mercado de opciones CBOE o Turquoise, que tienen sus sedes en dicha ciudad.

"En términos de prestigio, pocos habrían apostado por Ámsterdam no sólo para sustituir a Londres como punto caliente europeo para la negociación de acciones, sino también como el mercado primario más importante para la cotización de empresas europeas", sostiene Nicky Maan

Aunque la infraestructura hubiera sido igual de favorable, si no mejor, en París o Fráncfort, existe un importante componente cultural, a juicio del experto. "La cultura no se refiere al atractivo de una ciudad como centro comercial o de fiestas, ni a su patrimonio o cocina únicos; si así fuera, ciudades como, por ejemplo, Madrid parecerían mucho más atractivas. Se refiere al mercado de capitales y, con él, a la cultura de supervisión del mercado de capitales. Aquí es donde la autoridad de los mercados holandesa, la AFM, es la más parecida a la FCA del Reino Unido en términos de competencia y mercados abiertos, pero también porque cuenta con una tradición muy sólida en el conocimiento de todos los aspectos de la negociación en las clases de instrumentos más importantes".