Santander, BBVA, CaixaBank y Sabadell ponen en venta 5.000M en activos tóxicos

Avalancha de desinversiones en la banca española. Las mayores entidades del país están preparando la venta de créditos valorados en alrededor de 5.000 millones de euros, según fuentes del mercado consultadas por este medio. Las entidades más activas son Santander, con tres carteras valoradas en 1.800 millones, y BBVA, que ultima una valorada en 1.400 millones.

Los otros dos bancos saliendo al mercado son CaixaBank, con el traspaso en marcha de dos operaciones de unos 1.200 millones, y Sabadell, que tiene a punto una operación de casi 400 millones y estudia una adicional de un importe que podría ser igual o mayor.

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J. Zuloaga

Junto a estos grandes grupos, otras entidades como Kutxabank, empresas como Carrefour y fondos como Waterfall y GoldenTree tienen también ventas en marcha por cerca de 2.000 millones, lo que eleva el volumen de operaciones en curso a cerca de 7.000 millones.

Hasta ahora, el banco más activo es el presidido por Ana Botín. La operación más importante es el traspaso de 700 millones en hipotecas refinanciadas, que salió al mercado en diciembre del año pasado y cuyo ganador se conocerá pronto. Este se quedará los activos a través de una titulización. A esta operación se suman otras dos recientes: una de 1.000 millones en colas hipotecarias, que son lo que falta por cobrar de los créditos inmobiliarios impagados una vez ejecutada la garantía, y otra de 100 millones —Proyecto Villota— de préstamos de Santander Consumer Finance (SCF).

Paso atrás de BBVA

En el caso de BBVA, hay una de cal y otra de arena. En primer lugar, la entidad presidida por Carlos Torres ha decidido paralizar el traspaso de una cartera de entre 400 y 500 millones que puso en el mercado en noviembre, el Proyecto Minolta, con préstamos de baja calidad de pymes. Sin embargo, las ofertas han estado muy por debajo de lo esperado. En su lugar, el banco vasco ha diseñado una nueva operación de 1.400 millones —Proyecto Iroque— en préstamos fallidos, que se espera salga pronto al mercado.

Por su parte, CaixaBank tiene dos ventas en marcha. Una de créditos empresariales —Proyecto Guggenheim—, como publicó este medio, y otra que ha salido al mercado más recientemente: el Proyecto Yellowstone, con 800 millones en hipotecas impagadas, ambas asesoradas por KPMG. Se trata de una de las mayores operaciones que salen al mercado desde antes del covid.

Mientras, Banco Sabadell ya tiene casi en marcha su primera cartera tras un año de parón y diseña una segunda. La que va más avanzada es una operación de créditos sin garantía de pymes y personas físicas de entre 300 y 400 millones, bautizada Proyecto Austro. La otra venta —Proyecto Cora— todavía no tiene cerrado el perímetro, pero será de un importe similar y de créditos con garantía inmobiliaria.

Todas estas operaciones reflejan que poco a poco el mercado 'distressed' (oportunista) español vuelve a animarse, aunque sin llegar a ser lo de los años 2017-2019, cuando los bancos vendían carteras de volúmenes de miles de millones. La cercanía del vencimiento del periodo de carencia de los ICO (Instituto de Crédito Oficial) y las incertidumbres de la guerra hacen que los bancos quieran acelerar la venta de estos activos problemáticos.

En cuanto al resto de operaciones ya en marcha, destacan los 1.400 millones que quiere vender a través de una titulización Waterfall, de carteras compradas hace años, y los 200-300 millones que quiere colocar Kutxabank en hipotecas dudosas. Carrefour también quiere volver al mercado con un paquete de 100 millones, cifra similar a la que quiere traspasar GoldenTree.