La cadena de gimnasios de Fernando Torres entra en pérdidas el año del covid

Adiós a los números verdes con el impacto de la pandemia. Fernando Torres, el entrenador auxiliar del juvenil 'A' del Atlético de Madrid y antiguo delantero del conjunto madrileño y de la selección española, ha visto como su cadena de gimnasios ha entrado en pérdidas como consecuencia del cierre de sus centros, de manera obligada, durante el primer estado de alarma en España. A este golpe, se ha unido más tarde el miedo por parte de muchos usuarios a acudir a las instalaciones, lo que ha provocado una fuerte pérdida de abonados.

Con este escenario, no parece descabellado que New Fitness Group SL, la sociedad de Fernando Torres bajo la que se agrupan sus participaciones en los gimnasios 9Fitness, haya incurrido en números rojos. En 2020, año en el que impactó el covid, la empresa obtuvo unas pérdidas de 207.100 euros y, por tanto, dejó atrás los beneficios logrados un año antes, que ascendieron hasta los 101.940,37 euros. ¿El motivo? Principalmente, la caída de sus ingresos. El montante ha pasado de los 1,88 millones de euros hasta los 1,07 millones, lo que supone un desplome del 43%, según las cuentas publicadas en el Registro Mercantil este lunes.

El que fuera delantero de la selección española decidió apostar por irrumpir en el negocio del fitness junto a los hermanos Javier y Óscar Meléndez. Esta situación es la que explica que bajo New Fitness Group SL estén el 50% del capital de la sociedad New Fitness Aranjuez SL, el 50% de New Fitness 4 SLU y el 100% de New Fitness 5 SLU. Por tanto, no todos los centros bajo la marca 9Fitness -uno en Madrid capital, uno en Aranjuez y otro en Pinto-, son suyos al 100%.

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Esta entrada en números rojos también la notará el propio Fernando Torres en su bolsillo. El empresario tiene formalizado un préstamo participativo con la sociedad cuyo vencimiento es el 26 de marzo de 2023 y la remuneración es el 10% de los beneficios anuales antes de impuestos y del cálculo de los intereses del préstamo participativo. Montante que no percibirá con respecto a los resultados obtenidos en 2020, quedando pendiente de pago un importe de algo más de 1,08 millones de euros.

La compañía ha aprovechado el año pasado para liquidar sus deudas a corto plazo y aumentarlas a largo plazo con un 'extra' de liquidez. Así, la deuda a corto plazo con entidades de crédito por 129.956,75 euros ha pasado a cero mientras que la de largo plazo se ha disparado de los 21.913 euros hasta los 598.413 euros tras suscribir un préstamo con Banco Santander.

Según ha alertado la compañía en la presentación de sus cuentas, los malos resultados de 2020 podrían repetirse durante este ejercicio debido a la incertidumbre que rodea a la pandemia. Así lo reconoce su administrador, Óscar Meléndez, al destacar que "la incertidumbre por la pandemia se mantiene por lo que los Administradores y la Dirección realizan una monitorización continúa siguiendo la evolución de la pandemia con objeto de minimizar sus impactos tanto en términos de salud y seguridad en el trabajo como en términos económicos y financieros, definiendo e implementando planes de acción".

No solo los gimnasios de Torres acusan el golpe

El impacto de la pandemia por el coronavirus ha azotado a la mayoría de nuestro tejido empresarial. Desde las grandes compañías hasta las más pequeñas han visto como el virus afectaba a su día a día y prácticamente todas ellas, salvo las de sectores considerados esenciales, sufrieron sus consecuencias de una manera u otra. Los gimnasios no han sido ajenos a ella y la mala marcha de la cadena de Fernando Torres ha sido la tónica dominante dentro del sector.

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Según el estudio 'El Impacto Económico Covid-19 en Instalaciones Deportivas y Gimnasios' de la Federación Nacional de Empresarios de Instalaciones Deportivas (Fneid) los gimnasios ingresaron 1.246 millones menos en 2020, lo que supone que los centros de fitness hayan tenido una facturación un 53% por debajo de la de 2019. En este análisis se destacaba incluso como el 44% de las empresas se vería abocada al cierre si la situación, por aquel entonces, se prolongaba durante los próximos seis meses y un 45% de los empresarios destacaba que su normalidad operativa podría comenzar en el primer trimestre de 2022 mientras que un 33% indicada que sería entre el tercer y cuarto trimestre de 2022.

La patronal del fitness ha reclamado al Gobierno medidas para mitigar el impacto del covid como la bajada del IVA, la deducción de los servicios deportivos en el IRPF, así como convocatorias vinculadas a los Fondos Europeos Next Generation asociadas a la recuperación de los centros deportivos y gimnasios.