Prudential, el gigante de los seguros, se une a Azora para invertir 150M en última milla

Prudential, una de las mayores aseguradoras del mundo, ha unido fuerzas con Azora para aprovechar el 'efecto Amazon' y hacerse con una cartera de activos logísticos de última milla, nombre con que se conoce en la jerga del sector a las naves e inmuebles industriales ubicados a las puertas de los grandes núcleos urbanos para garantizar un rápido servicio.

A través de su brazo inversor PGIM (Prudential Global Investment Management), la entidad estadounidense ha creado una sociedad conjunta con la gestora española, dotada con un capital de 75 millones de euros, que, teniendo en cuenta un apalancamiento del 50%-60%, le confiere una capacidad de inversión de entre 150 y hasta cerca de 200 millones de euros.

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Las fuentes consultadas aseguran que el nuevo matrimonio nace con la vocación de ejecutar el plan de compras rápidamente, en un plazo de dos años, y que estas adquisiciones se llevarán a cabo en los principales núcleos urbanos de España y Portugal, como Madrid, Barcelona, Oporto y Lisboa.

Aunque PGIM será el socio mayoritario y quien aportará el grueso de los fondos a la sociedad conjunta, Azora también invertirá una parte de capital, además de que será la firma gestora del nuevo vehículo.

La nueva sociedad nace con un capital de 75 millones y capacidad de inversión por 150M

Esta alianza es complementaria a la socimi Milepro que acaban de echar a rodar Azora e Indosuez, la división de gestión de patrimonios y banca privada de Crédit Agricole, y pone de manifiesto la clara apuesta de la gestora dirigida por Concha Osácar y Fernando Gumuzio por el mercado logístico.

El auge del comercio electrónico ha convertido este tipo de activos, hasta hace pocos años el patito feo de la inversión inmobiliaria, en objeto de deseo de todos los grandes institucionales, que también encuentran en estas naves un oasis en medio del desierto de tipos cero y negativos en que se mueve la economía mundial.

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En función de la ubicación y perfil de riesgo de la cartera, los activos de última milla arrojan rentabilidades del 8%-9%, con un colateral, las propias naves, que se ubica en las puertas de las grandes capitales, lo que 'a priori' ofrece un atractivo mayor que las grandes naves situadas en polígonos industriales a varios kilómetros.

Entre los grandes inversores internacionales que han apostado con fuerza por este tipo de activos están Blackstone, que a través de su vehículo Mileway compró el año pasado a Transportes Gallastegui sus instalaciones en cuatro provincias; Hines, que también movió ficha con la adquisición de una cartera a Allegra; Invesco, que se hizo con el mayor parque logístico de última milla de Madrid a finales del año pasado, o Goodman, que acaba de comprar Ciudad Pegaso en la capital.