La CNMV deja a los bancos cargar el impuesto en los resultados de 2023

Buenas noticias para la banca. La Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) comunicó este martes a las grandes entidades financieras que no tendrán que asumir el impacto del nuevo impuesto del Gobierno en las cuentas de 2022, según confirman desde el supervisor a este medio.

El supervisor presidido por Rodrigo Buenaventura ha tomado esta decisión tras una consulta realizada a la Autoridad Europea de Valores y Mercados (ESMA, por sus siglas en inglés) y a la Junta Internacional de Normas de Contabilidad (IASB, por sus siglas en inglés). El dictamen coincide con la voluntad transmitida por el Ministerio de Economía, liderado por Nadia Calviño, de que se suavice el impacto del impuesto aprobado por el Ejecutivo, como pequeña compensación para las entidades. En los equipos de trabajo también ha estado el Banco de España.

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La CNMV justifica la decisión en que el nuevo impuesto no es tal, sino una prestación patrimonial de carácter no tributario, por lo que debe ser contabilizado como una contribución. Y al ser tal, la norma fija que se cargue el 1 de enero del año en que se aplica el cargo, que en el caso del impuesto será 2023 para los ingresos generados en 2022, y 2024 para los de 2023.

De este modo, las grandes entidades financieras tendrán que reflejar el coste asociado al nuevo impuesto en sus cuentas del primer trimestre de este año o en las del primer semestre. En caso de haber sido considerado un impuesto, tendrían que haber incluido el impacto en los resultados que están cerrando estos días de las cuentas de 2022, que de este modo tendrán un beneficio mayor.

De golpe

Según la comunicación hecha por la CNMV, las entidades tendrán que cargar el impuesto de golpe, sin periodificación, y dentro de una partida distinta a la de los ingresos y los impuestos. Aun así, no podrá deducirse del impuesto de sociedades, tal y como recoge la ley aprobada a finales de 2022.

El impuesto solo afecta a las entidades españolas que ingresaron más de 800 millones en 2019. Tendrán que pagar un 4,8% de sus ingresos netos por intereses y comisiones de 2022 y 2023, con el objetivo de recaudar más de 3.000 millones en ambos años.