Las estaciones de esquí se reinventan en verano para alcanzar los 100 M de euros en ingresos

¿Qué ocurre con las estaciones de esquí en el periodo estival en un país dominado por el turismo de sol y playa? Tras el impacto que supuso la pandemia para el sector, este tipo de instalaciones se han visto en la obligación de ampliar su cartera de servicios para sobrevivir. De esta forma, incluyendo actividades relacionadas con el turismo rural, el senderismo o las rutas ciclistas, podrán alcanzar la cifra del año pasado —100 millones de euros en ingresos— y ampliar el número de visitantes de la última campaña invernal: 4,5 millones.

Tomando como referencia una de las estaciones más famosas de España, Baqueira Beret, su propuesta veraniega pasa por ofrecer a los visitantes deportes al aire libre desde el mes de julio hasta septiembre. Algunas de estas propuestas son las rutas de ‘hiking’, como las que llevan hasta la zona de Beret pasando por Orri o de vuelta hasta Baqueira 1500. Además, estos itinerarios combinan el uso del teleférico y los telesillas con una oferta de caminos de BTT para los aficionados al ciclismo que podrán acceder a nuevos senderos a través de los remontes de la estación. Todas estas actividades están acompañadas por servicios gastronómicos y hoteleros.

Algunas de las propuestas para el verano incluyen rutas en BTT en las que se puede remontar la bicicleta con los telesillas del esquí

“Cada vez son más los que prefieren aprovechar sus vacaciones en parajes naturales, rodeados de tranquilidad y con una gran variedad de deportes para realizar al aire libre. Con este aumento de oferta, queremos desestacionalizar las épocas de gran afluencia de clientes y aprovechar eventos como la Ultra-Trail de Mont-Blanc para alargar el verano ofreciendo actividades paralelas”, explica a El Confidencial y 2Playbook Xavier Ubeira, director comercial de la estación.

Un programa similar presenta Sierra Nevada, que pone el foco en el senderismo y las rutas en bicicleta eléctrica, aunque suma las actividades relacionadas con la astronomía, la observación de aves o la naturaleza a su catálogo. Una de las novedades que la estación granadina ha incorporado durante los últimos años es la celebración de campamentos de verano para los más pequeños, tanto deportivos como enfocados al aprendizaje de idiomas. Las instalaciones también permiten el uso de sus remontes, sus piscinas climatizadas o actividades que van desde los trineos rusos hasta los cars.

Lo mismo sucede con la estación catalana de La Molina. Las instalaciones operadas por Ferrocarrils de la Generalitat de Catalunya han incluido dentro de sus servicios un ‘forfait’ semanal y otro de temporada para todos los que quieran acceder a su ‘bike park’. Además, los turistas también pueden optar por dar un paseo en telecabina, acceder a una piscina climatizada o realizar distintos circuitos de senderismo diseñados para conocer la fauna y flora de la zona.

La magia de la montaña como propuesta

En la estación castellanoleonesa de San Isidro, el turismo activo y las actividades de aventura son los grandes protagonistas con barranquismo, escalada y ‘rafting’ como algunos de sus planes más populares. Sin embargo, sus instalaciones también disponen de rutas de senderismo y BTT.

Por su parte, en el caso de la estación pirenaica de Aramón, propiedad del Gobierno de Aragón e Ibercaja, se ofrece una amplia gama de actividades que van desde el uso de los telecabinas y el telesilla, con el objetivo de ofrecer una panorámica de la zona, hasta actividades deportivas como el senderismo, el ‘trail running’, el barranquismo, el piragüismo y la hípica, o gastronómicas como una amplia oferta de restaurantes o grupos de enoturismo para descubrir los vinos de la región.

Finalmente, una de las propuestas más innovadoras es la de Valdesquí, en la sierra de Madrid, que organiza observaciones astronómicas desde su planetarium, con charlas sobre mitología, espectáculo de luces y oferta gastronómica y servicios de hostelería.